Teresa Romero, hero¨ªna en Nueva York
La sanaci¨®n completa de la espa?ola coincidi¨® con un encuentro formativo de miles de sanitarios de EE UU
El nombre de Teresa Romero, la enfermera espa?ola libre de ¨¦bola, recorri¨® con aires de hero¨ªna el abarrotado pabell¨®n del Javits Center de Nueva York, junto al r¨ªo Hudson, donde miles de trabajadores sanitarios se hab¨ªan reunido este martes para conocer las ¨²ltimas medidas preventivas contra la enfermedad dictadas por el Centro de Prevenci¨®n de Enfermedades (CDC, por sus siglas en ingl¨¦s) de Estados Unidos. El azar quiso que la noticia de que Romero ya no presenta rastros del virus en su sangre coincidiera con la multitudinaria sesi¨®n formativa convocada por las autoridades de salud federales y locales, y el sindicato de profesionales sanitarios 1199. ¡°Es una excelente noticia y doy mi enhorabuena a la enfermera espa?ola. Hay miedo y preocupaci¨®n entre los profesionales. Por eso han acudido tantos aqu¨ª hoy. Y por eso, la curaci¨®n de la compa?era nos anima a todos a prepararnos mejor para proteger mejor¡±, declar¨® a EL PA?S Estela V¨¢zquez, vicepresidenta ejecutiva de 1199, que agrupa a unos 400.000 afiliados.
La concentraci¨®n de Nueva York ten¨ªa por objetivo calmar la ansiedad de los m¨¦dicos y trabajadores sanitarios y, al mismo tiempo, formarles en los nuevos protocolos de actuaci¨®n y en el uso de los materiales de seguridad. Sin embargo, los pol¨ªticos presentes, el Gobernador Andrew Cuomo y el alcalde Bill de Blasio, ambos dem¨®cratas, pusieron la carga emocional y, en ocasiones, patri¨®tica de una sesi¨®n sobre la que en todo momento flot¨® al recuerdo de Amber Vinson y Nina Pham, las dos enfermeras del Presbyterian Hospital de Dallas contagiadas durante el tratamiento del liberiano fallecido, Thomas Eric Duncan.
Fueron las referencias b¨¦licas las que encendieron a una multitud llegada desde decenas de hospitales y centros de salud del Estado, acompa?ada por otros miles de profesionales de todo el pa¨ªs que siguieron el acto por un circuito de televisi¨®n. ¡°Sois el frente de esta nueva guerra y me siento orgulloso de vosotros¡±, proclam¨® Cuomo. ¡°Hermanas y hermanos, es un honor estar aqu¨ª hoy con gente que ha decidido servir a los dem¨¢s. Ten¨¦is una misi¨®n, sois nuestra primera l¨ªnea defensiva, y est¨¢is bendecidos por ello¡±, a?adi¨® De Blasio.
Las referencias a otras situaciones de alarma del pasado no faltaron. ¡°No es la primera vez que tenemos un desaf¨ªo como este. Recuerdo la crisis del ¨¢ntrax, el sida en los 80, el ¨¦bola en 1976¡ No entend¨ªamos qu¨¦ eran, no sab¨ªamos nada¡ Pero aprendimos y luchamos. Este es el mayor esfuerzo que hemos hecho nunca. Lo que acabar¨¢ con el ¨¦bola son los protocolos, la formaci¨®n, la preparaci¨®n, el no cometer errores¡±, dijo Cuomo. El Gobernador lanz¨® a los sanitarios una petici¨®n: ¡°Ten¨¦is dos misiones: aprender a tratar la enfermedad y ayudar a quitar el miedo a la gente. Cuando vay¨¢is a casa explicad a vuestra familia, a vuestros vecinos, a vuestros amigos qu¨¦ es lo que hac¨¦is, c¨®mo lo hac¨¦is, c¨®mo es el ¨¦bola¡±.
