No tir¨¦is al beb¨¦ con la placenta
El secesionismo har¨ªa m¨¢s pobre a Reino Unido pues su comercio depende de la UE
Empez¨® bien Obama recordando a los brit¨¢nicos que la Uni¨®n Europea ¡°no reduce¡± su influencia, ¡°sino que la expande¡±.
Despojada de su Imperio; rodeada de una Commonwealth simb¨®lica; y en una ¡°special relationship¡± con EE UU m¨¢s pol¨ªtico-cultural que tangible ¡ªla econom¨ªa brit¨¢nica es un sexto de la norteamericana¡ª, ?por qu¨¦ galaxia vagar¨ªa Albi¨®n sin el ancla de Europa?
Aunque el argumento para convencer a la mayor¨ªa no cosmopolita ¡ªy de paso rehuir el charloteo sobre una soberan¨ªa imposible¡ª, m¨¢s que la influencia ser¨¢ la prosperidad.
¡°Si abandonase la UE, Reino Unido ser¨ªa permanentemente m¨¢s pobre¡±, concluye el Tesoro en el informe que acaba de devolver el foco de la campa?a a las cosas de comer desde las enso?aciones (HM Treasury analysis: the long-term impact of EU membership and the alternatives, www.gov.uk, abril 2016).
El c¨¢lculo del Tesoro cuantifica el perjuicio de las alternativas al mercado interior: 1) inscribirse como Noruega en el Espacio Econ¨®mico Europeo (EEE, el desecho de tienta de la EFTA); compartir¨ªa mercado con los 27, pero no la cosoberan¨ªa para redactar sus normas; 2) un acuerdo bilateral como los de Turqu¨ªa o Canad¨¢ con la UE, m¨¢s laxos; y 3) quedarse como mero miembro de la OMC, tipo Rusia.
Y concluye que la pauperizaci¨®n general y permanente del Reino oscilar¨ªa entre el 3,4% de su PIB y el 9,5% (y hasta 5.400 euros anuales por familia): impacto este ¨²ltimo a¨²n peor que el que la Gran Recesi¨®n tuvo para Espa?a, aunque ninguna cifra sea art¨ªculo de fe.
En cualquier caso, ¡°deber¨ªa negociar nuevos acuerdos¡± (The economic consequences of leaving the EU, Centre for European Reform, www. cer.org.uk, 2014). Y que no fuesen atrabiliarios como el que propone ?con Bosnia, Serbia, Albania y Ucrania! el ministro de Justicia, Michael Gove.
Eso tampoco ser¨ªa inmediato. Con el abandono le decaer¨ªan los 70 acuerdos comerciales de que disfruta como parte de la UE, negociados y firmados por la Comisi¨®n. Y el plazo para firmar uno nuevo oscila entre siete a?os (UE), cinco (EE UU) y cuatro (Canad¨¢).
?Por qu¨¦ la secesi¨®n ser¨ªa tan nefasta para su prosperidad, am¨¦n de incentivar el separatismo en Escocia e Irlanda del Norte? Porque la econom¨ªa brit¨¢nica, siendo una de las grandes de la UE, solo supone su sexta parte (17%). No es soberana, sino muy dependiente de Europa y su mercado: dirige ah¨ª el 44,6% de sus exportaciones, contra el 10% de sus socios a la inversa; exporta el 13% de su PIB, contra el 3% inverso de los otros 27; y capta en la Uni¨®n el 46% de las inversiones directas en su suelo.
Londres fund¨® en 1959 la EFTA, un ¨¢rea de mero libre comercio, su r¨¦plica al proyecto comunitario, m¨¢s articulado. Fracas¨® en aqu¨¦lla y se refugi¨® en ¨¦ste, buscando comercio. En 1995, con la ampliaci¨®n n¨®rdica de la UE se archiv¨® la EFTA. Si rompe ?volver¨¢ a ese fantasma residual? Tirar¨¢ a la basura lo que siempre consider¨® su beb¨¦, el mercado (com¨²n, ¨²nico, interior), junto a lo que ve como placenta, el resto de la Uni¨®n. Pues vaya negocio.
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