Una pol¨¦mica biograf¨ªa pone en aprietos al primer ministro Cameron

Marihuana, coca¨ªna, clasismo y extra?os rituales sexuales con un cerdo muerto se mezclan en un inc¨®modo esc¨¢ndalo, con tintes de venganza personal, en el que se ha visto envuelto el primer ministro brit¨¢nico, David Cameron, a ra¨ªz de una biograf¨ªa no autorizada escrita por el poderoso millonario fil¨¢ntropo Lord Ashcroft, exvicepresidente, extesorero, y donante habitual del Partido Conservador.

El libro, titulado Ll¨¢mame Dave, que ha empezado a ser hoy publicado por entregas en el diario sensacionalista The Daily Mail, traza una biograf¨ªa personal de David Cameron a trav¨¦s, supuestamente, de entrevistas mantenidas con m¨¢s de 100 personas cercanas al primer ministro conservador. La primera entrega aborda los a?os del joven Cameron como estudiante en la elitista universidad de Oxford.

All¨ª, seg¨²n el libro, el primer ministro ingres¨® en un decadente club llamado Piers Gavestone Society. El texto contiene el testimonio de un diputado conservador que asegura tener en su poder un documento fotogr¨¢fico de un pintoresco ritual de iniciaci¨®n en el que Cameron introduc¨ªa ¡°una parte privada de su anatom¨ªa¡± en la boca del cad¨¢ver de un cerdo. Tambi¨¦n, seg¨²n el libro, el primer ministro form¨® parte del infame Bullingdon Club, una sociedad de estudiantes ricos que se dedicaban a emborracharse y destrozar los restaurantes donde se reun¨ªan para cenar. No hay constancia de que Cameron participara en ninguno de los destrozos del club, del que tambi¨¦n formaron parte el ministro de Econom¨ªa, George Osborne, y el alcalde Londres, Boris Johnson. Seg¨²n el testimonio de otro diputado tory, que acudi¨® a una de las cenas del club y sali¨® espantado, la gracia consist¨ªa en ¡°menospreciar a los pobres¡±.

Cameron, seg¨²n el libro, fue miembro de una tercera sociedad, el Flam Club, un grupo cuya raz¨®n de ser consist¨ªa, principalmente, en fumar porros. Un amigo de la universidad convertido en periodista, James Delingpole, que perteneci¨® tambi¨¦n al Flam Club, asegura que fum¨® marihuana ocasionalmente con el ahora primer ministro mientras escuchaban discos de Supertramp. ¡°Lo niego todo. No tragamos el humo. O algo as¨ª¡±, brome¨® Delingpole en Twitter. El libro tambi¨¦n sugiere que se consumi¨® coca¨ªna en fiestas en la casa de Cameron, aunque no especifica si ¨¦l estuvo al corriente.

La portavoz de David Cameron, en su rueda de prensa semanal, declin¨® hacer comentarios sobre el libro de Lord Ashcroft. ¡°No voy a dignificar el libro ofreciendo reacciones o comentarios acerca de lo publicado¡±, explic¨®. ¡°El propio autor ha expuesto sus motivos para escribirlo¡±.

Se refiere a un art¨ªculo de Lord Ashcroft publicado tambi¨¦n en el Mail, en el que explica que sus relaciones con el primer ministro ¡°se tensaron¡± despu¨¦s de negarle este un cargo relevante cuando fue elegido primer ministro por primera vez en 2010. Los millones que don¨® al partido en aquella campa?a se contemplan como un factor importante en la victoria conservadora, y ¨¦l esperaba un puesto importante en el Gobierno en compensaci¨®n. Pero Nick Clegg, l¨ªder del Partido Liberal Dem¨®crata que form¨® Gobierno de coalici¨®n con los tories, se opuso. Entonces Cameron ofreci¨® a Ashcroft un puesto menor en el Foreign Office, oferta que ofendi¨® al millonario donante. "Despu¨¦s de haber arrimado el hombro durante 10 a?os y de haber invertido ocho millones de libras, me pareci¨® una oferta declinable¡±, explic¨® Ashcroft. ¡°Habr¨ªa preferido que no me hubiera ofrecido nada¡±.

Adem¨¢s de los episodios universitarios, el libro-venganza de Ashcroft incluye una acusaci¨®n con un potencial de riesgo pol¨ªtico mayor, en la que ¨¦l mismo es el protagonista. Ashcroft se vio envuelto en un esc¨¢ndalo que salpic¨® al partido, hace cinco a?os, cuando reconoci¨® que ten¨ªa estatus fiscal de ¡°no domiciliado¡±, lo que le permit¨ªa no pagar impuestos por las rentas que generaba fuera de Reino Unido. Un asunto que en el a?o 2000 se hab¨ªa comprometido con el partido a regularizar. El esc¨¢ndalo salt¨® en marzo de 2010, poco antes de las elecciones, y Cameron asegur¨® que se hab¨ªa enterado del asunto hac¨ªa solo un mes. Pero Ashcroft sostiene en el libro que el primer ministro lo sab¨ªa desde 2009.

Hoy Ashcroft mantiene su influencia en la pol¨ªtica brit¨¢nica, al frente de una de las empresas de sondeos m¨¢s importantes del pa¨ªs. Su ruptura definitiva con Cameron lleg¨® tras la decisi¨®n de este de fichar al australiano Lynton Crosby para dirigir la campa?a de las elecciones del pasado mes de mayo. Ashcroft desaconsej¨® el fichaje, pero no se le escuch¨® y Crosby se apunt¨® una sorprendente mayor¨ªa absoluta y, con ella, su influencia se hizo enorme en Downing Street.