Cuatro a?os de negociaci¨®n repletos de obst¨¢culos
Los tropiezos en el camino hacia la paz entre el Gobierno colombiano y las FARC hac¨ªan a muchos dudar. Hoy el acuerdo es una realidad.
El camino no fue f¨¢cil. Los intentos fallidos del pasado por cerrar un di¨¢logo con las FARC hac¨ªan que muchos dudaran. El recuerdo de una silla vac¨ªa que dej¨® el desaparecido jefe de la guerrilla Manuel Marulanda junto al entonces presidente de Colombia Andr¨¦s Pastrana en un intento por lograr un acuerdo de paz, no dejaba de generar dudas. Sin embargo, esta vez, a pesar de los tropiezos que hubo desde el principio, ambas partes han logrado sortear las dificultades. Lo que parec¨ªa imposible, hoy es una realidad.
La muerte de uno de los l¨ªderes m¨¢s importantes de la guerrilla, alias Alfonso Cano, el 4 de noviembre del a?o 2011, cuando apenas conversaban de forma preliminar el Gobierno y las FARC, fue el primer tropiezo con el que se enfrent¨® este proceso. ¡°Es el golpe m¨¢s contundente que se les ha dado a las FARC en la historia¡±, asegur¨® el presidente Juan Manuel Santos, al dar la noticia de que Cano hab¨ªa ca¨ªdo en manos de las fuerzas militares. Las palabras de Santos llegaban cuando el pa¨ªs todav¨ªa no sab¨ªa de los acercamientos que se estaban dando para el inicio de los di¨¢logos y cuando en el interior de la guerrilla hab¨ªa dudas sobre avanzar o no con el proceso tras la muerte de Cano. M¨¢s adelante, su sucesor, alias Timochenko, revelar¨ªa que en ese momento de crisis le pidi¨® al entonces presidente de Venezuela, Hugo Ch¨¢vez, mediar para que las FARC se mantuvieran dispuestas a negociar. Y lo hicieron.
Cuando se iniciaron las conversaciones formales, ambas partes insistieron en que se negociar¨ªa en medio del conflicto, es decir, sin que se frenase la guerra, pese a los intentos de la guerrilla por lograr un cese bilateral del fuego, que no se alcanz¨® hasta junio de este a?o. Este pacto acarre¨® uno de los episodios m¨¢s delicados. Dos a?os despu¨¦s de iniciarse la fase p¨²blica de los di¨¢logos, el secuestro por parte de la guerrilla del general Rub¨¦n Dar¨ªo Alzate, el 17 de noviembre de 2014, puso a prueba las conversaciones. La situaci¨®n oblig¨® a que el presidente Santos ordenara a los delegados del Gobierno no viajar a La Habana hasta que no fuera liberado Alzate. Para muchos, este episodio sirvi¨® para oxigenar y acelerar el proceso, que hasta entonces se hab¨ªa desarrollado sin mayores sobresaltos y de forma muy pausada.
La muerte de 11 militares en abril de 2015 desat¨® otra crisis importante. Santos orden¨® levantar la orden de suspensi¨®n de los bombardeos contra los campamentos de las FARC y un mes despu¨¦s, en un ataque en Guapi (Cauca), murieron al menos 25 guerrilleros, entre ellos Jairo Mart¨ªnez, quien fue negociador en La Habana. Pese a que las partes insistieron en que las negociaciones segu¨ªan adelante, las FARC incrementaron sus ataques y realizaron una serie de atentados contra infraestructura. Uno de ellos, el ataque contra un oleoducto en Tumaco, gener¨® el derrame de 400.000 galones de crudo. El hecho fue catalogado como el peor da?o ecol¨®gico de la d¨¦cada. ¡°No nos orgullecemos del resultado de las acciones contra las infraestructuras petroleras como tampoco nos orgullecemos de las muertes de soldados del ej¨¦rcito cuando estas se producen¡±, se?alaron las FARC en un comunicado. Aunque Santos tild¨® de c¨ªnicos a los miembros de esta guerrilla, los di¨¢logos siguieron su curso.
Hace apenas unos meses, en febrero pasado, nuevamente un tira y afloja entre el Gobierno y las FARC volvi¨® a sentirse. Iv¨¢n M¨¢rquez, Jes¨²s Santrich y Joaqu¨ªn G¨®mez, de la guerrillera, realizaron una jornada pedag¨®gica en la comunidad del Conejo (La Guajira) sin autorizaci¨®n del Gobierno.
Tras la publicaci¨®n de fotos en las que se ve¨ªa a los guerrilleros con la poblaci¨®n civil, el Gobierno reiter¨® que no permitir¨¢ que las FARC hicieran pol¨ªticas con armas. Nuevamente un obst¨¢culo estaba superado.
Hubo otros impedimentos relacionados con las conversaciones, puntos de los acuerdos que se fueron estancando. En unos y otros casos jugaron un papel determinante los pa¨ªses garantes, Noruega y Cuba, as¨ª como los acompa?antes, caso de Venezuela sobre todo en el inicio de las negociaciones. Adem¨¢s, la presencia para desatascar algunos acuerdos de Enrique Santos, hermano del presidente y una de las personas que empez¨® las conversaciones preliminares con las FARC, fue determinante.
¡°Ante la crisis estaba ah¨ª. Solucionando, buscando una forma de dar aire a los di¨¢logos, de no permitir que se echaran a perder¡±, asegura el analista Ariel ?vila. Adem¨¢s, seg¨²n ¨¦l, la voluntad real de la guerrilla de, por primera vez, aceptar que nunca iban a tomar el poder por la v¨ªa armada, sumado al ambiente de apertura liberal en la pol¨ªtica colombiana permiti¨® que esta vez, los di¨¢logos con las FARC llegaran a su fin. Los acuerdos est¨¢n cerrados.
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