El anhelo de mejora econ¨®mica marca las elecciones legislativas iran¨ªes
La votaci¨®n, este viernes, marcar¨¢ el equilibrio de fuerzas entre posturas reformistas y conservadoras
Los iran¨ªes acuden este viernes a las urnas para elegir a los miembros del Parlamento y de la Asamblea de Expertos (un consejo de 88 cl¨¦rigos de alto rango que designan, supervisan y destituyen al l¨ªder supremo) con la exigencia mayoritaria de una mejora de la econom¨ªa del pa¨ªs tras a?os de duras sanciones impuestas por las ambiciones nucleares de Teher¨¢n. La votaci¨®n marcar¨¢ el equilibrio de fuerzas en el Parlamento entre posturas reformistas, que abogan por una mayor apertura del pa¨ªs, y las l¨ªneas conservadoras, que pugnan por defender la esencia de la revoluci¨®n iran¨ª.
El actual Gobierno de Hasan Rohani cuenta con el efecto psicol¨®gico de su ¨¦xito en el campo de la diplomacia, que ha permitido precisamente el levantamiento de las sanciones tras el acuerdo nuclear alcanzado el pasado julio con las seis potencias mundiales (Estados Unidos, Rusia, China, Francia, Reino Unido y Alemania). Por ello, conf¨ªa en una alta tasa de participaci¨®n de los sectores sociales m¨¢s progresistas a favor de los candidatos que defienden las posturas de su Ejecutivo. Al mismo tiempo, los sectores conservadores destacan la constante advertencia del l¨ªder supremo, Ali Jamenei, sobre el riesgo de la influencia de los extranjeros en el pa¨ªs tras el levantamiento de las sanciones como argumento contra sus rivales reformistas o moderados, a los que acusan de no proteger los principios de la revoluci¨®n iran¨ª.
"Yo no creo que la soluci¨®n de los problemas econ¨®micos dependa de votar a favor de un partido pol¨ªtico en concreto, eso necesita una voluntad entre todo el pa¨ªs, pero la mayor¨ªa de los diputados pierden su tiempo en luchas pol¨ªticas innecesarias en vez de preocuparse por su electorado", se?ala Milad Mirzai, un joven que vuelve con su comprometida del Mausoleo de la hermana del octavo im¨¢n de los chi¨ªes en Qom.
En la ciudad de Qom, famosa por sus escuelas religiosas y su ambiente conservador, a 150 kil¨®metros de la capital iran¨ª, no es raro que la gente justifique todo con las declaraciones del ayatol¨¢ Jamenei, el l¨ªder supremo de Ir¨¢n. Asghar Hadadi, estudiante de teolog¨ªa de Isfah¨¢n, que est¨¢ de peregrinaci¨®n, asegura que "la recuperaci¨®n de la econom¨ªa es la mayor preocupaci¨®n del l¨ªder y que los futuros parlamentarios tienen que dirigir sus esfuerzos para superar los obst¨¢culos".
"Lo que m¨¢s urge es generar empleo para los j¨®venes si no el pa¨ªs sufrir¨¢ las consecuencias", opina Mina Bakhshi, una joven experta en nutrici¨®n. "La tasa de desempleo entre los profesionales que disponen de un t¨ªtulo universitario es 22%, casi el doble del promedio del pa¨ªs¡±, reconoce Eshagh Jahanghiri, el primer vicepresidente del pa¨ªs persa.
Hadi Jamshidi, un empresario de Qom, se queja de que "el sistema bancario no facilita pr¨¦stamos a los emprendedores¡±. ¡°Los candidatos se comprometen a mejorar la econom¨ªa y a bajar la tasa de inter¨¦s [de los pr¨¦stamos bancarios] solo para ganar el voto de la gente y, en especial, de los trabajadores, pero una vez que llegan al Parlamento se olvidan de sus promesas¡±, lamenta.
Pese a la petici¨®n generalizada de los iran¨ªes por una mejora econ¨®mica, los candidatos conservadores que apoyaron en su d¨ªa al expresidente Mahmud Ahmadineyad, en cuyo mandato (entre 2005 y 2013) la inflaci¨®n aument¨® un 40%, prefieren aferrarse a la idea del "riesgo de infiltraciones de los seguidores de las ideas occidentales" en el futuro Parlamento para calificar de forma t¨¢cita a los candidatos reformistas de "posibles infieles a la revoluci¨®n¡±. Incluso la televisi¨®n estatal ha empezado a emitir una serie de an¨¢lisis que recuerdan las protestas poselectorales de 2009 y los revuelos de julio de 1999, en un intento de instrumentalizar estos hechos para desprestigiar a los reformistas y poner en duda su compromiso con los intereses nacionales.
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