HRW acusa al Gobierno de Uzbekist¨¢n de ¡°torturar¡± a los presos pol¨ªticos
Entre los abusos est¨¢n asfixia con bolsas de pl¨¢stico, violaciones y uso de electrochoque
Los presos pol¨ªticos en Uzbekist¨¢n sufren "torturas" y viven en "p¨¦simas" condiciones, seg¨²n un informe de Human Rights Watch (HRW). Entre los abusos denunciados est¨¢n simulaciones de asfixia con bolsas de pl¨¢stico y m¨¢scara de gas; agresiones sexuales y uso de electrochoque. La ONG exige al Gobierno "la liberaci¨®n inmediata y sin condiciones" de los encarcelados.
El informe ¡ªde m¨¢s de 100 p¨¢ginas y titulado "Hasta el Final"¡ª resalta que entre los detenidos est¨¢n activistas, periodistas y cr¨ªticos del Gobierno, que han luchado por una reforma democr¨¢tica del pa¨ªs o encabezado cambios en el ¨¢mbito cultural, art¨ªstico, religioso y filos¨®fico. La ONG ha entrevistado y analizado los casos de 34 actuales prisioneros y 10 expresos.
Los entrevistados por HRW afirman que los servicios de seguridad les han asfixiado con bolsas de pl¨¢stico y m¨¢scaras de gas, han amenazado con agredir f¨ªsicamente a sus familiares, les han negado el acceso a agua o comida, les han humillado, han abusado de ellos sexualmente y les han torturado mediante el uso de electrochoque.
Steve Swerdlow, un investigador de HRW para Asia Central, ha asegurado que en al menos 29 de estos 44 casos se puede demostrar que han recibido malos tratos, abusos o "torturas", ya sea durante la fase de prisi¨®n preventiva o en el cumplimiento de sus penas. "Tashkent no puede aparentar durante mucho m¨¢s tiempo que el encarcelamiento pol¨ªtico no existe en Uzbekist¨¢n", ha a?adido.
Uzbekist¨¢n ha negado que existan presos pol¨ªticos en sus c¨¢rceles. Las autoridades afirman que los abusos est¨¢n siendo eliminados y que algunos agentes acusados de tortura han sido enjuiciados.
HRW denuncia tambi¨¦n que algunas condenas han sido ampliadas arbitrariamente como la del opositor pacifista Murod Juraev, cuya pena ha sido alargada por el Gobierno en cuatro ocasiones desde su encarcelamiento en 1994. La ¨²ltima vez fue en 2012, cuando se le acus¨® de "pelar las zanahorias de forma incorrecta" en la cocina de la c¨¢rcel. "La tortura, el secuestro, las detenciones en r¨¦gimen de incomunicaci¨®n, el confinamiento en solitario y la ampliaci¨®n de las sentencias son abusos innombrables que nadie deber¨ªa sufrir", ha asegurado Swerdlov.
La ONG destaca adem¨¢s que las potencias occidentales ¡ªEE UU y Europa¡ª han antepuesto la utilidad de Uzbekist¨¢n como ruta de acceso a Afganist¨¢n a las sanciones por la vulneraci¨®n de los Derechos Humanos. HRW insta a estos pa¨ªses a imponer sanciones econ¨®micas y militares a Tashkent. "Los socios internacionales de Uzbekist¨¢n deben decir al presidente Karimov que pagar¨¢ un alto precio a no ser que su Gobierno deje de detener y torturar a activistas pac¨ªficos, periodistas y creyentes religiosos".
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