¡°Iguala es un test para la credibilidad de M¨¦xico¡±

Jos¨¦ Miguel Vivanco es el director para Am¨¦rica de Human Rights Watch. Acaba de terminar una gira por Guerrero y el Estado de M¨¦xico para investigar los dos casos que han convulsionado el pa¨ªs: la desaparici¨®n de 43 estudiantes en Iguala y la matanza de 22 civiles a manos del Ej¨¦rcito en Tlatlaya.

Pregunta.??Est¨¢ M¨¦xico mejor o peor en materia de derechos humanos que antes de la llegada del presidente Enrique Pe?a Nieto?

Respuesta.?Est¨¢ igual. Hay una continuidad en las pol¨ªticas antinarc¨®ticas y siguen los cuerpos de polic¨ªa mafiosos e incompetentes. Se mantiene un contexto de impunidad, con escasos resultados en las investigaciones, sobre todo, de desapariciones. No es posible sostener que se vaya a mejor.

P. Ha se?alado que Iguala s¨®lo es comparable a Tlatelolco como crisis de derechos humanos. ?Conf¨ªa en que M¨¦xico salga de esta situaci¨®n?

R. Depende de si hay voluntad pol¨ªtica de lograr resultados. De Tlatelolco nunca se sali¨®, nunca se estableci¨® la verdad completa. Y tampoco en Chiapas o con los abusos en el mandato de Felipe Calder¨®n.

P. ?Le parece adecuada la reacci¨®n gubernamental en el caso de Iguala?

R. Tlatlaya e Iguala son un test para la credibilidad del Gobierno actual. Estos casos deben ser resueltos sobre la base de pruebas s¨®lidas y confiables. No sobre soluciones pol¨ªticas ni atajos.

P. ?Cree que hay una responsabilidad de Estado en lo ocurrido en Iguala?

R. Hay una responsabilidad de Estado. Aunque detr¨¢s est¨¦ el narco, son funcionarios p¨²blicos, polic¨ªas de Iguala los que atacan y secuestran. Y despu¨¦s hay un fallo en la reacci¨®n estatal y federal.

P. ?C¨®mo sit¨²a a M¨¦xico en derechos humanos respecto a otros pa¨ªses de Am¨¦rica?

R. No hacemos rankings. Hay demasiadas diferencias entre pa¨ªses. Pero en violencia, corrupci¨®n e impunidad y violaciones de derechos humanos en la guerra contra las drogas, M¨¦xico est¨¢ entre los casos m¨¢s graves desde la ¨¦poca de Calder¨®n.

P. En Tlatlaya hubo ocultamiento, pero finalmente se ha ejercido la acusaci¨®n contra los militares. ?No significa esto un paso adelante?

R. En Tlatlaya hay una versi¨®n inicial oficial mentirosa en la que se habl¨® de un enfrentamiento y que fue ratificada por las m¨¢ximas autoridades de la Secretaria de Defensa Nacional y del Estado de M¨¦xico. Si no fuera por la declaraci¨®n de un testigo a un medio de comunicaci¨®n, a¨²n estar¨ªan defendiendo esta versi¨®n. Ahora, la investigaci¨®n abierta hace responsables de las muertes a siete soldados rasos y culpa a un teniente por encubrimiento. Eso no es cre¨ªble. Tienen que seguir investigando para dar con todos los responsables de la masacre y tambi¨¦n con quienes les encubrieron.

P. De sus palabras se deduce que el gran problema mexicano es la impunidad.

R. Es la impunidad, la falta de rendici¨®n de cuentas. Los poderosos no pagan. Hay permanentes atajos, no hay investigaciones serias; los casos se resuelven mediante presiones y abusos. Impunidad, por ejemplo, es que desde 2006 no se haya registrado ninguna condena por desaparici¨®n forzada en M¨¦xico.?Y ese es el contexto que permite a polic¨ªas como los de Iguala disparar sin rendir cuentas a nadie.