Colonia dicta las primeras condenas por robo por los sucesos de Nochevieja
El juez castiga con 4 y 6 meses de libertad condicional a un marroqu¨ª y un tunecino
La justicia ha dictado este mi¨¦rcoles la primera condena por los sucesos ocurridos en Colonia la pasada Nochevieja, que sacudieron Alemania. Younes A., un marroqu¨ª de 23 a?os, fue condenado a una pena de seis meses de libertad condicional y al pago de una multa de 100 euros, tras ser encontrado culpable del robo de un m¨®vil a una joven alemana de 20 a?os, en la tr¨¢gica noche del 31 de diciembre. El tunecino Jalid B., de 22 a?os y acusado de haber robado una bolsa que conten¨ªa una c¨¢mara, fue condenado a cuatro meses de libertad condicional. Y su c¨®mplice, el marroqu¨ª Samir S., recibi¨® como castigo una notificaci¨®n del delito cometido, pero ninguna condena. Los tres hab¨ªan solicitado asilo en Alemania.
Por el momento, se han presentado 1.092 denuncias en Colonia, 471 de ellas por agresiones sexuales y el resto, por otros delitos, como robos. De los 78 investigados, 14 lo son por agresiones sexuales. Y hay 16 personas en prisi¨®n preventiva. El jefe de polic¨ªa de Colonia, J¨¹rgen Mathies, ha reconocido a la BBC que es posible que los responsables de la ola de agresiones que conmocion¨® al pa¨ªs nunca sean capturados.
Este primer juicio por los sucesos de Nochevieja en Colonia despert¨® un enorme inter¨¦s medi¨¢tico, aunque no hab¨ªa dudas de que el acusado ser¨ªa encontrado culpable porque hab¨ªa admitido el robo.
Durante la vista, que tuvo lugar en la Audiencia Territorial de Colonia, el juez Amand Scholl, despu¨¦s de escuchar la declaraci¨®n de la v¨ªctima, que compareci¨® como testigo, consider¨® que no hab¨ªa dudas sobre la culpabilidad de Younes A. y, aunque el delito era menor, no dud¨® en condenarlo a seis meses de libertad condicional.
¡°Durante la Nochevieja en Colonia pas¨® algo sin precedente en Alemania¡±, se?al¨® la fiscal, Monika Volkhausen, durante su alegato. ¡°La sensaci¨®n de seguridad de la mayor¨ªa fue da?ada de manera sistem¨¢tica, y el delito cometido por el acusado es una peque?a pieza de todo lo que sucedi¨®¡±, a?adi¨® al pedir una pena de seis meses de libertad condicional y una multa de 150 euros.
La joven record¨®, durante el breve juicio, que ella y una amiga hab¨ªan llegado a Colonia en la noche del 31 de diciembre para festejar la llegada del nuevo a?o. Cuando ambas llegaron a la estaci¨®n central de ferrocarriles observaron que hab¨ªa muchos hombres de origen extranjero. Despu¨¦s de abandonar el recinto, la joven quiso sacar algunas fotos con su m¨®vil pero un desconocido se lo arrebat¨® de las manos.
¡°No vi a la persona que me rob¨® el m¨®vil¡±, declar¨® la v¨ªctima. ¡°Pero una persona de aspecto extranjero me dijo: ?ese es el ladr¨®n!¡±. La joven corri¨®, en medio de la multitud, tras ¨¦l y logr¨® darle alcance porque el marroqu¨ª cay¨® al suelo a causa de una zancadilla. El ladr¨®n le devolvi¨® el m¨®vil a la joven y fue apresado por la polic¨ªa, que descubri¨® que ocultaba 0,1 gramos de anfetamina en su calcet¨ªn izquierdo.
Durante el juicio, el acusado admiti¨® el robo y pidi¨® disculpas a la joven. ¡°Lo siento mucho y pido perd¨®n¡±, dijo, ayudado por un traductor. Ella acept¨® las disculpas.
El abogado defensor, Florian Storz, calific¨® la condena como excesiva. "Uno tiene la impresi¨®n de que se quiere responsabilizar a mi cliente por todo lo que sucedi¨® en Nochevieja. Eso no es justo, porque ¨¦l era alguien insignificante¡±, dijo.
El juicio contra Younes A. no fue el ¨²nico que tuvo lugar este mi¨¦rcoles en Colonia. Casi inmediatamente despu¨¦s, comparecieron ante un juez Jalid B., un tunecino de 22 a?os, y Samir S., un marroqu¨ª de 18, acusados de haber robado una bolsa que conten¨ªa una c¨¢mara a un turista indio. Los dos, que fueron detenidos por la polic¨ªa en la noche del 31 de diciembre, confesaron haber cometido el robo y, al igual que el primer acusado del d¨ªa, se disculparon ante el juez.
Jalid B. fue condenado a cuatro meses de libertad condicional, mientras que su c¨®mplice, Samir S., solo recibi¨® como castigo una notificaci¨®n del delito cometido, pero ninguna condena.
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