El misterio del esp¨ªa desaparecido

?D¨®nde est¨¢ Rolando Sarraff Trujillo? Esa es la pregunta que se hacen muchos, no solo la familia de este cubano supuestamente liberado hace m¨¢s de dos semanas tras pasar casi dos d¨¦cadas en una c¨¢rcel en Cuba acusado de espionaje.

Nadie parece encontrar a Roly, su apodo familiar. Este hombre de 51 a?os es el que, para sorpresa de su propia familia, varios medios de comunicaci¨®n estadounidenses identificaron como el misterioso agente que Washington logr¨® canjear, junto con el contratista Alan Gross, por tres esp¨ªas cubanos encarcelados en Estados Unidos. Ese acuerdo abri¨® las puertas al restablecimiento de relaciones diplom¨¢ticas con La Habana anunciado por el presidente Barack Obama el pasado 17 de diciembre.

Con esa decisi¨®n, Estados Unidos pon¨ªa fin a uno de los cap¨ªtulos m¨¢s largos de la Guerra Fr¨ªa. Pero los misterios y rumores dignos de una novela de la era sovi¨¦tica que rodean a¨²n la identidad del agente prometen seguir llenando nuevas p¨¢ginas.

Washington contin¨²a sin confirmar ni desmentir abiertamente que Rolando Sarraff sea en verdad ese esp¨ªa al que Obama calific¨® como ¡°uno de los m¨¢s importantes agentes de inteligencia que Estados Unidos tuvo en Cuba¡±. ¡°No vamos a comentar nada, m¨¢s all¨¢ de decir que fue liberado en Cuba y transferido por el Gobierno de Estados Unidos¡±, manifest¨® una fuente gubernamental a EL PA?S bajo condici¨®n de anonimato.

Pero medios como The New York Times insisten en que Roly es Sarraff. Tampoco lo ponen en duda expertos en el espionaje cubano en ambas orillas: desde Chris Simmons, antiguo especialista en Cuba de la Agencia para la Inteligencia de Defensa (DIA) de EE UU, a Domingo Amuchastegui, que trabaj¨® para la inteligencia cubana hasta 1994. ¡°Sin duda, el pez gordo [del canje] era Sarraff¡±, asegura Amuchastegui. El hecho de que su nombre haya sido filtrado se debe, a su juicio, a presiones ¡°para que justificaran el canje¡±. Sin un nombre concreto, apunt¨®, el acuerdo con Cuba podr¨ªa haber tenido menos credibilidad.

El caso es que Sarraff, que durante todos sus a?os en prisi¨®n se comunic¨® de forma regular con su familia ¡ªsus padres siguen en Cuba, aunque sus hermanas viven en Espa?a¡ª, no ha dado se?al de vida alguna desde mediados de diciembre. El d¨ªa 16, la v¨ªspera del anuncio de Obama, Roly no hizo la llamada de rigor a sus padres. Poco despu¨¦s, su familia supo que hab¨ªa salido de la c¨¢rcel de m¨¢xima seguridad Villa Marista donde hab¨ªa estado preso los ¨²ltimos meses. Ah¨ª se pierde su rastro.

¡°Seguimos sin saber nada¡±, confirm¨® ayer su hermana Vilma Sarraff, que reside en Cuenca. Tampoco sus padres, que siguen viviendo en La Habana, han vuelto a tener noticias de su hijo. ¡°Ni el Gobierno de Cuba ni el de Washington han dicho nada del paradero de Rolando Sarraff¡±, corrobora Elizardo S¨¢nchez. Su organizaci¨®n, la Comisi¨®n Cubana para los Derechos Humanos y la Reconciliaci¨®n Nacional (CCDHRN), hace un minucioso seguimiento de los presos pol¨ªticos en Cuba, y en sus listas figur¨® durante a?os Sarraff Trujillo.

Seg¨²n S¨¢nchez, ¡°todo el mundo infiere que ¨¦l viaj¨® a Estados Unidos el 17 de diciembre. Ahora mismo ¨¦l est¨¢ en manos de las autoridades norteamericanas, que debieran de alguna forma informar a los padres, que son dos ancianitos que est¨¢n bastante mal de salud y desesperados porque no saben el paradero de su hijo. No est¨¢n respetando el inter¨¦s de los padres y de otros familiares en cuanto a saber de Rolando¡±, lament¨®.

Amuschastegui no cree, sin embargo, que vaya a haber noticias inminentes sobre Rolando Sarraff: ¡°Ni se ver¨¢ a ese se?or ni se sabr¨¢ de ¨¦l en alg¨²n rato¡±.

¡°?l no va a contactar a nadie, familia incluida, porque por razones estrictamente profesionales, la CIA, el FBI o quien est¨¦ trabajando con ¨¦l en este momento, tiene que agotar un procedimiento riguroso, largo, tedioso, de comprobaciones, de preguntas, de interrogatorios que es indispensable¡±, subray¨® el antiguo especialista en espionaje.

Pero seg¨²n fuentes oficiales estadounidenses, el agente liberado ¡°no est¨¢ detenido ni retenido¡± y, si quisiera, ¡°podr¨ªa contactar con su familia¡±. ¡°Se trata de una persona que ha pasado por muchas cosas, y hay protocolos de seguridad que se deben guardar, pero ¨¦l puede entrar en contacto con su familia si quiere hacerlo¡±, asegur¨®. El misterio sigue, pues, servido.