La pol¨¦mica del crucifijo y dos revoluciones distintas

Evo Morales obtuvo importantes beneficios pol¨ªticos de la visita del papa Francisco a Bolivia. Nada m¨¢s llegar, el Pont¨ªfice reconoci¨® la inclusi¨®n en la nueva constituci¨®n boliviana de pol¨ªticas sociales y ambientales que considera fundamentales, y Morales compar¨® la orientaci¨®n de su Gobierno con el magisterio de Francisco a favor de los m¨¢s pobres. En su esfuerzo por asociar su imagen con la del Papa, el pol¨ªtico le dio la bienvenida dos veces, en La Paz y en Santa Cruz, con una diferencia de pocas horas. La propaganda oficial no cesa de mostrar a los dos l¨ªderes compartiendo un mismo prop¨®sito ¡°revolucionario¡±.

Otro logro del presidente fue inducir al Papa, con sus m¨²ltiples alusiones al conflicto que Bolivia mantiene con Chile para lograr un acceso al mar, a pronunciarse sobre el asunto, aunque lo hizo en t¨¦rminos muy prudentes. El llamamiento del Papa al di¨¢logo sobre ¡°todos los asuntos, incluso los m¨¢s espinosos¡±, no fue bien acogido por el Gobierno chileno, que actualmente disputa en la Corte Internacional de La Haya para evitar la negociaci¨®n con Bolivia.

Morales, el l¨ªder que promulg¨® la primera constituci¨®n que declara laico al Estado, que incorpor¨® los ritos polite¨ªstas ind¨ªgenas al ceremonial oficial y que atac¨® a la jerarqu¨ªa eclesi¨¢stica local, quiere cambiar su pol¨ªtica religiosa y comenzar a acercarse a los cat¨®licos, un giro que se apoy¨® en la imagen progresista de Francisco. Sin embargo, quiz¨¢ fue demasiado lejos al intentar entregarle en Palacio de Gobierno un crucifijo con la forma de la hoz y el martillo comunistas, s¨ªmbolo de la teolog¨ªa de la liberaci¨®n a la que una parte de la izquierda latinoamericana quiere afiliar a Francisco. Este, visiblemente asombrado, mir¨® el souvenir un momento y lo devolvi¨®.

El discurso oficial boliviano coincide con la ¡°enc¨ªclica verde¡±, que es como sus portavoces denominan a la reci¨¦n publicada Laudato s¨ª', en la que Francisco hace una dura cr¨ªtica a los pa¨ªses desarrollados por el desastre ecol¨®gico y por la desigualdad econ¨®mica del planeta. Morales, que acaba de aprobar unos decretos para facilitar la exploraci¨®n de hidrocarburos en las ¨¢reas protegidas y basa su ¨¦xito pol¨ªtico en realizaciones desarrollistas como la construcci¨®n de carreteras o el montaje de plantas petroqu¨ªmicas, considera, igual que el Papa, que los que deben frenar su ritmo de crecimiento tiene que ser los pa¨ªses ricos.

La oposici¨®n apenas tuvo espacio para denunciar el uso pol¨ªtico de la visita papal, en medio de la fiebre y la movilizaci¨®n popular que esta despert¨®, las cuales desafiaron la suposici¨®n de que el catolicismo hab¨ªa decrecido importantemente en las ¨²ltimas d¨¦cadas, empeque?ecido por el activismo de las confesiones evang¨¦licas.