Flanqueado por la bandera de Estados Unidos y la del Estado de Nueva York, Cuomo apel¨® al sentimiento de unidad de sus conciudadanos ante crisis mayores: ¡°Me siento orgulloso de ser el Gobernador de Nueva York porque en Nueva York hay neoyorquinos. Somos duros, tenemos coraje, compasi¨®n, creemos en la unidad. Cuando hay que dar un paso adelante, lo damos; cuando hay una crisis, como en el 11-S, respondemos. As¨ª somos nosotros. Nadie se une como nosotros¡±. De Blasio no se qued¨® atr¨¢s. ¡°Os dedic¨¢is a la sanidad porque cre¨¦is en algo, porque quer¨¦is ayudar a la gente. Nadie se hace sanitario si quiere un trabajo f¨¢cil. Pero esa, al mismo tiempo, es vuestra bendici¨®n, porque cre¨¦is en lo que hac¨¦is¡±.
Tras los sentimientos, las directrices. Las nuevas normas dictadas por el CDC fueron expuestas a la audiencia por un grupo de profesionales p¨²blicos y privados, expertos en el combate de enfermedades infecciosas. El acto incluy¨® una exhibici¨®n en vivo, a cargos de dos sanitarios, sobre c¨®mo utilizar el traje y los materiales necesarios para tratar a los enfermos de ¨¦bola. A partir de ahora, ning¨²n profesional podr¨¢ atender a un contagiado sin haber recibido la formaci¨®n para ello y sin saber a la perfecci¨®n c¨®mo usar el traje protector, que no debe dejar expuesto ni un mil¨ªmetro de piel y constar de m¨¢scara, no gafas protectoras. Un supervisor vigilar¨¢ siempre la puesta y retirada del uniforme.
Es un honor estar aqu¨ª hoy con gente que ha decidido servir a los dem¨¢s. Ten¨¦is una misi¨®n, sois nuestra primera l¨ªnea defensiva" Bill De Blasio, alcalde de Nueva York
¡°?C¨®mo evito el contagio si al quitarme el traje este est¨¢ contaminado?¡±, fue una de las preguntas formuladas, entre aplausos, por los profesionales presentes. ¡°Habr¨¢ una ducha previa en una zona de esterilizaci¨®n, entre otras medidas. Nunca estar¨¦is solos¡±, respondi¨® Arjun Srinivasan, capit¨¢n director del centro de prevenci¨®n de infecciones de la ciudad, que acudi¨® de uniforme. ¡°?Qu¨¦ hay que hacer con una habitaci¨®n que haya sido ocupada por un enfermo de ¨¦bola¡±?, pregunt¨® otra persona. ¡°Los protocolos de esterilizaci¨®n son muy rigurosos. Y ser¨¢ una zona aislada. Personal especializado se encargar¨¢ de ello¡±, contest¨® Mary Travis Basset, del Departamento de Salud de Nueva York.
¡°?C¨®mo procedemos si los s¨ªntomas, como diarreas o v¨®mitos, se presentan inesperadamente y no tenemos el traje puesto?¡±, quiso saber una mujer. ¡°Es fundamental no llegar a ese punto. Nadie sospechoso de tener ¨¦bola puede ser tratado sin protecci¨®n¡±, afirm¨® Brian Koll, director de prevenci¨®n de infecciones del hospital Mount Sinai, quien record¨® c¨®mo se transmite el ¨¦bola. ¡°El ¨¦bola es fuerte dentro de nosotros, pero muy d¨¦bil fuera. La soluci¨®n a todos vuestros problemas es s¨®lo una: pr¨¢ctica, pr¨¢ctica y pr¨¢ctica. S¨®lo con la pr¨¢ctica conseguiremos evitar lo que sucedi¨® en Dallas¡±, a?adi¨®.
Debbie Friedlan, enfermera del hospital St. John de Queens, traslad¨® un mensaje de coraje: ¡°Ahora s¨ª tenemos la medidas de protecciones suficientes, pero tenemos que estar preparados. Tenemos que estar preparados por nosotros mismos y por los dem¨¢s. Tenemos que estar preparados para proteger¡±.
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