¡°El apag¨®n informativo acelerar¨¢ el camino al autoritarismo de Erdogan¡±

El periodista Yavuz Baydar (Estambul, 1956) forma parte de ese generaci¨®n de periodistas e intelectuales liberales que, en su momento, crey¨® en las promesas reformistas del gobernante Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP, islamista) y que hoy es fuertemente perseguida. Est¨¢ acostumbrado a ello. Ya en 2004 fue destituido de Milliyet (centro izquierda) por revelar desde su columna como Defensor del Lector una noticia falsa que su peri¨®dico hab¨ªa publicado sobre los kurdos. En 2013 tambi¨¦n perdi¨® su trabajo en Sabah (centro derecha) por criticar la parcialidad del rotativo en la cobertura de las protestas de Gezi. Ahora, sus columnas han sido censuradas en Today¡¯s Zaman (islamista liberal) tras ser el grupo medi¨¢tico intervenido por orden de una Fiscal¨ªa controlada por el Gobierno. Y teme que lo volver¨¢n a echar. S¨®lo le queda la plataforma P24, donde, junto a otros destacados periodistas tambi¨¦n despedidos en los ¨²ltimos a?os, trata de mantener una de las pocas voces independientes que quedan en Turqu¨ªa.

Pregunta. En los ¨²ltimos a?os ha perdido ya varios trabajos¡­

Respuesta. No soy el ¨²nico, mucho otros compa?eros, unos 2.000 en los ¨²ltimos dos a?os, han sido despedidos por defender los valores m¨¢s b¨¢sicos de nuestra profesi¨®n. [El presidente Recep Tayyip ] Erdogan est¨¢ llevando a cabo una pol¨ªtica sistem¨¢tica de estrangular al periodismo independiente en Turqu¨ªa.

P. ?Por qu¨¦ ahora ha tomado medidas tan dr¨¢sticas como intervenir directamente los medios opositores?

R. Es simple. Una vez entras en el camino del autoritarismo, eso te lleva a tomar medidas cada vez m¨¢s duras. Nada es suficiente para ti. El principal objetivo es controlar las televisiones, porque es el medio a trav¨¦s el cual la mayor¨ªa de la poblaci¨®n recibe las noticias. Ahora mismo, toda la televisi¨®n est¨¢ bajo control del poder excepto cinco canales. Pero si tu meta es un r¨¦gimen en el que los medios est¨¦n a tu servicio, como en Azerbaiy¨¢n, en Asia Central o en Rusia, tienes que continuar por el camino de las confiscaciones y de las intervenciones. Es una v¨ªa inexorable.

P. Por tanto, ?el objetivo de Erdogan es convertirse en un mandatario absolutista?

R. Eso es algo en que la mayor¨ªa de los observadores de Turqu¨ªa est¨¢n de acuerdo. Al AKP le frustra ver que surgen informaciones independientes sobre lo que ocurre en Turqu¨ªa: la reducci¨®n de derechos y libertades, la corrupci¨®n, la agitaci¨®n en el sudeste kurdo. Por tanto, el apag¨®n informativo permitir¨¢ acelerar el camino hacia un gobierno autoritario con control completo sobre todo. Lo que est¨¢ ocurriendo en Turqu¨ªa es un claro ejemplo de autogolpe al estilo del que ocurri¨® en el Per¨² de Alberto Fujimori, aunque ¨¦l hizo lo que Erdogan por el momento no ha podido: eliminar el poder legislativo [El presidente turco busca convertir el actual r¨¦gimen parlamentario en un presidencialismo que le otorguen amplios poderes].

