La polic¨ªa reprime duramente la marcha del orgullo gay en Estambul
Los agentes detienen a dos pol¨ªticos alemanes y a m¨¢s de una veintena de activistas LGTBI locales
¡°?D¨®nde est¨¢s, mi amor?¡±, se convirti¨® este domingo en grito de batalla y de libertad en una Turqu¨ªa cada vez m¨¢s gris, y donde, en Estambul, la polic¨ªa se emple¨® con violencia y sa?a para impedir que la gente enarbolase la bandera arco¨ªris.
La plaza de Taksim, la avenida Istiklal y las calles aleda?as del centro de Estambul amanecieron repletas de vallas y guardadas por cientos de agentes de polic¨ªa, autobuses blindados y camiones de agua a presi¨®n para impedir la marcha del orgullo LGTBI (Lesbianas, gays, transexuales, bisexuales e intersexo), que hab¨ªa sido prohibida por orden del gobernador provincial.
La semana anterior, la marcha del Orgullo Trans ya fue prohibida despu¨¦s de que se recibiesen amenazas de varios grupos islamistas y ultranacionalistas que advert¨ªan: ¡°Si no deten¨¦is la marcha de los maricas, lo haremos nosotros¡±. Adem¨¢s, durante la noche del s¨¢bado al domingo, varios locales de ambiente fueron registrados por la polic¨ªa. ¡°Vinieron los agentes, nos preguntaron por la licencia y registraron el establecimiento. La verdadera raz¨®n es que tenemos los colores del arco¨ªris en nuestras mesas y por la m¨²sica que tenemos¡±, explic¨® el gerente de un caf¨¦ con habitual clientela gay.
Debido a la prohibici¨®n, los organizadores desconvocaron la marcha LGTBI y, en su lugar, llamaron a actos espont¨¢neos: en diversos lugares de Estambul, incluido el estrecho del B¨®sforo, activistas y manifestantes enarbolaron la ense?a multicolor para reivindicar un trato justo y la posibilidad de celebrar su d¨ªa con normalidad, de la manera en que se hac¨ªa en Estambul hasta el a?o pasado, cuando el Gobierno islamista decidi¨® prohibirla por coincidir con el mes sagrado de Ramad¨¢n, como tambi¨¦n ocurre en esta ocasi¨®n. En estos actos, durante la ma?ana, al menos cuatro personas fueron detenidas por los agentes. Tambi¨¦n el diputado alem¨¢n Volker Beck y la eurodiputada Terry Reintke, ambos de Los Verdes, fueron brevemente retenidos junto a dos colaboradores de la segunda, aunque posteriormente se les puso en libertad.
S¨®lo unos pocos cientos de valientes se atrevieron a llevar al ¨¢rea de Taksim sus reivindicaciones. Al inicio de la Avenida Istiklal, los agentes de polic¨ªa hac¨ªan controles aleatorios a cualquiera que ellos considerasen con pinta de homosexual o activista LGTBI para impedir su acceso. Y escuadrones de polic¨ªas antidisturbios fuertemente armados patrullaban las calles traseras. A¨²n as¨ª, muchos activistas lograron introducirse y, resguardados en los bares o desde las ventanas de diversos edificios, se lanzaban consignas.
¡°?D¨®nde est¨¢s, mi amor?¡±, preguntaba uno desde la terraza de un bar. ¡°Aqu¨ª estoy, amor¡±, respond¨ªa otro grupo desde otro bar. Y tras ello se elevaba un coro de c¨¢nticos: ¡°No te escondas, no lo niegues: los homosexuales existen¡±. Esto enervaba a los agentes que acud¨ªan a la carrera y disparando botes de gas lacrim¨®geno a diestro y siniestro. ¡°Simplemente est¨¢bamos sentados en la terraza de un caf¨¦, ni siquiera hab¨ªamos gritado nada, y ha llegado la polic¨ªa lanzando gases¡±, explic¨® Ayse, una joven con los colores del arco¨ªris pintada en un moflete que no pod¨ªa parar de toser a causa de los qu¨ªmicos: ¡°S¨®lo queremos que nos dejen manifestarnos pac¨ªficamente como antes. Pero este pa¨ªs, con (el presidente Recep Tayyip) Erdogan, se ha convertido en una dictadura y continuamente se lanzan mensajes hom¨®fobos¡±.
En el local de una asociaci¨®n que hab¨ªa colgado en su fachada una enorme bandera arco¨ªris, los antidisturbios fueron recibidos con una lluvia de p¨¦talos y confeti, a lo que ¨¦stos respondieron con gases y descolgando la ense?a multicolor. En la calle Mis, llena de bares y repleta de gente ¨Ctanto miembros de la comunidad LGTBI como j¨®venes e incluso familias con ni?os que pretend¨ªan pasar un domingo de asueto- la polic¨ªa exigi¨® evacuar los establecimientos ante los c¨¢nticos de algunos. ¡°?Grita!?Grita m¨¢s si te atreves, maric¨®n!¡±, le grit¨® un agente a un joven gay.
A todo aquel que intentaba cuestionar las ¨®rdenes de la polic¨ªa se lo llevaban detenido, como ocurri¨® a una joven de unos 20 a?os que simplemente pregunt¨® a un agente de paisano por qu¨¦ deb¨ªa abandonar un bar. Sus amigas, de la misma edad, lloraban desconsoladas: ¡°S¨®lo queremos que nos dejen en paz¡±.
Seg¨²n la asociaci¨®n Kaos GL, el n¨²mero de detenidos por la tarde en Estambul superaba los 20. En apenas cinco minutos, ante los ojos de este periodista los agentes se llevaron a cuatro personas, incluido un fot¨®grafo estadounidense que no portaba tarjeta de prensa. Cuando un abogado trat¨® de impedir la detenci¨®n, uno de los agentes, de paisano, se le volvi¨® y le espet¨®: ¡°?Por qu¨¦ te metes? ?Qu¨¦ te importan a ti los americanos? Es un provocador, ha venido desde EEUU a provocar. ?Vamos nosotros a EEUU a manifestarnos?¡±. A otro periodista, el italiano Alberto Tetta, un agente le amenaz¨® con dispararle si daba ¡°informaciones negativas¡± sobre Turqu¨ªa.
Son s¨®lo un par de muestras de la ideolog¨ªa islamonacionalista cada d¨ªa m¨¢s extendida en Turqu¨ªa y cuyos defensores, incluido el presidente Erdogan, consideran que los ¡°enemigos externos¡± ¨Cesp¨ªas, pa¨ªses enemigos, prensa extranjera- y los ¡°enemigos internos¡± ¨Coposici¨®n, partidos izquierdistas, nacionalistas kurdos, grupos armados de diverso pelaje, periodistas cr¨ªticos, intelectuales y activistas LGTBI- conspiran conjuntamente para hundir el pa¨ªs euroasi¨¢tico.
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