El PRD busca en las urnas el ant¨ªdoto a su divisi¨®n interna
El partido de la izquierda afronta las elecciones bajo la amenaza del auge de Morena
En mayo del a?o pasado, Cuauht¨¦moc C¨¢rdenas acudi¨® casi a rega?adientes al congreso que celebraba los 25 a?os del nacimiento del PRD, el partido de la izquierda mexicana que ¨¦l mismo fund¨® en 1989 tras abandonar el todopoderoso PRI de entonces. ¡°Por lo que he podido conocer de diversos compa?eros, soplan vientos de fractura. Considero que es responsabilidad de todos nosotros, de todos los militantes evitar que esto vaya a suceder¡±, lanz¨® al auditorio el que fuera tres veces candidato presidencial y una suerte de l¨ªder moral del partido. Un a?o despu¨¦s, la desbandada de cuadros no ha parado de engordar. M¨¢s de 30 pesos pesados -C¨¢rdenas entre ellos- han salido por la puerta lateral. En este clima de divisi¨®n, la formaci¨®n afronta por primera vez en su historia una jornada electoral en la que su posici¨®n hegem¨®nica en la izquierda est¨¢ amenazada.
Las aguas empezaron a partirse bastante antes. La conquista de la direcci¨®n del partido en 2008 por parte de Nueva Izquierda, una de las corrientes del partido conocido como los Chuchos, desat¨® las primeras diferencias con la facci¨®n de Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, el carism¨¢tico candidato con el que el PRD acarici¨® la victoria en las elecciones de 2006. La tensi¨®n se resolvi¨® con la salida hace dos a?os de L¨®pez Obrador y la fundaci¨®n de su propio partido: el Movimiento de Regeneraci¨®n Nacional (Morena). Esta nueva opci¨®n electoral de izquierda, armada a imagen y semejanza de su l¨ªder -el factor AMLO, como ya lo han bautizado los analistas en M¨¦xico- es precisamente el mayor peligro al dominio del PRD.
Los sondeos para las elecciones que renovar¨¢n los 500 esca?os de la C¨¢mara de Diputados dibujan una ventaja m¨ªnima sobre Morena
Los sondeos para las elecciones que renovar¨¢n los 500 esca?os de la C¨¢mara de Diputados dibujan una ventaja m¨ªnima sobre Morena en la pugna por el tercer puesto, por detr¨¢s del PRI y del PAN. El PRD rondar¨ªa 13%, con Morena situado en un 10% seg¨²n datos de Parametr¨ªa. La direcci¨®n del partido parece en todo caso satisfecha con estos guarismos. ¡°Nuestros contrincantes nos auguran un derrumbe. Se van a llevar una desagradable sorpresa. El 13% es el promedio hist¨®rico de las elecciones intermedias. Ser¨ªa un buen resultado¡±, defiende Jes¨²s Ortega, una de las cabezas de la c¨²pula de Nueva Izquierda y antiguo presidente del partido.
En la disputa por los gobernadores de los nueve estados en liza y las 1009 alcald¨ªas, Ortega conf¨ªa en recuperar plazas calientes como Michoac¨¢n y mantener el poder en el convulso Guerrero. La visita a las urnas en este estado del suroeste del pa¨ªs est¨¢ profundamente atravesada por la desaparici¨®n de los estudiantes en Iguala. Desde el defenestrado gobernador ?ngel Aguirre, una antiguo priistas reconvertido a las filas del PRD, al alcalde del municipio Jos¨¦ Lu¨ªs Abarca, detenido por liderar la trama mafiosa que seg¨²n la versi¨®n oficial asesin¨® a los muchachos, la bandera del partido ha sufrido una importante mancha. ¡°Reconocemos alguna responsabilidad pol¨ªtica en la postulaci¨®n de este estas personas. Aun as¨ª, creemos que el golpe ha afectado m¨¢s la reputaci¨®n del Gobierno. Nuestros estudios dicen que adelantamos en cuatro puntos al PRI¡±, asegura Ortega.
El reproche de los cr¨ªticos a la direcci¨®n del partido es una estrategia pol¨ªtica excesivamente pactista, complaciente con sus adversarios y volcada en captar cotas de poder a toda costa. El PRD forma parte, por ejemplo, de gobiernos de alianza con el PAN, la derecha, como ant¨ªdoto para derrotar al PRI en algunos de sus bastiones como Oaxaca, Puebla y Sinaloa. La pol¨¦mica m¨¢s reciente ha sido su acercamiento al partido de Elba Esther Gordillo, la exlideresa del sindicato Nacional de Trabajadores encarcelada hace dos a?os por fraude fiscal y lavado de dinero. Nueva Alianza apoyar¨¢ al PRD en dos delegaciones clave del Distrito Federal, el irreductible refugio electoral del partido desde hace casi 20 a?os, amenazado hoy por la presencia de Morena.
La cr¨ªtica al excesivo pragmatismo lleg¨® a su cima cuando en diciembre de 2012 la c¨²pula del partido firm¨® el Pacto de M¨¦xico
La cr¨ªtica al excesivo pragmatismo lleg¨® a su cima cuando en diciembre de 2012 la c¨²pula del partido firm¨® el Pacto de M¨¦xico, una ancha alianza entre las tres principales fuerzas pol¨ªticas auspiciada por el presidente Enrique Pe?a Nieto. ¡°A pesar del tono parlamentario que se le dio al acuerdo, era una idea del PRI, como ahora est¨¢ claro. Usaron al resto de partidos y estos se dejaron usar¡±, explica el historiador Lorenzo Meyer. Ortega por su parte reivindica la condici¨®n del PRD como partido de Estado, dispuesto a alcanzar alianzas para sacar a adelante reformas de calado. Pese a su adhesi¨®n a aquel gran pacto, el partido -inmerso ya en un agitado ambiente de divisi¨®n- recul¨® meses despu¨¦s con una fuerte campa?a en contra de la reforma energ¨¦tica.
¡°Hay que ser un poco pragm¨¢ticos para ser m¨¢s eficaces en el acceso al poder. Nosotros no queremos ser un peque?o grupo de exaltados en el congreso. El PRD debe alejarse del extremismo de izquierda, del populismo demag¨®gico para virar hacia un centro izquierda que con propuestas progresistas pueda enfrentar los grandes problemas nacionales¡±, defiende Ortega en una clara alusi¨®n a Morena. La batalla en las filas de la izquierda mexicana est¨¢ abierta. Las elecciones de junio servir¨¢n para medir la resiliencia del PRD ante las fugas de agua. Y para Morena ser¨¢ el term¨®metro antes del tercer gran asalto de L¨®pez Obrador a las elecciones presidenciales de 2018.
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