La pol¨ªtica chilena no logra recuperar la senda del ¨¦xito

El f¨²tbol ha sido un b¨¢lsamo para los dirigentes pol¨ªticos chilenos. El triunfo de la selecci¨®n ante Uruguay, que lleva a Chile a una semifinal de la Copa Am¨¦rica por primera vez en 16 a?os, ha contribuido en parte a distender la situaci¨®n que enfrenta desde hace nueves meses tanto el oficialismo como la derecha, ahogados por diversos esc¨¢ndalos de corrupci¨®n que, con el pasar del tiempo, ha derivado en la instalaci¨®n de un escenario revuelto y confuso. La gran inc¨®gnita es si Bachelet lograr¨¢ llevar adelante su programa de Gobierno.

El deporte, sin embargo, ha sido apenas un par¨¦ntesis en la crisis de mayor gravedad desde el retorno a la democracia en 1990. La Fiscal¨ªa sigue trabajando, todos los d¨ªas se conocen nuevos cap¨ªtulos de estas tramas y ni el Gobierno ni la oposici¨®n parecen en condiciones de retomar la agenda.

El Ministerio P¨²blico formaliz¨® el lunes por delitos tributarios a los primeros pol¨ªticos involucrados en el caso Penta, la causa sobre financiaci¨®n ilegal de la pol¨ªtica que afecta sobre todo a la coalici¨®n de derecha, la Alianza por Chile. Cuatro de ellos pertenecen a la Uni¨®n Dem¨®crata Independiente (UDI), el partido m¨¢s dogm¨¢tico del conglomerado: dos parlamentarios en ejercicio, Iv¨¢n Moreira y Felipe de Mussy, el exalcalde de Santiago, Pablo Zalaquett, y uno de los fundadores y l¨ªderes ideol¨®gicos, Jovino Novoa, que tuvo que retirarse de la sala por motivos de salud y ser ingresado a una cl¨ªnica.

La defensa de un quinto dirigente, el exsubsecretario de Interior de Pinochet, Alberto Cardemil, del partido Renovaci¨®n Nacional (RN), solicit¨® la reprogramaci¨®n de la audiencia. En una jornada marcada por agresiones de manifestantes a los pol¨ªticos que llegaron hasta el Centro de Justicia para mostrar su apoyo a los dirigentes, solo Zalaquett permaneci¨® hasta el final, que decretaron su arresto domiciliario nocturno, arraigo nacional y firma mensual.

La trama Penta fue, en septiembre, la primera que abri¨® la temporada de mala racha de la pol¨ªtica chilena y promete involucrar a nuevos dirigentes. Luego vino la arista de Soquimich, que investiga los aportes irregulares a derecha e izquierda de la empresa del exyerno de Pinochet, y el caso Caval, los negocios millonarios de la sociedad de la nuera de la presidenta Michelle Bachelet.

Desde que estall¨® este ¨²ltimo esc¨¢ndalo en febrero, el Ejecutivo no ha podido retomar el camino emprendido con ¨¦xito en 2014, el primer a?o de gobierno. La jefa de Estado socialista ha intentado tomar el control de la agenda, pero no lo ha logrado. Despu¨¦s de pedir la renuncia a todo su Gabinete y desmontar su equipo de colaboradores en La Moneda, el 11 de mayo pasado hizo los nombramientos. Veintisiete d¨ªas m¨¢s tarde, sin embargo, su ministro de la Secretar¨ªa General de la Presidencia, Jorge Insunza, tuvo que renunciar a su cargo, tras ser cuestionado por realizar asesor¨ªas a empresas mineras cuando se desempe?aba como diputado en el Congreso en representaci¨®n del Partido por la Democracia (PPD).

Carteras vac¨ªas

Su salida dej¨® al Gobierno en una situaci¨®n complicada y, desde el 7 de junio, la cartera qued¨® sin sustituto oficial. La tardanza en el nombramiento de este cargo clave, que tiene la responsabilidad de llevar el di¨¢logo con el Parlamento, desat¨® la pol¨¦mica desde la oposici¨®n y el propio oficialismo.

La presidenta, al ser consultada por los periodistas sobre este asunto, sin embargo, reaccion¨® con molestia: "?Saben qu¨¦ m¨¢s? Si yo nombro r¨¢pido, hablan de improvisaci¨®n. Si me demoro, dicen que me demoro. Terminemos con la lesera (tonter¨ªa)".

Bachelet mantiene varios cargos de relevancia sin nombramientos y, junto al caso Caval, ha debido enfrentar un nuevo flanco que tambi¨¦n le toca demasiado cerca: la investigaci¨®n de la Fiscal¨ªa al que era su c¨ªrculo pol¨ªtico m¨¢s ¨ªntimo hace bastante poco. El Ministerio P¨²blico ha interrogado en calidad de imputado a su exministro del Interior, Rodrigo Pe?ailillo, el hombre de mayor confianza de la socialista en los ¨²ltimos a?os, por su participaci¨®n en un engranaje para financiar irregularmente una supuesta precampa?a presidencial entre 2012 y 2013. Los fiscales investigan a la firma AyN, que recibi¨® dinero de empresas y, a su vez, realiz¨® pagos a colaboradores y cercanos de la socialista.

La presidenta, que en esa ¨¦poca estaba en Nueva York liderando ONU Mujeres, ha se?alado que no conoc¨ªa estos mecanismos.