La Habana y Miami contra Washington
El Gobierno de la isla y representantes del exilio coinciden en rechazar los privilegios de los inmigrantes cubanos, que logran con facilidad la residencia
El deshielo entre Estados Unidos y Cuba propicia extra?os compa?eros de viaje. Por una vez, miembros de las dos posiciones m¨¢s extremas en las enrevesadas relaciones de EE UU con la isla, el Gobierno de La Habana y representantes del exilio de Miami, parecen coincidir en algo: la necesidad de reformar o incluso acabar con la Ley de Ajuste Cubano (CAA, por sus siglas en ingl¨¦s).
Esta ley es la que ha permitido, desde 1966, que los emigrantes cubanos gozaran de un privilegio inasequible para tantos otros que sue?an con rehacer su vida en EE UU: ser residentes legales en breve tiempo. Concretamente, un a?o y un d¨ªa despu¨¦s de haber pisado territorio estadounidense. Todo ello en un pa¨ªs que tiene a millones de personas sin papeles pese a llevar a?os, y hasta d¨¦cadas, viviendo en su territorio.
Para enfado de La Habana, el Gobierno estadounidense insiste en que no piensa tocar esta normativa pese a la normalizaci¨®n de relaciones anunciada el 17 de diciembre. Una posici¨®n que no solo indigna a la isla, que considera que la ley es ¡°el principal est¨ªmulo a la emigraci¨®n ilegal y al tr¨¢fico de personas desde Cuba¡±. Parad¨®jicamente, en Miami, principal destino de los que se benefician de ella, se han alzado en los ¨²ltimos tiempos voces de pol¨ªticos, en su mayor¨ªa republicanos, contra la CAA. Ric Herrero, director ejecutivo de la organizaci¨®n CubaNow, sostiene que su rechazo tiene un trasfondo electoral. Esta ley ¡°diluye el apoyo a los republicanos, porque los que est¨¢n llegando de Cuba y est¨¢n pasando por el registro para hacerse ciudadanos terminan votando, en gran parte, dem¨®crata¡±, afirma.
Un argumento que apoyan las encuestas. Seg¨²n el Pew Research Center, la llegada de m¨¢s de medio mill¨®n de inmigrantes cubanos desde los noventa ha ¡°alterado la demograf¨ªa¡± de esta poblaci¨®n en EE UU. Y su l¨ªnea de voto: el 57 % de los cubanos llegados en las dos ¨²ltimas d¨¦cadas dicen ¡°identificarse o tender¡± hacia el Partido Dem¨®crata. Solo el 19 % votar¨ªa republicano, tal como hacen mayoritariamente los cubano-americanos del exilio.
Las cr¨ªticas oficiales de Miami no mencionan este argumento, sino que alegan que La Habana ha aprovechado esta ley para deshacerse de disidentes inc¨®modos o incluso enviar a esp¨ªas a EE UU, como dijo a El Nuevo Herald el comisionado de Miami Bruno Barreiro. En el mismo d¨ªa en que comenzaban en La Habana las conversaciones para normalizar las relaciones bilaterales, la Comisi¨®n del Condado Miami-Dade aprob¨® pedirle al Congreso la revisi¨®n de la CAA. Barreiro, un republicano hijo de cubanos que se beneficiaron de esa ley, quer¨ªa incluso su derogaci¨®n total.
Congresistas republicanos de origen cubano como Ileana Ros-Lehtinen o Carlos Curbelo tambi¨¦n han cuestionado una normativa ideada para los perseguidos pol¨ªticos, pero que ha acabado beneficiando de forma indiscriminada a los que emigran por motivos econ¨®micos y que ¡ªpara indignaci¨®n de los que se oponen a cualquier apertura¡ª no dudan en viajar a Cuba en cuanto pueden.
Washington no ha explicado por qu¨¦ se niega a reformar o derogar esta ley, aunque seg¨²n los expertos se debe a que teme que si anuncia su fin se provoque una migraci¨®n masiva. La Guardia Costera ya ha incrementado su patrullaje en el Estrecho de Florida desde el anuncio del 17 de diciembre. Las autoridades han reconocido un aumento de los intentos de llegar a EE UU de forma ilegal desde Cuba, tanto por mar (481 cubanos lo hicieron en diciembre de 2014, un 117 % m¨¢s que el mismo mes de 2013) como por tierra: casi 6.500 cubanos alcanzaron la frontera de EE UU y M¨¦xico en los tres ¨²ltimos meses del a?o pasado, un 50 % m¨¢s que el anterior.
Al ser una ley su reforma est¨¢ en manos del Congreso, aunque Obama tendr¨ªa que darle su aprobaci¨®n final. ¡°No creo que vaya a quedar intacta¡±, adelantaba Ros-Lehtinen al diario de Miami. Una postura que Herrero no duda en criticar en vista del rotundo no de los pol¨ªticos cubano-americanos a revisar el embargo. ¡°Si vamos a decir que las cosas han cambiado lo suficiente para revisar la Ley de Ajuste Cubano, entonces podemos decir que las cosas han cambiado lo suficiente para revisar el embargo¡±, sostiene.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.