La UE sit¨²a a Espa?a como ejemplo de control de flujos migratorios
El Consejo Europeo trata de firmar acuerdos con pa¨ªses africanos para asegurar los retornos de extranjeros
Italia y Malta afrontan hoy la mayor presi¨®n migratoria en Europa, pero Espa?a vivi¨® situaciones de gran tensi¨®n ¡ªsin llegar a las cifras italianas¡ª hace 10 a?os. Europa trata ahora de emular la receta espa?ola que contuvo la llegada de inmigrantes a partir de 2006. El primer ministro brit¨¢nico, David Cameron, cit¨® a Espa?a como ejemplo en pol¨ªtica migratoria, seg¨²n confirman cuatro fuentes que siguieron la discusi¨®n monogr¨¢fica de los l¨ªderes europeos el pasado jueves en Bruselas. Algunas de las decisiones adoptadas en esa reuni¨®n est¨¢n inspiradas en el modelo espa?ol, asegura un alto cargo del Consejo Europeo.
Lo que hoy son barcos cargueros que transportan a cientos de inmigrantes desde los puertos de Libia hacia Italia eran en 2006 rudimentarios cayucos que se aproximaban a Canarias. Aquel a?o llegaron a las islas cerca de 32.000 personas provenientes de ?frica, un flujo que desbordaba las capacidades de esa comunidad, aunque quede lejos de los 170.000 que alcanzaron en 2014 la costa italiana. Ante esa crisis migratoria, el Gobierno espa?ol puso en marcha el llamado Plan ?frica, que inclu¨ªa programas de cooperaci¨®n econ¨®mica, desarrollo democr¨¢tico y, sobre todo, medidas de control de fronteras entre pa¨ªses africanos y con el continente europeo para evitar que los extranjeros se embarcaran en la ruta mar¨ªtima. Las llegadas se redujeron dr¨¢sticamente.
Adem¨¢s de los acuerdos con Marruecos, el Ejecutivo de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero firm¨® esquemas de cooperaci¨®n con Senegal, Mauritania, Nigeria, Guinea Bissau y otros de la zona. A grandes rasgos, se trataba de ofrecer mayor cooperaci¨®n econ¨®mica, facilidades para la tramitaci¨®n de visados y entrega de medios para el control de fronteras a cambio de que los pa¨ªses dejaran de ser coladeros de extranjeros irregulares que recorr¨ªan parte del continente con el fin de tomar un barco y llegar a Europa. Espa?a abri¨® embajadas en muchos de esos territorios y firm¨® acuerdos de readmisi¨®n que permit¨ªan devolver a todos los inmigrantes a los que se les negara la condici¨®n de demandantes de asilo.
¡°Ahora mismo llegan cero barcos a las costas espa?olas¡±, presumi¨® el jueves el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ante sus colegas europeos. M¨¢s que una soluci¨®n completa al problema migratorio, el plan permite sellar el punto de partida m¨¢s cercano al pa¨ªs afectado, en este caso Espa?a. Pero en situaciones de crisis como la actual, quienes necesitan salir buscan otras v¨ªas rutas menos vigiladas. Es el caso de Libia, pa¨ªs en descomposici¨®n desde el que parten ahora principalmente sirios, eritreos y somal¨ªes. Esa permeabilidad de la frontera libia hace hoy mucho m¨¢s dif¨ªcil cualquier estrategia de contenci¨®n del ¨¦xodo.
Con esa idea espa?ola como referencia, los jefes de Estado y de Gobierno acordaron el jueves una iniciativa que no suscita gran entusiasmo entre las organizaciones defensoras de los derechos humanos. Se trata de ¡°la puesta en marcha de acuerdos nacionales de readmisi¨®n con pa¨ªses terceros para favorecer la readmisi¨®n de inmigrantes econ¨®micos en situaci¨®n irregular¡±, asegura la declaraci¨®n conjunta aprobada por los pa¨ªses miembros.
En la mente del Consejo Europeo est¨¢n las cifras sobre readmisiones que publica Frontex, la agencia europea de fronteras. De las alrededor de 250.000 ¨®rdenes de expulsi¨®n que se emiten al a?o en los pa¨ªses comunitarios, los retornos reales se cifran en el 70%, una proporci¨®n bastante elevada pero poco homog¨¦nea geogr¨¢ficamente. Ning¨²n pa¨ªs africano est¨¢ entre las cinco nacionalidades que encabezan el n¨²mero de expulsiones. Fuentes del Consejo Europeo atribuyen esta anomal¨ªa a la falta de acuerdos con pa¨ªses de ese continente para poder devolver a los extranjeros que tratan de abrirse camino en Europa.
Como primera toma de contacto para intentar forjar este tipo de acuerdos, los Veintiocho decidieron organizar una reuni¨®n en Malta en los pr¨®ximos meses con la Uni¨®n Africana, organizaci¨®n que aglutina a 54 Estados de la regi¨®n. La intenci¨®n es ¡°reforzar la cooperaci¨®n pol¨ªtica con los socios africanos a todos los niveles para atacar las causas de la inmigraci¨®n ilegal y de luchar contra el tr¨¢fico de inmigrantes¡±.
Frente a las promesas de cooperaci¨®n, los Veintiocho fueron incapaces de ponerse de acuerdo sobre la forma de repartir mejor a los solicitantes de asilo en el continente europeo. Alemania, que recibe un tercio de todas las solicitudes de la UE, abog¨® por quitar del texto final la referencia a que esas acogidas sean voluntarias, pero no prosper¨®. Ahora ser¨¢ la Comisi¨®n Europea la que tenga que presentar un modelo para repartir de alguna manera a los potenciales refugiados. La canciller alemana, Angela Merkel, asegur¨® ayer en un acto de campa?a que el sistema actual de asilo, denominado Dubl¨ªn, no ha funcionado y abog¨® por redise?arlo. Merkel sugiere que la acogida de extranjeros est¨¦ ligada al tama?o del pa¨ªs y al producto interior bruto (PIB), algo que otorgar¨ªa a Espa?a e Italia m¨¢s solicitantes de los que acoge ahora.?
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