El dilema del joven centroamericano: arriesgar la vida qued¨¢ndose o emigrando
Seis de cada 10 v¨ªctimas de homicidios en la regi¨®n son j¨®venes entre 15 y 24 a?os
El ¨¦xodo de menores centroamericanos a Estados Unidos es tanto un im¨¢n hacia la posibilidad de un futuro mejor en ese pa¨ªs como escape de una realidad en sus pa¨ªses de origen que, literalmente, es fatal: 6 de cada diez homicidios son cometidos contra j¨®venes.
Y si a eso se suma que m¨¢s de la mitad de la poblaci¨®n centroamericana tiene entre 15 y 24 a?os, se entiende por qu¨¦ esta migraci¨®n masiva es principalmente de menores de edad.
En efecto, los estudiosos del fen¨®meno coinciden en que detr¨¢s de ¨¦ste ¨¦xodo est¨¢ la ola de inseguridad que sacude a Centroam¨¦rica desde hace m¨¢s de 20 a?os, y que corroe lentamente los tejidos familiares y econ¨®micos de la regi¨®n.
Una simple comparaci¨®n nos ofrece una muestra de la gravedad del problema: la violencia en la regi¨®n se cobra 18.000 vidas al a?o, mientras que en Espa?a, con una poblaci¨®n similar, no llegan a las 400.
Adem¨¢s, en 2007 se encontraron 4.5 millones de armas de fuego en Centroam¨¦rica, la mayor¨ªa de ellas ilegales, y actualmente existen m¨¢s de 900 maras, que cuentan un total de 700.000 miembros.
La mayor¨ªa de estos j¨®venes provienen de comunidades pobres donde impera el desempleo, escasean los servicios de agua potable o alcantarillado, apenas tienen acceso a la educaci¨®n o a oportunidades laborales. En este contexto, el riesgo de involucrarse en actividades delictivas asociadas al narcotr¨¢fico es elevado.
¡°El crimen y la violencia afecta a todas las esferas de la vida, desde el d¨ªa a d¨ªa de ciudadanos y comunidades hasta el desarrollo, creaci¨®n de empresas, inversiones internacionales o la legitimidad de las instituciones p¨²blicas¡±, explica Andr¨¦s Villaveces, experto en seguridad del Banco Mundial.
Esta migraci¨®n masiva, aparte de generar una tragedia humana para miles de familias, est¨¢ tambi¨¦n vaciando a los pa¨ªses implicados del capital humano del futuro, en fen¨®meno que varios expertos no dudan en definir como la generaci¨®n perdida de Centroam¨¦rica.
Se calcula que el 67% de los j¨®venes en edad laboral de Honduras, Guatemala y El Salvador dejan sus pa¨ªses, y que esto cuesta a los gobiernos un estimado de 80.000 millones de d¨®lares, tanto por fuga de cerebros como por los costos de repatriaci¨®n. Adicionalmente, el crimen y la violencia tambi¨¦n conllevan costos econ¨®micos exorbitantes: desde el 3% del PIB en Chile y Uruguay, hasta m¨¢s del 10% del PIB en Honduras, incluyendo gastos policiales, de seguridad y de salud asociados a este flagelo.
Oportunidades: el arma principal contra la violencia
La respuesta a la inseguridad pasa por varias acciones simult¨¢neas, que deben transcender la esfera p¨²blica: el fen¨®meno exige, seg¨²n los expertos, un esfuerzo coordinado de los gobiernos nacionales y locales, la sociedad en general y las propias comunidades.
Las organizaciones multilaterales se han sumado a esta batalla en a?os recientes con respaldo t¨¦cnico y financiero. Por ejemplo, el Banco Mundial y el BID han aunado recursos y experiencia para ayudar a crear la estrategia regional de seguridad, y mejorar la recolecci¨®n de estad¨ªsticas sobre el crimen violento con la creaci¨®n de un observatorio regional.
Y el impacto de este tipo de programas parece visible. Por ejemplo en Honduras -que tiene una media de 71 muertes por cada 100,00 habitantes, lo que lo convierte en el pa¨ªs m¨¢s violento del mundo- muchos vecindarios cuentan ahora con mejor alumbrado e infraestructura, gracias a una iniciativa llamada Barrio Ciudad. Los espacios verdes y las instalaciones deportivas tambi¨¦n ayudan a que los j¨®venes ocupen su tiempo libre en actividades no delictivas.
"Estamos contentos porque el impacto se vio r¨¢pidamente. Antes el problema era bien serio. El proyecto ha cambiado bastante el vivir de todos nosotros en el barrio", explica Adali Correa, l¨ªder comunitario de Villanueva, Honduras.
Otro ejemplo lo encontramos en el Movimiento J¨®venes Contra la Violencia (JCV) en Costa Rica, una iniciativa regional dirigida por j¨®venes cuya misi¨®n es promover la seguridad en Centroam¨¦rica mediante la movilizaci¨®n comunitaria y el impulso de un cambio de pol¨ªticas p¨²blicas. Hoy en d¨ªa cuenta con sucursales en los siete pa¨ªses centroamericanos y m¨¢s de 200 miembros activos y han sido invitados para presentar sus recomendaciones sobre pol¨ªticas en el Foro Presidencial de la Regi¨®n Centroamericana.
¡§La presencia de buenas infraestructuras que sean usadas frecuentemente por la gente sirve como una especie de vigilancia pasiva de los propios ciudadanos. Y la actividad social y comunitaria asociada a estos espacios p¨²blicos agradables y f¨¢ciles de ver, sin lugares escondidos ni poco visibles, contribuye a reducir las actividades delictivas¡±, explica Villaveces.
Robert Valls es productor online del Banco Mundial
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