La UE ultima su operaci¨®n militar para frenar a las mafias en Libia

La Uni¨®n Europea tiene ya lista su misi¨®n militar para combatir el tr¨¢fico de inmigrantes en el Mediterr¨¢neo y espera poder aprobarla formalmente en una semana. La operaci¨®n contemplar¨¢ ¡°todos los medios necesarios¡±, incluidas acciones coercitivas, para tratar de destruir el negocio de quienes extorsionan a los extranjeros para conducirlos a Europa desde Libia. La alta representante para la Pol¨ªtica Exterior Europea, Federica Mogherini, informar¨¢ ma?ana lunes en Nueva York al Consejo de Seguridad de la ONU, cuyo mandato espera obtener a finales de semana.

Con el mandato expl¨ªcito de los Veintiocho a finales de abril, el servicio diplom¨¢tico comunitario ha dise?ado las l¨ªneas maestras de una misi¨®n que espera poder lanzar a finales de junio, seg¨²n un alto cargo de la diplomacia comunitaria. Mogherini cree haber vencido las resistencias de China y Rusia, miembros del Consejo de Seguridad, para esta operaci¨®n en un pa¨ªs ajeno a la soberan¨ªa europea. El embajador ruso ante la Uni¨®n Europea, Vlad¨ªmir Chizhov, ha asegurado esta semana que su pa¨ªs no acepta la idea concreta de destruir barcos, pero s¨ª una acci¨®n que suponga atacar las redes de estos traficantes. Sin la unanimidad del Consejo de Seguridad, la iniciativa tendr¨ªa que esperar, pues la inestabilidad pol¨ªtica en Libia impide el intento de pactarla con las autoridades de ese pa¨ªs.

Para lograr el consentimiento de la ONU, la UE est¨¢ dispuesta a renunciar, en el mandato de la operaci¨®n, a esa idea estrella de destruir barcazas, aunque el hecho de contemplar todos los medios necesarios para hundir el negocio de las mafias abre la puerta a eventuales destrucciones de barcos mediante bombardeos u otros medios militares. Las fuentes consultadas aseguran que, en el caso de que el buque no tenga bandera, se podr¨ªa hacer m¨¢s f¨¢cilmente, mientras para barcos con bandera de un pa¨ªs habr¨ªa que contar con la autorizaci¨®n de ese Estado.

Al menos seis pa¨ªses, entre ellos Italia, Espa?a y Reino Unido, han comprometido ya su participaci¨®n en este proyecto, una operaci¨®n delicada porque supone involucrarse de nuevo en el avispero libio, aunque sea para dinamitar el negocio de los traficantes de inmigrantes. La intervenci¨®n militar de 2011, iniciada por pa¨ªses europeos y asumida m¨¢s tarde por la OTAN, acab¨® con la ca¨ªda de Muamar el Gadafi pero no evit¨® el desmoronamiento del pa¨ªs.

Al menos seis pa¨ªses, entre ellos Italia, Espa?a y Reino Unido, han comprometido ya su participaci¨®n?

La diplomacia europea es consciente de que las milicias que imponen su ley en Libia y los extremistas que act¨²an en nombre del Estado Isl¨¢mico pueden enfrentar a las tropas europeas a situaciones dif¨ªciles, pero insisten en enmarcar su acci¨®n en la lucha contra las mafias de inmigrantes y aseguran que en ning¨²n caso habr¨¢ tropas terrestres europeas en Libia. En lo que va de a?o, los barcos civiles desplegados por Frontex cerca de las costas de Italia han recibido dos veces disparos de los traficantes cuando se dispon¨ªan a salvar a inmigrantes. Eso ha convencido al servicio exterior europeo de que hace falta un despliegue militar en el Mediterr¨¢neo para enfrentarse a las mafias. El a?o pasado llegaron 170.000 personas a las costas italianas, todo un r¨¦cord que podr¨ªa superarse este a?o.

Como pa¨ªs m¨¢s afectado por el drama migratorio y m¨¢s cercano a Libia, Italia acoger¨¢ los cuarteles generales de esta misi¨®n, que tambi¨¦n tendr¨¢ como responsable a un militar italiano. El resto de detalles ¨Ctama?o de la operaci¨®n, duraci¨®n y lugar de despliegue concreto- a¨²n no han sido desvelados.

Tras las conversaciones bilaterales que ha mantenido Mogherini con los representantes chinos y rusos, la alta representante conf¨ªa en obtener el respaldo a ese despliegue a finales de semana. Con ese aval, los ministros de Exteriores, que se reunir¨¢n en pr¨®ximo lunes en Bruselas, tendr¨¢n que dar el visto bueno a la operaci¨®n y el lanzamiento formal se har¨ªa el 25 de junio, en la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno que debe dar la autorizaci¨®n pol¨ªtica definitiva.