¡°Un tibur¨®n vivo genera mucho m¨¢s dinero que uno muerto¡±

Mauricio Hoyos (Ciudad de M¨¦xico, 1976) qued¨® fascinado cuando en su infancia vio por primera vez la pel¨ªcula Tibur¨®n. Las enormes mand¨ªbulas de los escualos retratados por Steven Spielberg inspiraron a este bi¨®logo mexicano a dedicar los ¨²ltimos 20 a?os de su vida a estudiar a los tiburones blancos en las costas mexicanas. Desde 2003, el investigador viaja constantemente a la inh¨®spita Isla de Guadalupe (noroeste de M¨¦xico) para analizar el comportamiento y los h¨¢bitos de esta especie. All¨ª, Hoyos ha conseguido observar a los ejemplares m¨¢s grandes de tibur¨®n blanco del mundo y tambi¨¦n ha comprobado que estos hist¨®ricos depredadores pueden atrapar a sus presas en aguas profundas del oc¨¦ano Pac¨ªfico.

La mayor¨ªa de la gente no sabe que en M¨¦xico tenemos el mejor sitio para ver tiburones blancos. Viene gente de todo el mundo?

"La mayor¨ªa de la gente no sabe que en M¨¦xico tenemos el mejor sitio para ver tiburones blancos, que es Isla Guadalupe. Viene gente de todo el mundo y todos coinciden en que es uno de los mejores lugares por la visibilidad en el agua, que es de unos 30 metros, y el n¨²mero tiburones que puedes ver en un d¨ªa es hasta de 30", cuenta en entrevista con EL PA?S. La Isla de Guadalupe es la posici¨®n insular m¨¢s lejana de M¨¦xico. Un territorio volc¨¢nico de 352 kil¨®metros cuadrados que tiene como habitantes una peque?a base naval y una aldea de 100 pescadores. Viajar all¨ª toma 24 horas en un barco desde la Pen¨ªnsula de Baja California, pero nadie puede poner un pie en la isla sin un permiso gubernamental. Hoyos pasa entre tres y cinco meses al a?o marcando tiburones con geolocalizadores y analizando sus movimientos. "Sabemos que utilizan Baja California como guarder¨ªa, ah¨ª dejan a sus cr¨ªas hasta que crecen".

Hace un mes, el investigador encontr¨® a uno de los espec¨ªmenes m¨¢s grandes de tibur¨®n blanco que se han visto en el mundo: Deep Blue. Esta hembra de 6,5 metros de largo se acerc¨® a un barco de turistas y examin¨® la jaula en la que los visitantes se sumergen para observar a la especie. El v¨ªdeo, publicado por el investigador, se volvi¨® viral en unas cuantas horas. "Es una hembra gigantesca, la m¨¢s grande que he visto en mi vida", relata. Como conocedor de tiburones blancos, Hoyos no pudo pasar por alto que esta hembra estaba embarazada y que eso aumentaba significativamente sus dimensiones. Las hembras de tibur¨®n blanco, explica, tienen dos ¨²teros y pueden gestar hasta 15 cr¨ªas. "Deep Blue estaba a punto de tenerlas".

DEEP BLUEI give you the biggest white shark ever seen in front of the cages in Guadalupe Island....DEEP BLUE!!!Este es el tibur¨®n blanco mas grande visto desde las jaulas en Isla Guadalupe...DEEP BLUE!!!

El tibur¨®n blanco permanece cerca de las costas mexicanas porque all¨ª abundan los elefantes marinos, su presa preferida. La investigaci¨®n de Hoyos ha comprobado que los escualos aprovechan la visibilidad y la profundidad del oc¨¦ano Pac¨ªfico en esta regi¨®n para conseguir alimento a 150 metros de profundidad. El bi¨®logo consigui¨® que Discovery Channel financiara un torpedo con seis c¨¢maras, con un valor de un mill¨®n de d¨®lares, para seguir a los ejemplares a las profundidades del mar. "Con este aparato descubrimos que atacan a 100 y 150 metros de profundidad, lo cual es ¨²nico en el mundo, en todas las partes del planeta atacan de 20 metros a la superficie", describe. En esa expedici¨®n, los escualos confundieron el torpedo con una presa y lo atacaron con sus gigantescas mordidas.

El tibur¨®n blanco permanece cerca de las costas mexicanas porque all¨ª abundan los elefantes marinos, su presa preferida

Con mucha emoci¨®n, Hoyos cuenta en foros y escuelas sus experiencias con los tiburones blancos y reconoce que la especie ha sido "difamada" desde aquella pel¨ªcula setentera que lo enganch¨® para siempre. "Es un depredador perfecto que est¨¢ dise?ado para mantener el equilibrio de los ecosistemas marinos", explica ante los insistentes cuestionamientos sobre los ataques de tibur¨®n a humanos. "Todos lo relacionan con un monstruo asesino que le encantan los seres humanos y la verdad es que no les gustamos. Ellos buscan presas con mucha grasa para que les de energ¨ªa y los seres humanos no tenemos la que se necesita. En la mayor¨ªa de los casos te muerde el tibur¨®n y te libera", explica. La mordida de un tibur¨®n tiene la fuerza de 1,8 toneladas por cent¨ªmetro cuadro, lo que explica que desde 1876 el 10% de los ataques a humanos en el mundo fuesen mortales.

La poblaci¨®n de tibur¨®n blanco en M¨¦xico ha aumentado en los ¨²ltimos 15 a?os tras la implementaci¨®n de medidas para evitar su caza. Los pescadores y la poblaci¨®n han dejado de verlo como un animal de consumo, reconoce Hoyos. El ecoturismo ha entrado en escena: viajar una semana a Isla Guadalupe para observar al tibur¨®n blanco cuesta entre 2.700 y 3.500 d¨®lares. El investigador estima que cada ejemplar genera 220.000 d¨®lares en turismo, mientras que la venta de uno de ellos muerto es de 300 d¨®lares. "Un tibur¨®n vivo genera mucho m¨¢s dinero que uno muerto", apunta.