Cinco razones por las que Lima es la capital del planeta

Ya es de conocimiento en cada rinc¨®n del planeta que el actual ritmo de calentamiento global tendr¨¢ un impacto sin precedentes en la econom¨ªa mundial y traer¨¢ consecuencias nefastas a sus habitantes. Tambi¨¦n que el tiempo para que los gobiernos acuerden soluciones definitivas y duraderas se est¨¢ agotando.?

Pero este tiempo limitado puede detenerse en Lima, al menos por una semana. Expertos internacionales, organismos multilaterales y representantes de 195 pa¨ªses se han citado en la capital del Per¨² para trazar las l¨ªneas maestras hacia el dise?o de un nuevo acuerdo mundial para reducir las emisiones de carbono, que deber¨¢ materializarse el a?o que viene en la cumbre de medio ambiente de Par¨ªs.?

Este pacto est¨¢ llamado a convertirse en el punto de partida de un nuevo modelo de desarrollo que deber¨¢ desprenderse paulatinamente de los combustibles f¨®siles para situar a las energ¨ªas renovables en el centro del tablero. ?Est¨¢ el mundo preparado para este escenario??

Estas son las 5 metas clave que se debaten esta semana en Lima, en cuya resoluci¨®n est¨¢n depositadas las esperanzas de un mundo m¨¢s consciente y respetuoso con el medio ambiente:?

1) Fijar un precio internacional del carbono

Seg¨²n los expertos, poner un precio al carbono es uno de pasos necesarios para evitar que la temperatura del planeta aumente 4¡ãC en las pr¨®ximas d¨¦cadas. La raz¨®n es la siguiente: con un precio predecible del carbono se pueden promover inversiones seguras que no supongan m¨¢s emisiones.?

La buena noticia es que en la Cumbre del Clima de la ONU de septiembre pasado, 74 pa¨ªses y m¨¢s de 1.000 empresas e inversores expresaron su apoyo para fijar un precio del carbono. Aunque las negociaciones sobre un acuerdo clim¨¢tico global contin¨²an, hoy en d¨ªa 39 pa¨ªses y 23 entidades regionales y locales han fijado un precio al carbono, o tienen planes concretos de hacerlo. Estos pa¨ªses son responsables del 22% de las emisiones mundiales.?

La conversaci¨®n en la COP 20 de Lima gira no tanto en torno a cu¨¢ndo se puede fijar sino c¨®mo se puede hacer de forma inmediata.?

2) Movilizar al sector p¨²blico y privado para conseguir m¨¢s recursos para la lucha contra el cambio clim¨¢tico?

Seg¨²n la Agencia Internacional de la Energ¨ªa (AIE), el mundo necesita alrededor de 1 bill¨®n de d¨®lares anuales para combatir los efectos del cambio clim¨¢tico y mitigar sus consecuencias.?

Como es imposible que el sector p¨²blico movilice tal cantidad de dinero, el debate actual se centra en c¨®mo atraer fondos privados. La alternativa dominante es la siguiente: se deben gestionar eficientemente las inversiones p¨²blicas para que ellas mismas capten capital privado. Es decir, el dinero p¨²blico debe convertirse en una especie de se?uelo que provoque la inversi¨®n de las empresas. Para ello, coinciden los expertos, los inversionistas necesitan tener confianza en las pol¨ªticas p¨²blicas para hacer negocios a largo plazo.?

Es en este proceso que la participaci¨®n de organismos multilaterales puede ayudar a que los inversores privados adquieran el grado de confianza necesaria para realizar sus desembolsos.?

3) Reducir las emisiones de carbono entre el 40% y el 70% para 2050 y a cero para 2100?

Seg¨²n un informe del Banco Mundial, las emisiones totales de gases de efecto invernadero deben empezar a caer en los pr¨®ximos a?os y llegar a cero en la segunda mitad del siglo con el fin de evitar los peores efectos del cambio clim¨¢tico.?

Un informe del PNUMA examina si las promesas hechas por los pa¨ªses est¨¢n en camino de cumplir lo acordado internacionalmente de mantener el calentamiento global por debajo de 2¡ãC. La respuesta es que por el momento no se est¨¢n cumpliendo esas promesas.?

El reciente pacto entre EE UU y China (los dos pa¨ªses m¨¢s contaminantes) sobre el recorte de las emisiones ofrece cierta esperanza, aunque sigue siendo urgente un compromiso m¨¢s firme y generalizado. El acuerdo prev¨¦ que EE UU recorte sus emisiones de gases de efecto invernadero entre un 26% y un 28¡ã%, mientras que China empezar¨¢ a reducirlas a partir de 2030. ?

4) Utilizar a las ciudades como plataforma de un mundo sostenible?

Las ciudades son los motores del crecimiento econ¨®mico -representan el 80% del PIB mundial- pero tambi¨¦n consumen dos terceras partes de la energ¨ªa del planeta y representan el 70% de las emisiones de gases de efecto invernadero.?

Dadas estas cifras, parece evidente que las ciudades son clave para abordar el problema del cambio clim¨¢tico. El ideal de ciudad que se plantea -todav¨ªa muy alejado de la realidad- es el siguiente: n¨²cleos urbanos con bajas emisiones de carbono y poca contaminaci¨®n, con uso extendido de energ¨ªas limpias, y que sean inclusivos, econ¨®micamente competitivos y que sit¨²en a los ciudadanos y su bienestar en el centro de la acci¨®n. De vuelta a la realidad, actualmente solo el 2% de las ciudades de todo el mundo tienen planes de acci¨®n clim¨¢tica.?

Paralelamente, solo en Latinoam¨¦rica, 29 millones de personas viven en ciudades costeras vulnerables al aumento del nivel del mar y a ciclones tropicales (ambos fen¨®menos est¨¢n llamados a incrementarse en un mundo m¨¢s caliente). Esto hace imprescindible mayor cantidad de fondos para crear infraestructuras m¨¢s seguras y adaptadas, sistemas m¨¢s eficaces de monitoreo del clima y mejores servicios para las poblaciones m¨¢s afectadas.?

De todas formas, el impulso mundial est¨¢ creciendo: en la Cumbre del Clima de la ONU, varios organismos internacionales concretaron una alianza de financiamiento clim¨¢tico para estimular las inversiones en infraestructura urbana respetuosa con el medio ambiente.?

5) Acordar mecanismos para desarrollar energ¨ªas limpias eficientes?

Los temas energ¨¦ticos sobre la mesa en Lima son los siguientes: cu¨¢les son las medidas pol¨ªticas m¨¢s eficientes para contener las emisiones y expandir la eficiencia energ¨¦tica, y c¨®mo propiciar un cambio generalizado hacia las energ¨ªas renovables.?

La iniciativa global Energ¨ªa Sostenible para Todos se plantea tres objetivos para el 2030: acceso universal a electricidad y combustibles limpios para cocinar; duplicar el porcentaje de energ¨ªa proveniente de fuentes renovables (del 18% al 36%); y duplicar la tasa de mejora de la eficiencia energ¨¦tica. Ochenta y cinco pa¨ªses han optado por esta iniciativa, y muchos actores p¨²blicos, privados y no gubernamentales est¨¢n apoyando su implementaci¨®n.?

Robert Valls es productor online del Banco Mundial