Funeral multitudinario en Burundi por la muerte de un l¨ªder opositor
Zedi Feruzi, contrario a tercer mandato del presidente, fue tiroteado a la puerta de su casa

La violencia en Burundi ha entrado en una nueva fase, despu¨¦s del asesinato, el s¨¢bado al anochecer, del opositor Zedi Feruzi. Abatido a tiros en la puerta de su casa, el l¨ªder del partido UPD era una de las figuras que se hab¨ªa posicionado en contra del tercer mandato ¡ªilegal¡ª del actual presidente, Pierre Nkurunziza. A¨²n no se han identificado los agresores, pero un periodista burund¨¦s vecino de la v¨ªctima, que hab¨ªa estado hablado con Feruzi unos minutos antes del tiroteo y que tambi¨¦n result¨® herido, asegura que pudo distinguir a unos hombres uniformados, que identifica con el r¨¦gimen. Unas acusaciones que desde la presidencia se han desmentido rotundamente.
Despu¨¦s de un mes de manifestaciones, reprimidas violentamente por las fuerzas de seguridad, los burundeses salieron este domingo masivamente a la calle para acompa?ar al cuerpo y a la familia de Feruzi. M¨¢s de dos mil ciudadanos esperaron fuera de su domicilio a que la familia acabara con las plegarias ¡ªFeruzi era musulm¨¢n¡ª y acompa?aron el ata¨²d hasta el cementerio, en una marcha multitudinaria para arropar a los parientes de Feruzi y para enfatizar la indignaci¨®n contra sus gobernantes.
¡°Los que han matado a Feruzi lo pagaran, tarde o temprano¡± avisaba una pancarta levantada entre una marcha funeraria que transcurri¨® pac¨ªficamente. El imam de la mezquita donde se ofici¨® la ceremonia, pidi¨® disciplina y que nadie descarrilara, y el s¨¦quito popular obedeci¨® sin causar incidentes. Pero s¨ª dejaron claro el mensaje que ha matado a Feruzi: ¡°No al tercer mandato¡±.
El deseado tercer mandato del presidente Pierre Nkurunziza, al mando de Burundi desde el final de la guerra civil, en 2005, ha conducido a una revuelta popular en la capital, Bujumbura, de cara a las elecciones del pr¨®ximo 26 de junio. Las manifestaciones empezaron hace un mes y desde entonces han dejado 20 muertos y un golpe de estado fallido ¡ªque algunos han interpretado como un montaje del propio Nkurunziza¡ª.
La oposici¨®n y los activistas anti-Nkurunziza determinaron una tregua en las protestas para este fin de semana, pero hoy deben retomar las calles, con la indignaci¨®n a?adida del asesinato de Feruzi.
Este terremoto de violencia en Burundi nace de una confrontaci¨®n pol¨ªtica, pero sucede en un pa¨ªs con una estabilidad muy fr¨¢gil, que sale de un conflicto hist¨®rico de secuelas a¨²n no cerradas y en una regi¨®n, la de los Grandes Lagos, de temores y milicias comunicantes. Por eso, m¨¢s de 100.000 burundeses han huido a los pa¨ªses vecinos.
Estas pr¨¢cticas nos recuerdan a lo que pasaba hace 20 a?os¡±, dice un opositor
¡°Estas pr¨¢cticas nos recuerdan a lo que pasaba hace 20 a?os¡±, alertaba este domingo, durante el funeral de Feruzi, Fr¨¦d¨¦ric Bamvuginyumvira, vicepresidente de uno de los principales partidos de la oposici¨®n (Frodebu), refiri¨¦ndose al asesinato. Muchos opositores, activistas y periodistas han abandonado sus hogares y se han escondido temiendo represalias. Solo la radio gubernamental sigue emitiendo ya que las otras privadas han sido saqueadas.
La historia de Burundi es paralela a la de Ruanda, pero es la pieza menos visible del complejo y mort¨ªfero conflicto regional de los Grandes Lagos. Con un pasado manchado por las oleadas de masacres entre la mayor¨ªa hutu ¡ª85% de la poblaci¨®n¡ª y la minor¨ªa tutsi, las divisiones se cosieron fr¨¢gilmente hace solo una d¨¦cada, despu¨¦s de una sangrienta guerra civil (1993 - 2005) que dej¨® 300.000 muertos.
Burundi tiene al otro lado de sus fronteras al conflicto m¨¢s mort¨ªfero del planeta (Congo) y la resaca del genocidio en Ruanda, en una zona donde las fronteras separan menos que las confrontaciones hist¨®ricas.
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