P. Entonces, ?ten¨ªan raz¨®n los intelectuales kemalistas cuando acusaban a Erdogan de tener una agenda oculta?

R. A finales de los noventa, todo el mundo se dio cuenta de que el sistema turco, estaba corrompido. La gran crisis econ¨®mica de 2000-2001 fue la prueba de que hab¨ªa que modificar muchas cosas. Entonces lleg¨® el AKP en 2002 con promesas de cambio, de repartir el poder entre las masas pobres y de recuperar la econom¨ªa. Algunos intelectuales kemalistas, nacionalistas y de izquierda dec¨ªan ¡°Esta gente miente, tienen una agenda oculta y nos llevar¨¢n al islamofascismo¡±. Otros, como yo, ¨¦ramos partidarios de no juzgar al AKP de antemano y ver qu¨¦ hac¨ªan. De hecho, en aquella ¨¦poca se hicieron muchas reformas. Los medios se sent¨ªan mucho m¨¢s libres que antes. Y se comenzaron a romper tab¨²es, por ejemplo se acabaron los mitos sobre los militares, que hab¨ªan controlado el pa¨ªs.

P. El AKP, que ahora parece una formaci¨®n monol¨ªtica, ten¨ªa entonces diversas facciones: islamistas, liberales, kurdistas, incluso socialdem¨®cratas.

¡°Erdogan est¨¢ tratando de cimentar su base de poder acerc¨¢ndose a ciertas fuerzas oscuras¡±

R. El AKP naci¨® como un partido muy moderno respecto a los est¨¢ndares turcos. Estaba liderado por un cuarteto formado por Erdogan, Abdullah G¨¹l, B¨¹lent Arin? y Abd¨¹llatif Sener. Se reun¨ªan cada semana para debatir durante horas sobre todo tipo de cuestiones, y esa atm¨®sfera de negociaci¨®n se extend¨ªa al gobierno. El problema fue que, en 2007, con la marcha de Sener del partido y la elecci¨®n de G¨¹l como presidente, Erdogan vio su camino despejado para hacerse con el control del AKP. A ra¨ªz de las continuas victorias electorales y de la buena marcha de la econom¨ªa, el ¨¦xito se le subi¨® a la cabeza. En el congreso celebrado tras las elecciones de 2011, Erdogan comenz¨® a liquidar las facciones que apoyaban a G¨¹l y a Arin?, rompiendo todos los mecanismos de control del partido. Y entr¨® una nueva generaci¨®n, eclipsada por el dinero, ambiciosa y corrupta. No qued¨® nada del islam y la moralidad que predicaban al inicio.

Para m¨ª, la confianza otorgada al AKP se termin¨® con una cuesti¨®n muy simb¨®lica, pero que me pareci¨® brutal. Ocurri¨® en 2011, cuando Erdogan orden¨® derribar una escultura construida como s¨ªmbolo del proceso de reconciliaci¨®n con Armenia porque le parec¨ªa ¡°monstruosa¡±. La falta de reacci¨®n dentro del partido fue para m¨ª un s¨ªmbolo de que estaba naciendo una nueva era.

P. ?Por qu¨¦ Erdogan modific¨® una pol¨ªtica que hasta entonces le hab¨ªa ido bien?

R. Erdogan ten¨ªa dos opciones, o continuar por la senda reformista y compartir el poder o acumularlo. En el contexto de Turqu¨ªa, compartir el poder significaba apoyar la diversidad pol¨ªtica, dar poder a la sociedad civil, reconocer derechos colectivos, por ejemplos de los kurdos o de los alev¨ªes [chi¨ªes heterodoxos]. Hay que ser un mandatario muy sofisticado y sabio para hacer eso y no erosionar tu base de votantes, y esas no son precisamente cualidades de Erdogan. ?l se apoya en el culto a la personalidad, que es algo inherente a la sociedad turca. A los turcos les encanta adorar a un l¨ªder: lo ves en Atat¨¹rk, en [el l¨ªder del grupo armado kurdo PKK, Abdullah] ?calan, en [el cl¨¦rigo] Fethullah G¨¹len. Muchos valores democr¨¢ticos no han cuajado, debido al sistema educativo, que no ense?a a pensar de manera anal¨ªtica, y a unas elites turcas, tanto burocr¨¢ticas como empresariales, que no tienen un verdadero sentido de la democracia.

