¡°La revoluci¨®n se acab¨®¡±

La oposici¨®n venezolana est¨¢ dejando de lado sus enormes diferencias en pos del objetivo superior de tomar el poder en el corto plazo. Sus principales l¨ªderes han visto en la ca¨®tica situaci¨®n local de principios de a?o ¨Cun desabastecimiento de productos b¨¢sicos sin precedentes y una inflaci¨®n oficial del 63%, la m¨¢s alta del mundo, y el monumental fracaso que ha supuesto la gira del presidente Nicol¨¢s Maduro, quien busca dinero en efectivo para paliar la ca¨ªda de los precios del petr¨®leo y continuar con su modelo econ¨®mico¨C la oportunidad de ofrecerse como una alternativa pol¨ªtica al evidente descontento que se siente en las largas filas de los supermercados.

Entre la oposici¨®n crece la urgencia de aprovechar las horas bajas del r¨¦gimen con su aparente colapso econ¨®mico y el fracaso del viaje de Maduro. El martes la agencia Moody¡¯s rebaj¨® de CAA1 a CAA3 la calificaci¨®n de la deuda venezolana, lo que implica un sustancial riesgo de cesaci¨®n de pago de la deuda externa. Si el pa¨ªs cae en default las p¨¦rdidas de los tenedores de bono superar¨ªan el 50%. El pr¨®ximo pago vence en marzo y el gobierno dice contar con los recursos.

Con ese panorama por delante no hab¨ªa hasta hoy una voluntad por darle conducci¨®n pol¨ªtica a ese descontento. Por esa raz¨®n, el acuerdo entre los grupos que conviven dentro de la llamada Mesa de la Unidad ¨Cla facci¨®n representada por los dirigentes Leopoldo L¨®pez, Mar¨ªa Corina Machado y Antonio Ledezma, y el grupo encabezado por el excandidato presidencial y gobernador del estado Miranda Henrique Capriles- ha sido sorpresivo. La opini¨®n p¨²blica venezolana supo de ¨¦l el lunes cuando Capriles, que estaba en uno de sus habituales recorridos por las zonas m¨¢s pobres de su jurisdicci¨®n, anunci¨® que se reunir¨ªa con Machado y con los dirigentes de Voluntad Popular, el partido de L¨®pez. ¡°Hay que conversar con todos aquellos que est¨¢n alineados con la idea de que debe haber un cambio¡±, explic¨® Capriles.

Despu¨¦s de esa reuni¨®n, que voceros de ambos dirigentes calificaron de productiva, Capriles dio un paso m¨¢s y convoc¨® a una sorpresiva rueda de prensa. Fue una comparecencia emotiva y a ratos con la sensaci¨®n de que quien hablaba podr¨ªa encabezar o ser una de las figuras de una eventual etapa de transici¨®n. ¡°Yo propongo que se convoque a un equipo que se ponga al frente de esta crisis. Yo quisiera estar en ese grupo. Aqu¨ª se necesita liderazgo que no hay en el pa¨ªs. Y en la oposici¨®n hay alternativas¡±, dijo. El excandidato presidencial parte de una certeza: ¡°A los seguidores del presidente Ch¨¢vez les digo con todo respeto: esta revoluci¨®n se acab¨®¡±.

¡°Hay que conversar con todos los que est¨¢n alineados con la idea de que debe haber un cambio¡±, dijo Capriles

Capriles ha terminado de darle forma a un sorpresivo giro en su estrategia de oposici¨®n y coexistencia pac¨ªfica con el r¨¦gimen chavista. En 2014, de hecho, se opuso a las manifestaciones callejeras alentadas por L¨®pez, Machado y Ledezma, que se extinguieron en junio despu¨¦s de 43 muertes, centenares de heridos y miles de detenidos. Evit¨® las declaraciones en los medios y prefiri¨® concentrarse en fortalecer su v¨ªnculo con los sectores m¨¢s pobres de su jurisdicci¨®n. El excandidato presidencial prefer¨ªa entonces hablar con la prensa en esos recorridos y esperar la implosi¨®n del modelo econ¨®mico chavista, basado en generosos subsidios al consumo y en programas sociales de gran pegada, mientras L¨®pez, quien est¨¢ preso desde hace once meses en una c¨¢rcel militar de los suburbios de Caracas, capitalizaba el descontento y sub¨ªa en las encuestas.

En su discurso de casi una hora Capriles quiso realzar varias ideas. La principal: es hora de que los venezolanos expresen en la calle su descontento. En varios pasajes ley¨® las declaraciones de los funcionarios del gobierno que se han referido a la cr¨ªtica situaci¨®n de los suministros, y sugiri¨® que todas ellas constitu¨ªan una provocaci¨®n. ¡°El gobierno ha dado muestras de no querer modificar el rumbo. ?Qu¨¦ le toca al pueblo? Movilizarse¡±.

El liderazgo de Capriles ha despertado a una oposici¨®n que luc¨ªa dormida. El excandidato presidencial no ha querido detallar la estrategia que seguir¨¢n en las pr¨®ximas horas, o al menos no antes de que la presente a la consideraci¨®n del pleno de la Mesa de la Unidad, la alianza de partidos pol¨ªticos encargada de forjar alianzas electorales. Las pr¨®ximas semanas prometen ser movidas.