La bandera de la Confederaci¨®n llega al Supremo

En Texas los autos con matr¨ªculas personalizadas son comunes. S¨ªmbolos de fraternidades, mensajes antiaborto, universidades..., cualquier dise?o puede mostrarse. Pero esta semana la Corte Suprema de Estados Unidos examin¨® si la bandera de la Confederaci¨®n puede sumarse a las filas, desatando un nuevo debate sobre libertad de expresi¨®n en el pa¨ªs.

La organizaci¨®n Hijos de los Veteranos Confederados (SCV, sus siglas en ingl¨¦s) demand¨® al estado de Texas cuando se les impidi¨® colocar la bandera de la Confederaci¨®n en las placas de autom¨®viles en 2011. Ellos se ampararon en la primera enmienda, basada en la libertad de expresi¨®n para defender el derecho a mostrarla.

El pol¨¦mico s¨ªmbolo tiene dos interpretaciones en Estados Unidos. La primera es como tributo hacia los antepasados que lucharon en la Guerra Civil. La segunda, como un s¨ªmbolo de la esclavitud y segregaci¨®n racial en el pa¨ªs. Esta fue precisamente la lectura que le dio el Departamento de Veh¨ªculos Motorizados de Texas en 2011, cuando vot¨® sobre el asunto y concluy¨® que incluir el emblema dentro de las opciones para las matr¨ªculas era ¡°ofensivo¡±. ¡°Aunque ames u odies la bandera de la Confederaci¨®n, si SCV pierde, un poco de libertad muere con nosotros¡±, asegur¨® la organizaci¨®n.

El tema b¨¢sico que analiz¨® la Corte Suprema el lunes pasado es si las frases e im¨¢genes que aparecen en las matr¨ªculas son considerados mensajes gubernamentales y si Texas cometi¨® discriminaci¨®n al negar el dise?o propuesto para la placa.

Actualmente el estado cuenta con 383 opciones para personalizar matr¨ªculas automovil¨ªsticas, un servicio que tiene un costo promedio adicional de 30 d¨®lares, aunque puede elevarse seg¨²n el tipo de organizaci¨®n. Esta pr¨¢ctica se permite en todo el pa¨ªs y, al cobrar un valor extra, significa ganancias para los respectivos gobiernos federales.

Aunque odies la bandera, si SCV pierde, un poco de libertad muere con nosotros Asegura la organizaci¨®n?

En el ¨¢mbito nacional, nueve estados permiten que los conductores escojan matr¨ªculas que incluyen la bandera. En julio, la quinta sala de la Corte de Apelaciones de Nueva Orleans fall¨® a favor de los Hijos de los Veteranos Confederados, porque, seg¨²n sentenciaron, ¡°una persona razonable se dar¨¢ cuenta de que las placas de autom¨®viles son un discurso privado y no un patrocinio del gobierno¡±.

¡°La Corte ha dejado claro que si el Gobierno habla sobre un tema, la Primera Enmienda no se aplica en lo absoluto¡±, explic¨® el experto en Corte Suprema Lyle Denniston. ¡°Esa es la postura que los representantes de Texas esperaban que el tribunal tomara¡±, a?adi¨®.

¡°El Gobierno tiene una autoridad final en casi todo lo que hace¡±, dijo la jueza Sonia Sotomayor, mientras coment¨® que eso podr¨ªa no aplicarse si el Gobierno no ha creado las palabras.

Nueve Estados permiten que los conductores escojan matr¨ªculas que incluyen la bandera

Mientras tanto, el juez Anthony Kennedy cuestion¨® si las matr¨ªculas con dise?o especial pueden ser consideradas un ¡°nuevo tipo de foro p¨²blico¡±, lo que les dar¨ªa asidero para estar amparadas por la Primera Enmienda.

El fiscal general de Texas, Scott A. Keller, en tanto, argument¨® que debido a que Texas ejerce ¡°un control total¡± sobre la manufactura de las placas y la manera en que deben exhibirse, tiene total autoridad para rehusarse a colocar su firma sobre cualquier mensaje que se imprima en ellas.

En la contraparte, los Hijos de los Veteranos Confederados, representados por R. James George Jr., de Austin, basan su defensa, precisamente, en que las placas automovil¨ªsticas son un ¡°foro p¨²blico¡± debido a que, desde el principio, el estado llam¨® a los conductores a presentar dise?os propios.

Este cap¨ªtulo de la pol¨¦mica todav¨ªa deber¨¢ esperar un tiempo para solucionarse ya que la Corte dar¨¢ a conocer su decisi¨®n en junio, al final del actual per¨ªodo de sesiones.