Armando Cossutta, el comunista italiano m¨¢s fiel a Mosc¨²
Duro opositor a Enrico Berlinguer, nunca renunci¨® a la perspectiva revolucionaria
Una storia comunista, el t¨ªtulo de la autobiograf¨ªa de Armando Cossutta, vale un epitafio. Hist¨®rico dirigente del Partido Comunista Italiano (PCI), Cossutta naci¨® en Mil¨¢n, el 2 de septiembre de 1926, y falleci¨® el pasado lunes en Roma, con 89 a?os. Durante la II Guerra Mundial fue partisano y despu¨¦s se convirti¨® en el dirigente m¨¢s cr¨ªtico con el eurocomunismo del secretario Enrico Berlinguer, quien intentaba alejar el PCI de la ¨®rbita sovi¨¦tica. Tras la ca¨ªda del Muro polemiz¨® con el giro socialdem¨®crata del partido hasta salir de la formaci¨®n y fundar un nuevo partido, Refundaci¨®n Comunista. Fue parlamentario y senador durante casi 40 a?os, y desde 2009 ocupaba el cargo de vicepresidente de la asociaci¨®n nacional de los partisanos de Italia.
Su compromiso con la causa comunista floreci¨® durante la II Guerra Mundial, cuando ten¨ªa 17 a?os. Mil¨¢n, su ciudad natal, estaba ocupada por los nazis, y l¡¯Armando (como se le llamaba en la capital lombarda) decidi¨® alistarse en las brigadas partisanas Garibaldi. Madur¨® pol¨ªticamente bajo el ala protectora de Palmiro Togliatti, el hist¨®rico secretario del PCI, que consinti¨® el encuentro con las fuerzas laicas y cat¨®licas para que Italia pasara de bando durante la guerra y luchara contra el fascismo. Acabado el conflicto, el joven partisano fue elegido concejal en el Ayuntamiento de Mil¨¢n, donde subi¨® el primer escal¨®n del cursus honorum que el partido impon¨ªa a sus cuadros.
Fiel a Mosc¨², Cossutta se distingui¨® en los a?os setenta y ochenta como referente del ala cr¨ªtica a Enrico Berlinguer. Apoy¨® la estrategia de acercamiento con la Democracia Cristiana, el compromiso hist¨®rico elaborado para luchar contra el terrorismo de izquierda y contra una derecha reaccionaria inspirada en Pinochet, Franco y los coroneles griegos. Actu¨® con obstinaci¨®n cr¨ªtica, pero siempre mostrando respeto a las decisiones tomadas en Botteghe Oscure, la sede romana del Partido Comunista Italiano, ubicada a pocos metros de donde ser¨ªa hallado el cuerpo del presidente democristiano Aldo Moro, acribillado por las Brigadas Rojas en 1978.
Refundaci¨®n Comunista
Tras la ca¨ªda del Muro, el PCI dej¨® la hoz y el martillo y se rebautiz¨® como Partido Democr¨¢tico della Sinistra (PDS). Cossutta critic¨® esta decisi¨®n y fund¨® Refundaci¨®n Comunista, una formaci¨®n que reivindicaba la ideolog¨ªa marxista y criticaba los acuerdos de Maastricht. No siempre coincidi¨®, sin embargo, con las decisiones tomadas por sus l¨ªderes. En 1996 se neg¨® a votar en contra de Prodi y a?os despu¨¦s apoy¨® la investidura del Gobierno de Massimo D¡¯Alema, primer y ¨²nico comunista italiano en alcanzar la presidencia del Ejecutivo. Acab¨® votando al Partido Democr¨¢tico, pero siempre ¡°como comunista¡±.
Con Berlinguer tuvo numerosos desencuentros. Cossutta se negaba a aceptar la l¨®gica reformista sublimada en la frase del ¡°agotamiento del empuj¨®n propulsivo de la revoluci¨®n de octubre¡±, pronunciada por Berlinguer tras el golpe de Estado del general Jaruzelski en Polonia en 1981. ¡°No se han agotado los valores de la revoluci¨®n francesa, no veo c¨®mo pueden agotarse los de la de octubre¡±, contestaba Cossutta. Una convicci¨®n, sin embargo, les un¨ªa: mantenerse fieles a los valores de su juventud. Muri¨® pocos meses despu¨¦s que su mujer, Emilia Clementi. La conoci¨® de joven, durante la guerra, cuando ten¨ªa 19 a?os.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.