El Papa defiende la justicia social ante una gran multitud en Ecuador

La justicia social no es ¡°una forma de limosna¡±, sino ¡°una verdadera deuda¡± del Estado con las familias. No es casualidad que el papa Francisco, que no suele dar puntada sin hilo, dedicase su primera homil¨ªa en Latinoam¨¦rica a la familia. Para Jorge Mario Bergoglio, que fue aclamado por m¨¢s de 600.000 personas en el parque de los Samanes de Guayaquil, la regeneraci¨®n del tejido social y la lucha contra la desigualdad ¡ªsobre todo en los pa¨ªses m¨¢s desfavorecidos¡ª tiene que pasar por la ¡°gran riqueza social de la familia¡±.

Los 30 grados de temperatura, multiplicados por una humedad del 80%, no impidieron que una multitud asistiera a la primera misa del Papa en Ecuador, a donde lleg¨® la tarde del domingo y fue recibido por el presidente, Rafael Correa. ¡°La familia es el hospital m¨¢s cercano¡±, dijo Bergoglio, ¡°la primera escuela de los ni?os, el grupo de referencia imprescindible para los j¨®venes, el mejor asilo para los ancianos¡±.

De ah¨ª que Francisco advirtiera, en un p¨¢rrafo muy significativo en Ecuador, que ¡°la familia constituye la gran riqueza social que otras instituciones no pueden sustituir¡±. A nadie se le escapa que la visita del Papa, convertido en referencia mundial m¨¢s all¨¢ de lo religioso, re¨²ne tambi¨¦n un gran contenido pol¨ªtico. Tanto el presidente de la Rep¨²blica de Ecuador como una masa social cada vez m¨¢s inquieta por sus reformas esperan que Bergoglio arrime el ascua a sus intereses.

De hecho, durante el recibimiento en el aeropuerto de Quito, Rafael Correa se esforz¨® en demostrar que sus ideales y proyectos son compartidos por Francisco. Hasta el punto que Francisco, con cierta guasa, le dijo: ¡°Agradezco sus consonancias, pero tal vez me ha citado demasiado¡±.

Los descontentos tienen la esperanza de hacer llegar a Francisco el mensaje de que todo no es tan bonito como lo pinta Correa. ¡°Yo al menos espero¡±, dec¨ªa unos instantes antes de la misa Francisco Hilario Marcillo, contratista de profesi¨®n, ¡°que el Papa le diga a Correa que no acose tanto a quien se opone. S¨¦ de gente que est¨¢ en la c¨¢rcel por haber participado en manifestaciones pac¨ªficas. Es verdad que ha hecho bastante en justicia social, pero la desigualdad sigue siendo muy grande. Lo peor de todo es que, como sucede en Venezuela, su pol¨ªtica consiste en enfrentar a unos contra otros¡±.

Tanto Correa como una masa social cada vez m¨¢s inquieta por las reformas esperan que Bergoglio arrime el ascua a sus intereses

El entorno vaticano de Francisco, que conoce sus simpat¨ªas por las pol¨ªticas de Correa, tambi¨¦n espera que el Papa, de una manera u otra, deje claro que la justicia social, la ayuda a los m¨¢s desfavorecidos, no puede ser esgrimida como un arma. O, utilizando las palabras de Bergoglio en el parque de los Samanes, como ¡°una forma de limosna¡± para luego rentabilizar en votos.

Correa ¡°juega con fuego¡±

Isabel Tor¨¢n, una ecuatoriana reci¨¦n retornada despu¨¦s de a?os de trabajo en Espa?a y Estados Unidos, advierte de que el presidente Correa ¡ªal que reconoce su capacidad para terminar con la inestabilidad cr¨®nica del pa¨ªs y un progreso sostenido en los ¨²ltimos 10 a?os¡ª est¨¢ rompiendo la concordia del pa¨ªs con tal de mantenerse en el poder. ¡°Yo que he viajado por el mundo¡±, explica, ¡°s¨¦ muy bien que est¨¢ jugando con fuego al provocar el enfrentamiento social. A gente como yo, que logramos construirnos una casa despu¨¦s de a?os trabajando tan lejos de la familia, nos quiere cobrar unos impuestos alt¨ªsimos por las plusval¨ªas. El peligro es que todos sus desmanes queden ocultos por su supuesta amistad con el Papa. Yo creo que a Bergoglio lo tienen enga?ado. Correa est¨¢ enloqueciendo¡±.

Despu¨¦s de la misa en el parque de los Samanes de Guayaquil, la jornada del Papa tambi¨¦n inclu¨ªa un almuerzo en el colegio Javier de la Compa?¨ªa de Jes¨²s y su posterior regreso a Quito para encontrarse de nuevo con el presidente de la Rep¨²blica y visitar la catedral. Tras permanecer durante la jornada del mi¨¦rcoles en Quito, Jorge Mario Bergoglio partir¨¢ para Bolivia y despu¨¦s a Paraguay.