El Congreso examina la respuesta de EE UU al ¨¦bola
El hospital de Texas se disculpa por ¡°errores¡± en el primer caso diagnosticado La segunda enfermera infectada ser¨¢ trasladada a un hospital especializado En Boston podr¨ªan tener un nuevo caso
?Se aplicaron los protocolos de seguridad correctos en el hospital de Texas donde se diagnostic¨® el primer caso de ¨¦bola en Estados Unidos? ?Estaba el personal m¨¦dico lo suficientemente protegido y entrenado? ?Se est¨¢ haciendo lo suficiente para impedir que lleguen nuevos casos al pa¨ªs?
Como tantos ciudadanos, el Congreso de Estados Unidos ten¨ªa muchas preguntas sobre la respuesta de las autoridades a la epidemia de ¨¦bola que ya ha llegado a territorio norteamericano y para contestarlas sent¨® este jueves en el banquillo a los m¨¢ximos responsables de contener el brote, entre ellos el director del Centro de Control de Enfermedades (CDC), Tom Frieden.
Las respuestas no difieren sin embargo demasiado de lo que se ha venido afirmando hasta la fecha tanto desde la Casa Blanca como de los organismos sanitarios al frente de la respuesta m¨¦dica: que se pueden hacer las cosas mejor y que se est¨¢n adecuando los protocolos y respuestas, s¨ª. Que se puede impedir la llegada de nuevos casos mediante prohibiciones de viaje, no. Que para detener un brote en EE UU hay que frenar la expansi¨®n del ¨¦bola en ?frica Occidental, sin duda.
¡°Una de las cosas que m¨¢s miedo me dan del ¨¦bola es que se pueda diseminar m¨¢s a¨²n por ?frica, porque si esto ocurre, entonces se podr¨ªa convertir por mucho tiempo en una amenaza a nuestro sistema de salud y a los cuidados sanitarios que podemos proporcionar¡±, advirti¨® Frieden nada m¨¢s comenzar las tres horas de duras preguntas y cuestionamientos de los congresistas.
Por su parte, un alto responsable del Hospital Presbiteriano de Dallas, Texas, el doctor Daniel Varga, admiti¨® ante el panel que se cometieron ¡°errores¡± con el primer caso de ¨¦bola diagnosticado en EE UU, Thomas Eric Duncan, quien muri¨® hace una semana.
¡°Desafortunadamente, en nuestro tratamiento inicial de Duncan, pese a nuestras mejores intenciones y a contar con un equipo m¨¦dico altamente cualificado, cometimos errores. No diagnosticamos correctamente sus s¨ªntomas. Lo sentimos profundamente¡±, declar¨® desde Texas al panel.
Errores en el diagn¨®stico, as¨ª como una ruptura del protocolo de seguridad -a¨²n no identificada- entre los trabajadores que lo cuidaron cuando ya fue puesto en aislamiento, son los que han dado pie a la infecci¨®n de dos de las enfermeras que lo trataron, Nina Pham y Amber Vinson.
El hecho de que esta ¨²ltima tomara un avi¨®n comercial con 132 personas a bordo cuando ya ten¨ªa algo de fiebre -aunque el CDC le dio el visto bueno para seguir su viaje dado que no llegaba al umbral de temperatura marcado, de 38 grados cent¨ªgrados, algo ahora en revisi¨®n- ha incrementado la preocupaci¨®n en todo el pa¨ªs.
La compa?¨ªa a¨¦rea Frontier ha decidido dejar en tierra a seis miembros de la tripulaci¨®n que trabajaron en ese vuelo de Cleveland, Ohio, a Dallas. Tres escuelas de Belton, Texas, cancelaron este jueves sus clases para ¡°limpiar y desinfectar a fondo¡± los edificios y autobuses escolares, dado que dos estudiantes del distrito estaban a bordo del avi¨®n que tom¨® Vince cuando ya ten¨ªa algo de fiebre.
¡°Me frustra el no haber sido informados hasta tarde en la noche de que el CDC estaba reevaluando el riesgo para la salud¡± de los pasajeros de ese vuelo, critic¨® la superintendente del distrito, Susan Kincannon, al anunciar durante la noche el cierre preventivo de los colegios.
Varios centros escolares de Cleveland tambi¨¦n cerraron porque un empleado del distrito viaj¨® en el avi¨®n -aunque no en el mismo vuelo- que Vinson.
Adem¨¢s, mientras Frieden y otros altos funcionarios respond¨ªan bajo juramento en el Capitolio a las preguntas de los congresistas, el Hospital de Yale-New Haven, en el Estado de Connecticut, anunciaba que est¨¢ tratando a un paciente con s¨ªntomas similares al ¨¦bola cuyo diagn¨®stico sin embargo no ha sido a¨²n confirmado. Se trata de un estudiante de epidemiolog¨ªa de la Universidad de Yale que recientemente regres¨® de Liberia, aunque los m¨¦dicos dijeron confiar en que no se confirmar¨¢ que padece el virus.
La enfermera Vinson, de 29 a?os, fue trasladada la pasada noche desde Dallas al Hospital Emory de Atlanta, donde fueron atendidos dos de los tres ciudadanos estadounidenses repatriados que han superado el ¨¦bola en EE UU tras contraerlo en Liberia.
La primera sanitaria infectada, Nina Pham, ser¨¢ trasladada por su parte al hospital especializado del Servicio Nacional de Salud en las afueras de Washington.
Consciente de la preocupaci¨®n nacional ante los nuevos casos de ¨¦bola, el presidente estadounidense, Barack Obama, cancel¨® este jueves por segundo d¨ªa su agenda para supervisar en persona la crisis.
Frieden por su parte asegur¨® en el Congreso que el gobierno est¨¢ dispuesto a estudiar cualquier mejora en la seguridad que se proponga, pero una vez m¨¢s rechaz¨® de forma contundente la idea de que prohibir los vuelos desde los pa¨ªses m¨¢s afectados sea una manera eficaz de contener el contagio en EE UU. Todo lo contrario, advirti¨®.
¡°Ahora mismo, sabemos qui¨¦n est¨¢ entrando¡± en el pa¨ªs, se?al¨®. Sin embargo, si se emite una prohibici¨®n de viaje desde Liberia, Guinea o Sierra Leona a EE UU, lo m¨¢s probable es que los que quieran realizar el viaje lo hagan a trav¨¦s de terceros pa¨ªses, algo nada dif¨ªcil en vista de lo ¡°porosas¡± que son las fronteras en esa regi¨®n.
Y ello, subray¨® Frieden, complicar¨ªa extremadamente el seguimiento en EE UU de posibles casos porque ¡°no seremos capaces de controlar que no tienen fiebre antes de volar, no podremos controlar que no tienen fiebre al llegar, tampoco podremos hacer un historial detallado (a su llegada) para ver si han sido expuestos¡± y tampoco se podr¨¢ vigilar en caso necesario a los contactos que hayan mantenido.
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