El apoyo europeo a Ucrania permite zanjar la guerra del gas con Rusia

Europa ha sido el detonante indirecto del conflicto que enfrenta desde hace casi un a?o a rusos y ucranios, pero tambi¨¦n la llave de los fr¨¢giles acuerdos logrados hasta ahora. La Comisi¨®n Europea invirti¨® las ¨²ltimas 48 horas de la era de Jos¨¦ Manuel Dur?o Barroso en tratar de resolver un conflicto enconado: la guerra del gas que manten¨ªa el grifo cerrado a Ucrania desde el pasado mes de junio. Rusia logr¨® arrancar el jueves por la noche la clave de un acuerdo varias veces frustrado: el respaldo europeo a los pagos ucranios, que impedir¨¢, en palabras de Barroso, que Europa ¡°pase fr¨ªo el pr¨®ximo invierno¡±.

Con la improvisada firma de dos documentos al filo de la medianoche entre el jueves y el viernes, la Comisi¨®n da por enterrada la guerra del gas. Eso ha requerido que Bruselas tenga que adelantar una ayuda de 760 millones de euros acordada con Kiev para que el Gobierno de Arseni Yatseniuk pueda hacer frente a los pagos energ¨¦ticos. Consciente de que abonar facturas con dinero europeo que estaba previsto destinar a inversiones bordea lo pactado hace unos meses, una portavoz del Ejecutivo comunitario se apresur¨® a aclarar que Europa no ha extendido ning¨²n tipo de garant¨ªas de pago y que no habr¨¢ ¡°dinero fresco¡± para ese cometido, sino que provendr¨¢ de partidas ya previstas.

M¨¢s all¨¢ del inter¨¦s por ayudar a Ucrania, el arrojo europeo no es meramente altruista. Rusia cubre un tercio de las necesidades energ¨¦ticas de la UE y la mitad del gas procedente de Mosc¨² transita por Ucrania. Aunque el flujo suspendido desde junio solo afectaba a Kiev, la UE quer¨ªa evitar una situaci¨®n como la de 2009, cuando las rencillas entre rusos y ucranios derivaron en que Ucrania se quedara con parte del gas destinado a pa¨ªses comunitarios que transitaba por sus tuber¨ªas. ¡°El acuerdo interesa a las tres partes¡±, coinciden las fuentes consultadas.

Ucrania promete abonar 3.100 millones de d¨®lares (2.460 millones de euros) que adeuda a Rusia en dos tramos: 1.450 millones de d¨®lares (1.160 millones de euros) este mes y 1.650 millones de d¨®lares (1.320 millones de euros) antes del 31 de diciembre. A cambio, Mosc¨² garantiza el normal suministro a Ucrania desde 36 horas despu¨¦s de recibir el primer pago del paquete, pactado hasta el 15 de marzo.

M¨¢s all¨¢ del adelanto del dinero europeo, las maltrechas arcas ucranias abonar¨¢n la energ¨ªa con recursos de Naftogaz ¡ªla mayor gasista del pa¨ªs¡ª y con un cr¨¦dito de 1.400 millones de d¨®lares (1.120 millones de euros) del Fondo Monetario Internacional (FMI), que tambi¨¦n ha dado su benepl¨¢cito a esta soluci¨®n. Ucrania se felicita por haber logrado una rebaja en el precio mantenido hasta ahora, que descender¨¢ a 378 d¨®lares por cada 1.000 metros c¨²bicos de gas consumidos hasta finales de a?o y a 365 d¨®lares en el primer trimestre de 2015. Aunque Bruselas asegura que la antigua rep¨²blica sovi¨¦tica cuenta con fondos para cubrir su demanda, no descarta conceder otro pr¨¦stamo conjunto con el FMI, como pide Kiev. Mosc¨², por su parte, no se f¨ªa y exige a las autoridades ucranias ¡ªque adeudan cantidades desde noviembre de 2013¡ª pagos adelantados para cualquier nueva compra.

Tantos esfuerzos invertidos tienen un horizonte temporal muy limitado: el pr¨®ximo mes de marzo. Aunque los l¨ªderes europeos conf¨ªan en que ese pacto propicie la descongelaci¨®n de las relaciones entre la UE y el Kremlin, la diplomacia comunitaria es consciente de la fragilidad de la situaci¨®n, con Rusia dispuesta a reconocer las elecciones de los separatistas del este ucranio y la UE sin intenci¨®n de levantar las sanciones econ¨®micas que aplica desde julio (y con una nueva denuncia que plante¨® ayer ante la Organizaci¨®n Mundial del Comercio por los aranceles que ha impuesto Mosc¨² sobre la importaci¨®n de productos europeos: papel, aceite de palma y neveras europeos.

M¨¢s que el fin de una guerra, la soluci¨®n hallada en Bruselas para el gas ruso a las puertas del invierno supone una tregua en un conflicto de largo alcance, que puede volver a activarse en cualquier momento.