¡°Los mexicanos tenemos propensi¨®n gen¨¦tica al desarrollo de diabetes¡±
El subsecretario de Salud pide tiempo para ver los frutos del plan integral contra la obesidad y la diabetes, lanzado en 2013
La obesidad se ha convertido en una suerte de pandemia en M¨¦xico. Desde los ochenta los casos se han multiplicado por tres. Al 70% de los adultos mexicanos le sobran kilos y ya es el segundo pa¨ªs del mundo m¨¢s afectado, solo por detr¨¢s de EE UU. El Gobierno lanz¨® en 2013 un plan integral contra la obesidad y la diabetes, ¨ªntima compa?era del exceso de grasa, y que supone la tercera causa de muerte en el pa¨ªs.
En un a?o y medio el plan no ha logrado detener el avance de ninguno de los dos padecimientos. El subsecretario de Salud, Pablo Kuri Morales, pide tiempo para ver los frutos a la vez que los relativiza: ¡°Ninguna pol¨ªtica p¨²blica est¨¢ escrita en piedra. Esto es un problema global y ninguna pa¨ªs ha acabado de momento con ¨¦l¡±.
Pregunta. ?Por qu¨¦ ha crecido tanto el problema en M¨¦xico?
Respuesta. Hay un problema de estilos de vida no saludables importados particularmente de EE UU. Tambi¨¦n influye la incorporaci¨®n de la mujer al trabajo, cada vez hay menos comida en casa. La gente tiene que comer fuera y la oferta es de alto contenido cal¨®rico. Otro factor es el sedentarismo, sobre todo en las ciudades. Cada vez hay menos espacios para el desarrollo de la actividad f¨ªsica. Hay un desbalance entre la ingesta cal¨®rica que ahora es mucho mayor que antes. Adem¨¢s no es solo el tipo de comida, sino las porciones. Las estrategias de comercializaci¨®n casi te obligan de alguna manera a que consumas las m¨¢s grandes.
Quiz¨¢ al final de la administraci¨®n [2018] veamos que la obesidad ya no sigue aumentando
P. ?Cu¨¢l es su balance del plan contra la obesidad?
R. Estamos trabajando de una manera coordinada con otras secretar¨ªas porque los determinantes son sociales. Con Trabajo, con Educaci¨®n p¨²blica para la implantaci¨®n de bebederos en las escuelas, con Urbanismo para que haya lugares esparcimiento. Cuando se cumpli¨® el primer a?o del plan nos dijeron que estaba siendo un fracaso porque los ¨ªndices de obesidad y diabetes no bajaron. Todo esto ha empezado en los ochenta. Si alguien piensa que los vamos a arreglar en dos a?os no tiene ni idea. Es bien complejo y en la estrategia tratamos de abordar todos las vertientes: campa?as de concienciaci¨®n, normas sobre etiquetado, impuestos a los refrescos. Quiz¨¢ al final de la administraci¨®n [2018] veamos que ya no sigue aumentando.
Los recortes presupuestarios no afectan al programa contra la obesidad
P. ?Considerar¨ªan eso un ¨¦xito?
R.?S¨ª. Teniendo en cuenta los fuertes incrementos de los ¨²ltimos a?os, el hecho de que no sigan subiendo ser¨ªa un ¨¦xito.
P. M¨¦xico tiene las tasas de hospitalizaci¨®n m¨¢s bajas por diabetes y los pacientes pagan hasta el 50% de los medicamentos. La OCDE pide una mejora de la atenci¨®n primaria.
La OCDE es cr¨ªtica y sabemos lo que est¨¢ ocurriendo. La atenci¨®n primaria est¨¢ siendo reformada con la Red de Excelencia en Diabetes que ya est¨¢ en 27 estados y que busca el control metab¨®lico del paciente lo antes posible. La ¨²ltima encuesta nacional mostraba que apenas un cuarto de los afectados estaban en control metab¨®lico. Queremos subirlo un 7%, que son muchos millones. Adem¨¢s, los mexicanos tenemos propensi¨®n gen¨¦tica al desarrollo de diabetes e incluso a la obesidad.
P. ?Est¨¢n actuando seg¨²n ese paradigma gen¨¦tico?
R.?Est¨¢n vi¨¦ndolo en el instituto de medicina gen¨®mica y ya hay algunos estudios que dicen que tenemos propensi¨®n a desarrollar intolerancia a la glucosa y a la obesidad. No es nuevo. Hay estudios que se hicieron en EE UU que muestran que hay m¨¢s diabetes entre mexicanos que estadounidenses a pesar de ser la misma dieta. Tiene que ver con la raza amerindia. Ese es un factor m¨¢s a tener en cuenta.
P. Este a?o su cartera sufri¨® un recorte 3.000 millones, ?habr¨¢ m¨¢s recortes?
R.?No lo s¨¦, todav¨ªa no est¨¢ el presupuesto para 2016. Pero el planteamiento es que para los programas preventivos no haya recorte. Lo que estamos recortando no afecta al programa de obesidad.
P. ?Est¨¢n satisfechos con el resultado del impuesto sobre los refrescos?
R.?Baj¨® el 6% el consumo. Es poco, pero ya baj¨®. Ahora tenemos que ver eso que representa en t¨¦rminos de salud. Hay que hacer m¨¢s estudios porque hay intereses. La industria dice que no sirven y las organizaciones de consumidores dicen que no es suficiente. Ninguna pol¨ªtica p¨²blica est¨¢ terminada. Ninguna ha acabado con el problema.
P. ?Hasta qu¨¦ punto presiona la industria?
R.?Aqu¨ª no. Les escuchamos, les decimos que vamos a llegar juntos hasta donde podamos y luego somos el estado mexicano y tenemos una responsabilidad en la salud de la poblaci¨®n y estamos haciendo lo que tenemos que hacer.
P. En las escuelas se han tomado medidas como prohibir las m¨¢quinas de comida o las fuentes, pero muchos profesores (el 70%) no saben c¨®mo implementarla
R.?Es un proceso. Tienes que ir capacitando los profesores, trabajando con los alumnos. Se va a empezar con las escuelas de tiempo completo. Se tiene que ir avanzando poco a poco. Los resultados se van a ver en el mediano y largo plazo.
P. M¨¦xico incumple las recomendaciones sobre el etiquetado de los niveles de az¨²car de la Organizaci¨®n Panamericana de la Salud, dependiente de la ONU
R.?Hasta marzo no ha habido una recomendaci¨®n oficial. Nuestro etiquetado entr¨® en vigor en julio pero se aprob¨® hace un a?o. Tenemos que ver que vamos a hacer. No puede estar actualizado si es de antes de la recomendaci¨®n. Adem¨¢s, como recomendaci¨®n, no es obligatoria ni vinculante, la podr¨ªamos o no aceptar.
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