?Por qu¨¦ Donald Trump?
Su candidatura refleja una ola de populismo ignorante que llevar¨ªa a Estados Unidos en una direcci¨®n completamente nueva
El proceso electoral de Estados Unidos ha pasado por fin de los gritos a los votos y los gritos. De Donald Trump a Bernie Sanders, esta campa?a presidencial est¨¢ siendo una sorpresa detr¨¢s de otra. Tal vez pasen meses antes de que sepamos de verdad qui¨¦n va a figurar en las papeletas de noviembre.
Mientras tanto, los candidatos rivalizan en encontrar explicaciones simplistas y extremistas para un pa¨ªs que, en opini¨®n de todos ellos, necesita cambios profundos. Con palabras que var¨ªan de unos a otros, todos los aspirantes republicanos a la presidencia dicen que el pa¨ªs anda a la deriva, que le ha fallado a su gente y que se ha visto superado por todo el mundo, desde China y Rusia hasta M¨¦xico y el ISIS. En el bando dem¨®crata, el senador Bernie Sanders clama contra la concentraci¨®n de la riqueza propia de capitalistas sin escr¨²pulos, e incluso Hillary Clinton ¡ªcuyos libros y conferencias le han permitido ganar muchos millones de d¨®lares¡ª habla, sin nombrarlos, de esos ricos que dirigen el pa¨ªs en su propio beneficio.
De Donald Trump a Bernie Sanders, esta campa?a presidencial est¨¢ siendo una sorpresa
Por supuesto, Donald Trump es el candidato m¨¢s reaccionario y menos pol¨ªticamente correcto. Su eslogan de campa?a encierra la idea de que el pa¨ªs ha cambiado para peor. "Hagamos que Am¨¦rica vuelva a ser grande."
Lo ir¨®nico es que, fuera de la pol¨ªtica, el pa¨ªs no parece enfadado. La criminalidad no va en aumento; no se ve a manifestantes en las calles ni en campamentos del tipo de Occupy Wall Street; no hay grandes conflictos laborales; la econom¨ªa va bien y est¨¢ creando empleo.
Sin embargo, todos los sondeos revelan una inquietud de fondo. Una encuesta de Esquire/NBC News publicada el mes pasado lleg¨® a la conclusi¨®n de que la mayor¨ªa de los estadounidenses opinan que el sue?o americano est¨¢ muerto, piensan que est¨¢n peor de lo que se esperaban cuando eran m¨¢s j¨®venes y creen que el sistema est¨¢ manipulado para favorecer a los ricos.
En un pa¨ªs que se considera de clase media y en ascenso, muchos empiezan a poner en duda el mito fundacional de que en Estados Unidos cualquiera puede triunfar por su propio esfuerzo. Unas dudas que se basan en que la renta real media es hoy muy inferior a la del a?o 2000 (y sigue cayendo), mientras que el coste del modo de vida t¨ªpicamente estadounidense no ha dejado de aumentar. Por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial, la clase media est¨¢ disminuyendo.
La mayor¨ªa de los estadounidenses opinan que el sue?o americano est¨¢ muerto
La preocupaci¨®n de los estadounidenses no se debe s¨®lo al dinero. Desde 1998, la tasa de mortalidad de los estadounidenses blancos no ha dejado de aumentar, a diferencia de todos los dem¨¢s pa¨ªses ricos industrializados. Angus Deaton, premio Nobel de Econom¨ªa en 2015, calcula que esa tendencia se ha traducido ya en medio mill¨®n de muertes prematuras. Las mayores causas de muerte son el suicidio, el alcohol y las drogas; un panorama que parece m¨¢s la caricatura de una Rusia triste y envejecida que la imagen de un Estados Unidos supuestamente saludable.
Esto no ser¨ªa tan tr¨¢gico si las generaciones j¨®venes estuvieran preparadas para un mundo tecnol¨®gico y en r¨¢pida transformaci¨®n. Por desgracia, no lo est¨¢n.
Por ejemplo, el ej¨¦rcito de Estados Unidos rechaza al 70% de todos los que solicitan el ingreso, la mitad de ellos porque no cumplen los requisitos f¨ªsicos y la mayor¨ªa de los dem¨¢s porque no superan las pruebas b¨¢sicas de aptitud. Asimismo, alrededor del 60% de los alumnos que terminan el bachillerato en el pa¨ªs no est¨¢n preparados ni para la universidad ni para trabajar, y los alumnos m¨¢s j¨®venes est¨¢n siempre, en todas las clasificaciones mundiales, por detr¨¢s de al menos una veintena de otros pa¨ªses.
Alrededor del 60% de los alumnos que terminan el bachillerato en el pa¨ªs no est¨¢n preparados ni para la universidad ni para trabajar
Como consecuencia, una mayor¨ªa de estadounidenses dice en las encuestas que tienen cierta, poca o ninguna confianza en el futuro del pa¨ªs, y ese miedo al futuro es m¨¢s pronunciado entre los adultos menores de 30 a?os.
?A qui¨¦n elegir¨¢n estos votantes en noviembre? No hay m¨¢s que dos perspectivas posibles: o a uno de los candidatos m¨¢s furiosos o a Hillary Clinton, que es la ¨²nica candidata del sistema que cuenta con verdaderos apoyos.
Aunque los ciudadanos dicen, en su inmensa mayor¨ªa, que prefieren a alguien nuevo, las reglas del juego, a la hora de la verdad, benefician a los de siempre. Ahora bien, en la extra?a situaci¨®n actual, es posible, aunque improbable, imaginar a Trump, Ted Cruz, Marco Rubio e incluso Sanders abri¨¦ndose camino hacia la Casa Blanca si Clinton, la favorita, tropieza gravemente.
Cualquiera de los presidentes furiosos llevar¨ªa a cabo seguramente las pol¨ªticas de poner a Estados Unidos por encima de todo, propias de antes del consenso internacionalista de posguerra. Un presidente Trump no ser¨ªa muy distinto de los otros, que comparten la misma visi¨®n reaccionaria del mundo, la hostilidad hacia los extranjeros, la falta de experiencia de gobierno y el desprecio total hacia los acuerdos necesarios en las democracias.
Otra presidencia Clinton podr¨ªa hacer que el nativismo reaccionario de estos tiempos derivara en una fuerza pol¨ªtica todav¨ªa m¨¢s peligrosa en el futuro
S¨®lo queda aparte Clinton, la favorita en las apuestas. Una presidencia de Hillary Clinton, por lo menos, empezar¨ªa por intentar parecer una presidencia de Bill Clinton, un poco m¨¢s hacia el centroizquierda dentro de la mezcla pol¨ªtica que predomina desde hace d¨¦cadas.
Por desgracia, esas son precisamente las pol¨ªticas que, sin querer, han generado la ira, la frustraci¨®n y el pesimismo que est¨¢ empezando a rezumar la sociedad estadounidense. Otra presidencia Clinton podr¨ªa hacer que el nativismo reaccionario de estos tiempos derivara en una fuerza pol¨ªtica todav¨ªa m¨¢s peligrosa en el futuro.
Eso es lo que da miedo de Donald Trump: no el hecho de que tiene posibilidades de ser elegido ¡ªel pa¨ªs ha sobrevivido a cosas peores¡ª, sino que refleja una ola de populismo ignorante que llevar¨ªa a Estados Unidos en una direcci¨®n completamente nueva.
* Alan Stoga es Asesor principal en Kissinger Associates, Nueva York.
* Traducci¨®n de Mar¨ªa Luisa Rodr¨ªguez Tapia.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.