Erdogan tom¨® el camino f¨¢cil. En lugar de buscar consenso para aprobar una Constituci¨®n m¨¢s democr¨¢tica opt¨® por aprovecharse de diversos sectores e instrumentalizarlos a su favor. Lo hizo con los liberales, con los seguidores de Fethullah G¨¹len , con los kurdos. Cuando abusas de un aliado, al final tienes que descartarlo e ir a por el siguiente. Ahora a quienes est¨¢ utilizando es a los ultranacionalistas del partido MHP y a los militares.

P. Unos militares contra los que hasta hace no mucho dirigi¨® una intensa campa?a judicial¡­

R. El a?o pasado vimos una serie de absoluciones en los juicios sobre asesinatos extrajudiciales [durante las d¨¦cadas de 1980 y 1990]. Erdogan est¨¢ tratando de cimentar su base de poder acerc¨¢ndose a ciertas fuerzas oscuras a las que antes se opon¨ªa. Por ejemplo, gente que particip¨® en la guerra sucia [contra el PKK], grupos de corte fascista, antiguos l¨ªderes mafiosos, gente con sangre en sus manos. Por ejemplo, ha nombrado comandante de Diyarbakir [la ciudad kurda m¨¢s importante] a un general que fue procesado por el asesinato de 13 ¨® 14 kurdos. A los militares no les gusta el aventurerismo de Erdogan, porque est¨¢ da?ando las relaciones con Occidente y aislando a Turqu¨ªa, pero a ambos les une ahora mismo la kurdofobia.

P. Hace s¨®lo cinco a?os, al inicio de la Primavera ?rabe, Turqu¨ªa era vista por muchos como un modelo para los pa¨ªses musulmanes. ?Qu¨¦ ha ocurrido?

¡°La UE no se da cuenta de que el pa¨ªs se est¨¢ convirtiendo en un infierno para los que quieren expresarse¡±

R. Ha habido una pol¨ªtica exterior err¨¢tica, de la que es culpable Erdogan. Comenz¨® con Armenia. Ten¨ªamos un proceso de normalizaci¨®n de relaciones cuidadosamente tejido por [el entonces presidente] Abdullah G¨¹l y [el entonces ministro de Exteriores y ahora primer ministro] Ahmet Davutoglu, y Erdogan intervino a ¨²ltima hora para carg¨¢rselo. La Primavera ?rabe hizo adem¨¢s aflorar el sentimiento neo-otomano y Turqu¨ªa busc¨® el apoyo de los Hermanos Musulmanes para forjar una alianza sun¨ª de la que Erdogan se ve¨ªa como l¨ªder. Pero este proyecto se derrumb¨® con la ca¨ªda de Mohamed Morsi en Egipto y con la devastaci¨®n de la guerra en Siria. Erdogan ha continuado con sus acciones err¨¢ticas en pol¨ªtica exterior, desafiando todas las convenciones diplom¨¢ticas, enemist¨¢ndose con todos los pa¨ªses del entorno y provocando fricciones con aliados hist¨®ricos.

P. La Uni¨®n Europea era tradicionalmente vista por los intelectuales de Turqu¨ªa como un garante de la democratizaci¨®n. ?Ha cambiado esa imagen?

R. Hace poco estuve en la regi¨®n kurda y all¨ª han perdido completamente su fe en la UE. Hablamos de un sector de la poblaci¨®n en el que antes el apoyo a la adhesi¨®n de Turqu¨ªa a la UE era del 90 %. El sistema est¨¢ metamorfoseando y me temo que dentro de un a?o no quedar¨¢n ni medios de comunicaci¨®n ni acad¨¦micos ni tribunales independientes. Tenemos a 1.800 periodistas, a 1.100 acad¨¦micos y a cientos de personas m¨¢s investigados por informar, por firmar manifiestos pacifistas o por supuestamente insultar al presidente, y podr¨ªan ir a la c¨¢rcel. La UE no se da cuenta de que Turqu¨ªa se est¨¢ convirtiendo en un infierno para esa gente que simplemente quiere expresar libremente lo que piensa. Esto puede llevar a una oleada de turcos pidiendo asilo en Europa.