T¨²nez apela a la unidad frente al terror
El Gobierno despliega al Ej¨¦rcito y detiene a nueve acusados de colaborar en el atentado El Estado Isl¨¢mico asume la autor¨ªa en una grabaci¨®n de audio
Un hombre de mediana edad se sube a la verja de la entrada y con aspavientos ¡ªy la ayuda de un pu?ado de ciudadanos¡ª corta de ra¨ªz los c¨¢nticos acalorados de los congregados junto al Museo del Bardo, en T¨²nez capital. Van a abrir las puertas para que los presentes entren, de forma ordenada, y rindan por fin homenaje en el interior del recinto a las 23 v¨ªctimas (20 extranjeros y tres tunecinos) del brutal ataque terrorista perpetrado el mi¨¦rcoles por tres individuos a punta de Kal¨¢shnikov. ¡°Nos quieren aterrorizar¡±, dice Baha, estudiante de 19 a?os, ¡°han elegido este museo, el Bardo, porque es uno de los s¨ªmbolos de este pa¨ªs¡±. ¡°Pero no lo han conseguido, mira cu¨¢ntos somos¡±, prosigue frente a la puerta acristalada que deja entrever los primeros mosaicos del museo. Este jueves, el grupo yihadista Estado Isl¨¢mico (EI) asum¨ªa el atentado contra los turistas en una grabaci¨®n de audio de tres minutos.
El Ejecutivo tunecino refuerza el control en las fronteras
Horas antes de que el audio llegase a las redes sociales, el presidente tunecino, Beyi Caid Essebsi, reuni¨® a la c¨²pula militar para reforzar el despliegue en la lucha contra el terrorismo, en especial en las porosas fronteras de Argelia y Libia. Porque es precisamente desde ah¨ª, sobre todo de las monta?as de Chambi, en el oeste, de donde viene la principal amenaza yihadista, con grupos como Okba Ibn Nafaa, autor de varios atentados contra las fuerzas de seguridad. Este jueves, la organizaci¨®n alab¨® en una grabaci¨®n difundida por Afriqiyah Media, brazo medi¨¢tico yihadista, el ataque en el Bardo. Pese a que Okba Ibn Nafaa ha mostrado su apoyo al EI en alguna ocasi¨®n, los dos grupos a¨²n no han sellado acuerdo alguno de asociaci¨®n. Este jueves, las fuerzas de seguridad tunecinas detuvieron a nueve personas por su supuesta colaboraci¨®n en el atentado.
El himno de la naci¨®n, entre banderas de T¨²nez y carteles con la palabra ¡°solidaridad¡±, acompa?a a la multitud que se dirige hacia una palmera frente a la entrada del museo del Bardo. All¨ª, varios hombres depositan dos coronas en recuerdo de los muertos en el atentado. A la cabeza de la marcha, ataviados con sus togas, el colectivo de los abogados, s¨ªmbolo de la primavera ¨¢rabe que depuso hace cuatro a?os al dictador Zine el Abidine Ben Ali. Justo cuando el Gobierno de coalici¨®n (con la participaci¨®n de pol¨ªticos del antiguo r¨¦gimen, islamistas y liberales) intenta consolidar la transici¨®n democr¨¢tica, el terror ha zancadilleado a los tunecinos. ¡°Nos quieren desmoralizar¡±, dice Sophie, de 65 a?os, a la espalda de la manifestaci¨®n, ¡°quieren desestabilizar el pa¨ªs¡±. ?Por qu¨¦ ahora?, ?por qu¨¦ en T¨²nez? ¡°No lo entiendo pero debemos plantarles batalla¡±. Y esa batalla, apostilla a su vera Nevil, de la misma edad, pasa por ¡°la unidad¡±. Repite y repite, una y otra vez, la palabra ¡°unidad¡±. ¡°?Sabe usted qu¨¦ nos diferencia de Irak, Libia o Siria?¡±, pregunta Nevil, con barba dura y gafas para soportar el fuerte sol que cae sobre la capital tunecina. ¡°Nos diferencia que nosotros estamos todos unidos; ellos son unos sun¨ªes, otros chi¨ªes. Aqu¨ª estamos todos unidos y, por eso, el terrorismo en nuestro pa¨ªs no tiene futuro¡±.
La unidad del pueblo fue tambi¨¦n este jueves el argumento que esgrimi¨® el primer ministro tunecino, el independiente Habib Essid, para llamar a todas las formaciones pol¨ªticas a combatir juntos el terror, desactivando la narrativa yihadista que nutren a grupos como el EI. Tambi¨¦n pidieron unidad el potente sindicato UGTT y el l¨ªder del partido islamista Ennahda, Rachid Ganouchi. El Gobierno tunecino identific¨® este jueves a Yassine Abidi y Hatem Jachnaoui como los dos terroristas abatidos en la operaci¨®n que dio por concluido el asalto al museo. Las autoridades apuntaron este jueves que ambos recibieron entrenamiento en un campo yihadista en Libia.
Los dos atacantes abatidos recibieron entrenamiento en Libia
El ministro de Interior afirm¨® que los dos hab¨ªan sido reclutados en mezquitas en T¨²nez y viajaron a Libia en septiembre. T¨²nez, pr¨¢cticamente a la par con Arabia Saud¨ª, encabeza la lista de pa¨ªses emisores de combatientes radicales hacia Siria e Irak.
La mayor¨ªa de analistas coinciden en que en T¨²nez se dan cita varios factores para explicar este fen¨®meno: los a?os de prisi¨®n y tortura de opositores e islamistas en las c¨¢rceles de Ben Ali; la amnist¨ªa y excarcelaci¨®n de muchos de estos radicales tras la revoluci¨®n; la laxitud con la que los primeros a?os de democracia se ha tratado a las organizaciones islamistas y salafistas y la facilidad que grupos terroristas como Al Qaeda ¡ªy ahora tambi¨¦n el EI¡ª han tenido para entrar en suelo tunecino.
¡°Se creen que son mejores musulmanes¡±, dice Baha, ¡°por hacer la yihad, pero nosotros somos tan musulmanes como ellos¡±. Coinciden Baha y su amigo Aziz, tambi¨¦n de 19 a?os, que la falta de oportunidades, el desempleo, lleva a muchos a escuchar la llamada a la yihad en las mezquitas.
A unos pocos kil¨®metros del museo, a lo largo de la c¨¦ntrica avenida Burguiba, el luto no ha trastocado ni un ¨¢pice de los bulliciosos caf¨¦s y mercados. Si bien la seguridad ante el Ministerio del Interior ha aumentado ligeramente, la presencia policial es como en la posrevoluci¨®n. Los ecos del ataque no llegan a trastocar el festival de m¨²sicas de Cartago, ya a media noche. T¨²nez sigue en pie.
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