Jap¨®n admite el primer caso de c¨¢ncer relacionado con Fukushima

El Gobierno japon¨¦s ha confirmado por primera vez un caso de c¨¢ncer causado por exposici¨®n a la radiaci¨®n entre los trabajadores de la central nuclear de Fukushima tras el desastre de 2011. En un episodio que puede generar consecuencias para los planes del Ejecutivo de retomar la energ¨ªa nuclear y repoblar la zona afectada, el Ministerio de Sanidad ha anunciado que pagar¨¢ una compensaci¨®n por gastos m¨¦dicos y p¨¦rdida de ingresos a un antiguo trabajador de Fukushima, de 41 a?os, al que se ha diagnosticado leucemia sin que se pueda descartar que la contrajera por contacto con la radiaci¨®n a ra¨ªz de la cat¨¢strofe.

Seg¨²n el Gobierno nip¨®n, el trabajador afectado, del que no se ha divulgado el nombre, ¡°fue a visitar a un m¨¦dico porque no se encontraba bien. Entonces se le diagnostic¨® leucemia¡±, informa AFP. Para entonces ya hab¨ªa renunciado a su empleo en Fukushima. El paciente, que trabaj¨® en la central entre 2012 y 2013 y siempre llev¨® equipo protector, decidi¨® solicitar la compensaci¨®n oficial que se concede a las v¨ªctimas de enfermedades laborales.

Tras examinar su caso, los funcionarios determinaron que era probable que el paciente hubiera desarrollado la enfermedad mientras participaba en las labores de limpieza de la central. Los ex¨¢menes que se le practicaron determinaron que hab¨ªa estado expuesto a una radiaci¨®n equivalente a 19,8 milisieverts durante su trabajo en diversas centrales nucleares, pero recibi¨® la mayor¨ªa, 15,7 milisieverts, en Fukushima. La legislaci¨®n japonesa concede a un empleado de una planta nuclear el derecho a recibir compensaci¨®n si ha estado expuesto a m¨¢s de 5 milisieverts anuales y ha desarrollado c¨¢ncer m¨¢s de un a?o despu¨¦s.

Es la primera vez en que las autoridades japonesas reconocen un v¨ªnculo entre la cat¨¢strofe nuclear y un caso de c¨¢ncer. Hasta ahora siempre hab¨ªan insistido en que la exposici¨®n a la radiaci¨®n entre los trabajadores de la planta y los residentes en la zona hab¨ªa sido muy baja. Tambi¨¦n descartaron que casos como los del c¨¢ncer de es¨®fago del h¨¦roe de Fukushima Masao Yoshida, el director de la planta que se expuso a grandes niveles de radiaci¨®n para intentar evitar un desastre mayor, estuvieran relacionados con la cat¨¢strofe. En 2013, la OMS alert¨® de la posibilidad de una mayor incidencia de c¨¢nceres entre los habitantes de las zonas m¨¢s cercanas a la central.

Otros tres antiguos trabajadores de la planta han solicitado compensaci¨®n por enfermedad y est¨¢n a la espera de que se resuelvan sus casos. Seg¨²n la cadena NHK, cerca de 45.000 personas han participado en las labores de limpieza en la planta desde el terremoto y el tsunami de 2011, y 21.000 de ellas han estado expuestas a m¨¢s de 5 milisieverts anuales.

La noticia ha ca¨ªdo como una jarra de agua fr¨ªa entre el p¨²blico nip¨®n, muy cr¨ªtico con la decisi¨®n del Gobierno de poner fin al par¨®n nuclear en el pa¨ªs tras la cat¨¢strofe. En agosto pasado se inici¨® el primer reactor, en la planta de Sendai, en el sur del pa¨ªs, y la semana pasada comenz¨® a funcionar un segundo reactor en esa misma planta. Otros tres reactores en otras dos plantas han recibido ya el visto bueno preliminar de la agencia reguladora para volver a la actividad.

Oposici¨®n a la energ¨ªa nuclear

Seg¨²n las encuestas, casi dos tercios de la poblaci¨®n nipona se oponen a la vuelta a la energ¨ªa nuclear por temor a que pueda ocurrir un nuevo Fukushima. ¡°Mucha gente sigue preocupada por el reinicio de las plantas nucleares¡±, aseguraba la semana pasada a NHK Ryoko Torihara, l¨ªder de la asociaci¨®n ciudadana contra la central de Sendai, tras la entrada en funcionamiento del reactor. Pero el Gobierno alega que contar con los 45 reactores existentes o en construcci¨®n en Jap¨®n es necesario para la econom¨ªa nacional, dado que el pa¨ªs importa el 90% del petr¨®leo que consume. Tokio prev¨¦ que para 2030 la energ¨ªa nuclear cubra casi una cuarta parte de las necesidades del pa¨ªs. En 2011 esa proporci¨®n era del 39%.

La confirmaci¨®n del caso tambi¨¦n representa una mala noticia para los esfuerzos del Gobierno para conseguir la vuelta de los residentes a la zona afectada. Unas 160.000 personas tuvieron que ser evacuadas tras el desastre, de las cuales 120.000 a¨²n no han regresado. Cada afectado tiene derecho a una compensaci¨®n de 100.000 yenes, o 738 euros, mensuales.

Tokio planea revocar las ¨®rdenes de evacuaci¨®n para cerca de 55.000 residentes en zonas pr¨®ximas a la planta para marzo de 2017, en un intento de acelerar la reconstrucci¨®n y reducir esos pagos. Desde el 5 de septiembre pasado, los 7.000 habitantes de Nahara, un pueblo a solo 12 kil¨®metros de Fukushima, tienen autorizaci¨®n para regresar. Aunque hasta ahora, la mayor¨ªa de los que han regresado son jubilados. Cuatro a?os despu¨¦s de la cat¨¢strofe, la mayor¨ªa de los evacuados en edad laboral, o con familias, han echado ra¨ªces en sus nuevos lugares de residencia y se muestran renuentes a regresar a un lugar donde temen que a¨²n puedan quedar residuos radiactivos que puedan afectar a su salud a largo plazo.

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