Obama, sobre los refugiados: ¡°Merkel est¨¢ en el lado correcto de la historia¡±
El presidente de Estados Unidos alaba el papel de la canciller alemana en la crisis migratoria
Silencio de la canciller ante los ataques de Trump
La canciller Angela Merkel pudo corroborar el domingo las palabras del presidente Barack Obama a los pocos minutos de que este las pronunciara. El l¨ªder estadounidense alab¨® el sentido del humor de la alemana, aunque dijo que ella no sol¨ªa mostrarlo en las ruedas de prensa. ¡°Quiz¨¢s por eso ha tenido tanto ¨¦xito en pol¨ªtica, por tener cuidado con lo que dice¡±, a?adi¨®.
A los pocos minutos, un periodista pregunt¨® a Merkel su opini¨®n sobre el candidato republicano Donald Trump, que ha dicho que la pol¨ªtica de refugiados de la canciller era ¡°una locura¡±. ¡°Tengo dos cosas que decir. Estoy muy ocupada con mis obligaciones actuales. Y observo la campa?a estadounidense con mucho inter¨¦s¡±, se limit¨® a responder.
A Obama le preguntaron si envidiaba a Merkel por no tener una limitaci¨®n de mandatos como en EE UU. ¡°No la envidio. Amo mi trabajo y me parece un privilegio. Pero creo que fue muy sabio establecer un l¨ªmite. Siempre es bueno que entre sangre nueva¡±, respondi¨®. A su lado sonre¨ªa Merkel, que lleva 11 a?os en el cargo. Y que probablemente en 2017 se volver¨¢ a presentar.
Barack Obama aprovech¨® el que probablemente sea su ¨²ltimo viaje a Europa como presidente de EE UU para dar un fuerte respaldo pol¨ªtico a la canciller Angela Merkel. Obama lanz¨® el domingo en Hannover diversos halagos a la mujer con la que ha tenido sonoras diferencias en temas como la crisis del euro. El l¨ªder de un pa¨ªs que solo ha acogido a 10.000 refugiados sirios destac¨® la ¡°valiente¡± gesti¨®n de esta crisis por Alemania, que ya ha recibido un mill¨®n de migrantes, y concluy¨® su intervenci¨®n con una frase redonda: ¡°Merkel est¨¢ en el lado correcto de la historia¡±. Ella, a su lado, sonre¨ªa satisfecha.
La visita a Hannover vino precedida de una intensa campa?a de relaciones p¨²blicas en favor del Gobierno alem¨¢n a manos de la Administraci¨®n estadounidense. En la revista The Atlantic, dec¨ªa a trav¨¦s de su entrevistador que Merkel es ¡°una de las pocas pol¨ªticas extranjeras que respeta¡±. Obama regal¨® el s¨¢bado al Bild, el diario m¨¢s vendido de Alemania, titulares como: ¡°considero a Angela una de mis socias m¨¢s cercanas y tambi¨¦n una amiga¡±.
En el ¨²ltimo tramo de su mandato, Obama trata de dar ox¨ªgeno a una canciller que pasa por horas bajas: su partido encaj¨® una seria derrota en las elecciones regionales del mes pasado ante el auge del partido populista Alternativa para Alemania; y el pasado viernes se vio obligada a admitir que hab¨ªa cometido un error en el caso B?hmermann, el humorista que ser¨¢ juzgado en Alemania por su ¡°poema ofensivo¡± contra el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan.
Lo que empez¨® como una an¨¦cdota se convirti¨® en un serio problema para Merkel, porque ciment¨® la idea de que estaba dispuesta a claudicar un principio fundamental como la libertad de expresi¨®n con tal de complacer a Erdogan, el l¨ªder del que depende el ¨¦xito de su plan para reducir el flujo migratorio. Por ello, Merkel hizo algo totalmente inusual y admiti¨® haber cometido un error. No por permitir que act¨²e la justicia, sino por haber criticado d¨ªas antes el poema de B?hmermann, al que tild¨® de ¡°voluntariamente ofensivo¡±.
Pero en el palacio de Hannover en el que los dos l¨ªderes se reunieron nada de esto parec¨ªa importar. Le preguntaran o no por ella, Obama lanzaba alabanzas constantes. Dijo que la canciller supo impulsar medidas ¡°dif¨ªciles¡± y mostrar ¡°preocupaci¨®n¡±, no solo ¡°humanitaria¡±, sino tambi¨¦n ¡°pr¨¢ctica¡±, y mantener las fronteras abiertas. Quiz¨¢s, reflexion¨® el presidente de EE?UU, porque ella misma vivi¨® ¡°tras un muro¡±, en referencia al de Berl¨ªn, ya que Merkel procede de la antigua RDA. ¡°Estoy muy orgulloso de eso¡±, concluy¨®.
La de Hannover, la quinta visita de Obama a Alemania, muestra la sinton¨ªa entre ambos l¨ªderes. Frente a un Reino Unido que coquetea con la salida de la UE y una Francia cada vez m¨¢s cr¨ªtica con el tratado de libre comercio, Merkel aparece como la mejor interlocutora de EE UU. ¡°Para Obama qued¨® claro, especialmente tras la crisis de Ucrania, que ella era la persona con la que ten¨ªa que hablar cuando quer¨ªa algo de Europa. Esto se debe al peso espec¨ªfico de Alemania y a la d¨¦cada que lleva al frente de la Canciller¨ªa. Pero adem¨¢s los dos comparten una forma parecida de abordar los problemas. Son anal¨ªticos y pragm¨¢ticos¡±, se?ala Hans Kundnani, analista en Berl¨ªn del German Marshall Fund de EE UU. Obama y Merkel se re¨²nen el lunes en Hannover con David Cameron, Fran?ois Hollande y Matteo Renzi.
Pese a la buena sinton¨ªa personal, las relaciones germano-estadounidenses se han visto empa?adas durante la Administraci¨®n Obama por un buen n¨²mero de asuntos. Fuentes berlinesas restan importancia al esc¨¢ndalo de las escuchas masivas del NSA, que afectaron al propio m¨®vil de la canciller. Pese a la rotundidad de su condena ¡ª¡°espiar entre amigos es inaceptable¡±, dijo en el punto ¨¢lgido de las revelaciones; frase que se le volver¨ªa en contra al conocerse pr¨¢cticas parecidas de los servicios secretos alemanes¡ª, Merkel siempre ha estado convencida de que la colaboraci¨®n con los servicios secretos de EE UU era imprescindible.
M¨¢s importantes fueron las desavenencias entre Berl¨ªn y Washington por la gesti¨®n alemana de la crisis del euro. La propuesta de una salida de Grecia de la uni¨®n monetaria marc¨® uno de los momentos m¨¢s calientes. Desde Berl¨ªn tambi¨¦n se han o¨ªdo quejas de que Washington no se implicaba lo suficiente en la resoluci¨®n de la guerra siria. Obama pidi¨® a los implicados que vuelvan a la mesa negociadora en Siria. ¡°Habl¨¦ con el presidente Vlad¨ªmir Putin para reinstaurar el cese de hostilidades¡±, dijo.
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