La primera filial en Latinoam¨¦rica

La primera filial del Santander en Am¨¦rica Latina fue en Argentina en el a?o 1963. Pero no todo ha sido f¨¢cil desde entonces. En la crisis de 2002, Emilio Bot¨ªn lleg¨® a amenazar con una retirada, pero Argentina logr¨® sortear aquella debacle?y en los 11 a?os de kirchnerismo el sector bancario, en el que el Santander ocupa el segundo puesto por patrimonio neto, ha sido uno de los que m¨¢s beneficios ha obtenido.

El grupo espa?ol es el tercer banco de Argentina por dep¨®sitos, detr¨¢s de los estatales Naci¨®n Argentina y Provincia de Buenos Aires, y es el segundo por pr¨¦stamos, por debajo del Naci¨®n. Cuenta con 337 oficinas y 6.600 empleados. Esta estructura sufri¨® un ajuste con el corralito, pero se ha ido ampliando en los ¨²ltimos a?os.

Si bien el Santander llevaba en Argentina desde la d¨¦cada del 60, su presencia era muy reducida a la banca mayorista hasta que en los 90, durante el Gobierno del peronista neoliberal Carlos Menem (1989-1999), adquiri¨® el Banco R¨ªo y pas¨® a ser uno de los m¨¢s importantes del pa¨ªs, poco antes del colapso financiero en el Gobierno de Fernando de la R¨²a (1999-2001).

"Estamos convencidos de la solidez del sistema financiero argentino, que consideramos un verdadero activo del pa¨ªs", dec¨ªa Bot¨ªn en 2000, pero al a?o siguiente se produjo una feroz fuga de capitales y la posterior congelaci¨®n de los dep¨®sitos. En enero de 2002, cuando asumi¨® el poder el peronista Eduardo Duhalde, el banquero espa?ol se reconoci¨® "pesimista" y advirti¨® que la permanencia de la entidad en Argentina depend¨ªa de que existiese un "sistema financiero viable". En marzo de aquel a?o, un juez orden¨® la declaraci¨®n de Ana Patricia Bot¨ªn y otros siete banqueros argentinos y extranjeros en una causa que investigaba la salida de capitales y el posterior corralito por presunta violaci¨®n de la entonces ley de subversi¨®n econ¨®mica.

La hija de Bot¨ªn nunca compareci¨® ante los tribunales. En mayo de 2002, Duhalde viaj¨® a Madrid y se reuni¨® con Bot¨ªn, que le expres¨® su decisi¨®n final de mantener al Santander en Argentina, pero le pidi¨® que cumpliera con las recomendaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), incluida la derogaci¨®n de la ley de subversi¨®n econ¨®mica. Ese mismo mes, la norma fue derogada por el Congreso argentino.

Bot¨ªn, que visitaba Argentina cada uno o dos a?os y sol¨ªa hacer turismo en la Patagonia, fue uno de los primeros en destacar la recuperaci¨®n econ¨®mica del pa¨ªs en el Gobierno del peronista de izquierdas N¨¦stor Kirchner (2003-2007). Su banco fue pionero en ofrecer descuentos y plazos mayores de cuotas sin inter¨¦s para fomentar el consumo en aquel tiempo. En 2012, cuando acabaron los a?os de alto crecimiento, Bot¨ªn se quej¨® de que el Gobierno de Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner hubiese prohibido el giro de beneficios de las filiales de los bancos extranjeros a sus casas matrices, pero en abril pasado el Santander R¨ªo fue el primero en recibir la autorizaci¨®n para repatriar ganancias. Argentina representa el 4% del negocio del banco.