Al Qaeda y el Estado Isl¨¢mico
Uno de los yihadistas que atentaron contra la revista Charlie Hebdo, Ch¨¦rif Kouachi, asegur¨® el viernes, a una cadena de televisi¨®n francesa, haber sido ¡°enviado por Al Qaeda en Yemen¡±. Por su parte, el autor del acto de terrorismo en el supermercado jud¨ªo de Porte de Vincennes, Amedy Coulibaly, declar¨® al mismo medio de comunicaci¨®n estar afiliado al Estado Isl¨¢mico (EI). Kouachi y Coulibaly estaban relacionados entre s¨ª. ?C¨®mo dar sentido a esta aparente contradicci¨®n, dado que Al Qaeda y el Estado Isl¨¢mico (EI) son rivales? ?Qu¨¦ puede sugerir respecto a la din¨¢mica actual del yihadismo global y de su inherente amenaza terrorista?
Al Qaeda es una estructura terrorista global que, desde el inicio en 2002 de su proceso de descentralizaci¨®n, incluye tanto al n¨²cleo central de la misma en Pakist¨¢n como a sus actuales cinco ramas territoriales fuera de ese pa¨ªs, concretamente en la Pen¨ªnsula Ar¨¢biga, el Magreb, el Este de ?frica, Siria y el subcontinente indio. El Estado Isl¨¢mico es, por su parte, la cuarta denominaci¨®n consecutiva de una organizaci¨®n que inicialmente fue Al Qaeda en la Tierra de los Dos R¨ªos (AQTDR), fundada en 2004. Ha impuesto su dominio sobre amplias zonas de Irak y Siria, al tiempo que cuenta con alguna colonia fuera de las mismas.
Pero Al Qaeda y el EI son entidades que pugnan actualmente por la hegemon¨ªa del yihadismo global. Ello es as¨ª desde que, en abril de 2013, Ayman al Zawahiri desposeyera a la segunda de la condici¨®n de extensi¨®n territorial de la primera que ostentaba hasta entonces. Ahora bien, tanto Al Qaeda como el EI comparten la misma ideolog¨ªa, el salafismo yihadista, y fines, aunque discrepan en t¨¢cticas y en la secuencia temporal a lo largo de la cual deben alcanzarse estos ¨²ltimos.
Como plante¨¦ en EL PA?S el 6 de julio de 2014, la contienda entre la matriz de una urdimbre de terrorismo global existente y la de otra emergente es que ambas, mientras se esfuerzan por revertir la situaci¨®n y consolidar ventajas respectivamente, tratan de conseguir apoyos en su com¨²n poblaci¨®n de referencia, exhibiendo determinaci¨®n y capacidad para ejecutar atentados espectaculares en o contra Occidente. En este contexto hay que referirse a la instigaci¨®n de atentados terroristas en nuestras sociedades abiertas, por parte de musulmanes residentes en ellas, que la rama de Al Qaeda asentada en Yemen y el EI hicieron muy pocas semanas antes de lo sucedido en Par¨ªs.
En ese mismo art¨ªculo advert¨ª igualmente sobre la posibilidad de que hechos consumados y llamamientos a la reconciliaci¨®n dentro del yihadismo global conviertan en cooperaci¨®n la actual rivalidad entre Al Qaeda y el EI. Pues bien, entre estos factores cabe subrayar que muchos yihadistas, en pa¨ªses occidentales, son renuentes a dar por descontada la divisi¨®n en el movimiento yihadista internacional y optan por actuar, al margen del tipo de vinculaci¨®n que tengan o se atribuyan con Al Qaeda y el EI, como si la amenaza terrorista que ambas suponen fuese una y la misma.
Fernando Reinares es investigador principal de Terrorismo Internacional en el Real Instituto Elcano, catedr¨¢tico de la Universidad Rey Juan Carlos y adjunct professor en la Universidad de Georgetown. Autor con Bruce Hoffman, de The Evolution of the Global Terrorism Threat (Columbia University Press).
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