Vendr¨¢n m¨¢s referendos
La manipulaci¨®n de las emociones por el nacional populismo es tendencia global
Something is happening here but you don't know what it is, do you, Mr. Jones?
('Ballad of A Thin Man', Bob Dylan)
M¨¢s de 17 millones de brit¨¢nicos han decidido deso¨ªr las advertencias de todas las instituciones econ¨®micas y pol¨ªticas mundiales y elegir la incertidumbre del Brexit antes que seguir obedeciendo a un establishment que ni controlan, ni respetan ni sienten que les representa. La ira, la frustraci¨®n y la nostalgia por un pasado imaginado han podido m¨¢s que la raz¨®n, las emociones m¨¢s que la pol¨ªtica, como prueba el hecho de que ocho horas despu¨¦s de conocerse el resultado se triplicasen en Reino Unido las b¨²squedas en Google sobre qu¨¦ es la Uni¨®n Europea.
Es tendencia global, de Donald Trump a Podemos, de Marine Le Pen a la crisis brasile?a. La manipulaci¨®n de las emociones por el nacional populismo, venga por la extrema derecha como en Estados Unidos y el norte de Europa o por la nueva izquierda como en los pa¨ªses del sur, tienen un veh¨ªculo natural en la era digital cuando los due?os de las redes sociales priman las emociones instant¨¢neas sobre los hechos y cualquier otro criterio. Y la democracia horizontal de Internet permite que la mentira, la media verdad, la boutade demag¨®gica se propague a una velocidad casi imposible de contrarrestar, dejando que el dato objetivo, la jerarqu¨ªa que da el conocimiento, la opini¨®n informada, la moderaci¨®n en la toma de decisiones parezcan cosas del pasado.
A los l¨ªderes populistas les basta enviar un s¨®lo mensaje a sus votantes: Yo soy vosotros, yo digo lo que los dem¨¢s no se atreven a decir
Es un fen¨®meno que no surge de la nada. El fracaso del centro derecha y la social democracia europea en dar respuesta a la crisis econ¨®mica, la corrupci¨®n de las ¨¦lites, la crisis migratoria, la amenaza terrorista y hasta los excesos de la correcci¨®n pol¨ªtica han sido factores decisivos en la conformaci¨®n de la nueva opini¨®n p¨²blica global. Los l¨ªderes populistas lo saben y les basta enviar un s¨®lo mensaje a sus votantes: Yo soy vosotros, yo digo lo que los dem¨¢s no se atreven a decir, odio tanto a los inmigrantes mexicanos o musulmanes como vosotros, veo y me gusta Juego de Tronos tanto como vosotros¡ e insistir, como han hecho siempre a lo largo de la historia, en erigirse en los verdaderos y ¨²nicos int¨¦rpretes del sentir del pueblo.
Cuando las emociones sustituyen a la pol¨ªtica, cuando consensuar una agenda es imposible o peor a¨²n se considera que ceder es s¨®lo la opci¨®n de los d¨¦biles, la consulta popular se convierte en el recurso perfecto. Vendr¨¢n m¨¢s referendos, como ya ha pedido Le Pen en Francia, con toda su secuela de disfunciones y distorsiones inmanejables -hace a?os en California se vot¨® a favor de aumentar las penas por delitos menores y cuando las c¨¢rceles se llenaron se vot¨® en otro refer¨¦ndum en contra de construir m¨¢s prisiones-, su ego¨ªsmo y sus v¨ªctimas de la nueva "mayor¨ªa".
La era digital esta acabando con todas las certezas. El viejo establishment parece herido de muerte y a¨²n no ha surgido uno nuevo. Veremos si lo hace sin guerra -el insensato del l¨ªder de UKIP, Nigel Farage, ha llegado a celebrar la nueva "independencia" del Reino Unido "sin disparar un tiro" tan s¨®lo diez d¨ªas despu¨¦s del asesinato de la diputada Jo Cox-. Mientras se produce reflexionemos sobre los escombros.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.