Dinosaurios en el Caribe

Justo cuando and¨¢bamos debatiendo sobre si la Guerra Fr¨ªa, te¨®ricamente finiquitada el 9 de noviembre de 1989 en Berl¨ªn, se nos estaba colando por la puerta ucrania, las agencias de prensa nos informan de una nueva fecha a ponderar. Pero no se enga?en, aunque en los medios guste hacer historia con may¨²scula a la m¨ªnima ocasi¨®n, la Guerra Fr¨ªa no termin¨® el mi¨¦rcoles 17 de diciembre de 2014. Esto no quiere decir que la decisi¨®n de Obama no sea hist¨®rica; lo es, sin duda. Pero como ocurre tantas veces en la vida, desde que uno cursa la solicitud hasta que llega el certificado suele pasar algo de tiempo. Que el ¡°algo de tiempo¡± necesario para que Estados Unidos y Cuba se enteraran de que el muro de Berl¨ªn se hab¨ªa ca¨ªdo haya sido de nada menos que un cuarto de siglo s¨ª que es algo hist¨®rico. Convengamos entonces en que, uno, lo que ha acabado esta semana son 25 a?os de prejuicios ideol¨®gicos, inercias pol¨ªticas y perezas mentales y, dos, que tanta estulticia, y tan sim¨¦trica y bien repartida entre Washington y La Habana, merece un estudio en profundidad. Eso s¨ª, siempre nos quedar¨¢ Corea del Norte, convertida para la posteridad en parque tem¨¢tico del estalinismo din¨¢stico.

Que se abra un tiempo nuevo no significa, sin embargo, que ese tiempo sea igual para todos. Porque aunque Estados Unidos lleve d¨¦cadas equivoc¨¢ndose con Cuba, son los hermanos Castro los que han perdido 25 a?os y los que han hecho perder a los cubanos 25 a?os que nadie les va a devolver. En ese tiempo, sus iguales ideol¨®gicos y herederos han sabido, desde China a Venezuela pasando por Vietnam y Rusia, adaptarse tanto econ¨®mica como pol¨ªticamente a un mundo abierto y cambiante. Si los Castro no fueran semejantes dinosaurios habr¨ªan tomado nota de que hoy en d¨ªa no s¨®lo es perfectamente posible para los comunistas mantenerse en el poder practicando el capitalismo de Estado, sino que, como demostr¨® Hugo Ch¨¢vez, el socialismo del siglo XXI consiste en legitimarse electoralmente mediante elecciones peri¨®dicas y aparentemente libres, pero fraudulentas de ra¨ªz, por el hostigamiento a la oposici¨®n democr¨¢tica y la prensa libre. Tan torpes son los hermanos Castro que ni se dieron cuenta de que pod¨ªan convocar cuantas elecciones quisieran y ganarlas.

Con su audaz decisi¨®n, Obama va a eliminar el ¨²ltimo parapeto ideol¨®gico que permite sobrevivir a un r¨¦gimen corrupto moralmente y quebrado econ¨®micamente. Lo ideal ser¨ªa que la desaparici¨®n de las coartadas permitiera una transici¨®n pac¨ªfica desde el periodo jur¨¢sico de la Guerra Fr¨ªa hasta una verdadera liberalizaci¨®n pol¨ªtica y econ¨®mica donde los cubanos puedan ser libres y prosperar. Teniendo en cuenta los v¨ªnculos hist¨®ricos, econ¨®micos y culturales, Espa?a y la Uni¨®n Europea podr¨ªan, en realidad, deber¨ªan, jugar un papel de acompa?amiento de ese proceso. Pero para ello necesitar¨ªamos que los dinosaurios se echaran a un lado y se enteraran de que no han ganado a Estados Unidos, sino perdido.

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