Una cumbre para el futuro

Los d¨ªas 28 y 29 de octubre se celebrar¨¢ en Cartagena de Indias, Colombia, la XXV Cumbre Iberoamericana de jefes de Estado y de Gobierno. Hay por lo menos dos razones importantes para defender la continuidad de las cumbres iberoamericanas. En primer lugar, se trata de un foro multilateral al m¨¢s alto nivel, que da a los l¨ªderes de la comunidad iberoamericana la oportunidad de conocerse y discutir cara a cara sobre los temas que preocupan a todos. Ese contacto personal ayuda a aclarar discrepancias, poner en com¨²n ideas y establecer v¨ªnculos de confianza. En pol¨ªtica, la confianza es esencial: son muchos los ejemplos de problemas complejos resueltos o agravados por su presencia o ausencia.

Pero adem¨¢s, las cumbres iberoamericanas son un foro estable. Hace s¨®lo unos d¨ªas, con motivo de la Reuni¨®n Iberoamericana de Ministros de Ciencia, Tecnolog¨ªa y Educaci¨®n, la secretaria general iberoamericana Rebeca Grynspan destacaba que no hay muchos ejemplos de di¨¢logo ininterrumpido a nivel presidencial durante 25 a?os. As¨ª es: la comunidad iberoamericana lleva un cuarto de siglo con el canal de comunicaci¨®n abierto al m¨¢s alto nivel, y ello pese a que las crisis econ¨®micas, los avatares pol¨ªticos, los desencuentros ideol¨®gicos y los cambios radicales que la globalizaci¨®n ha tra¨ªdo al mundo entero no siempre han puesto f¨¢ciles las cosas. Por compleja que haya resultado en ocasiones esa vecindad, mantener abierto el canal durante tanto tiempo ha permitido suavizar muchos desencuentros, y eso tiene un gran m¨¦rito.

La segunda raz¨®n por la que defiendo la celebraci¨®n de estas cumbres tiene que ver con su contenido, que va m¨¢s all¨¢ de su declaraci¨®n final. El hecho mismo de reunirse impone la necesidad de escoger un tema que se convierte en leitmotiv de la cumbre, y sobre el cual se reflexiona durante el encuentro. De este modo, la proximidad de cada cumbre obliga a realizar un an¨¢lisis de las realidades presentes y a identificar problemas, retos y oportunidades de cara al futuro. En ausencia de una ocasi¨®n concreta que apremie a llevar a cabo ese ejercicio anal¨ªtico, probablemente se impondr¨ªa el business as usual de las necesidades nacionales inmediatas de cada pa¨ªs y perder¨ªamos la oportunidad de hacernos colectivamente las grandes preguntas, esas para las cuales es precisa una cierta cantidad de visi¨®n hist¨®rica, y que al final alumbran los proyectos relevantes a medio y largo plazo.

La XXV Cumbre Iberoamericana ha elegido un lema ¡ªJuventud, emprendimiento y educaci¨®n¡ª que responde a ese principio de visi¨®n hist¨®rica, al resumir en tres palabras varias cuestiones pendientes del mundo de hoy y sus posibles respuestas de cara al d¨ªa de ma?ana. Algunos de los problemas m¨¢s acuciantes tanto en Europa como en Am¨¦rica Latina son el envejecimiento, el impacto social y laboral de la crisis econ¨®mica, y los problemas derivados de la desigualdad y la falta de cohesi¨®n social, en Europa debidos al retroceso del Estado de Bienestar, y en Am¨¦rica Latina a que el Estado social no ha llegado a echar ra¨ªces ni siquiera en los pa¨ªses con rentas medias. ?stos no son nuestros ¨²nicos retos, pero tienen car¨¢cter sist¨¦mico, efectos a largo plazo y soluciones que no son inmediatas. Empezar a ponerles remedio requiere de iniciativas estrat¨¦gicas que seleccionen correctamente el colectivo y las ¨¢reas de actuaci¨®n en las que centrarse.

Ah¨ª est¨¢ la importancia del lema escogido para la cumbre de este a?o. Los j¨®venes son el colectivo estrat¨¦gico por excelencia. Y sin embargo, el impacto de la crisis econ¨®mica est¨¢ siendo especialmente duro para ellos, en forma de paro, bajos salarios y falta de oportunidades. Esta situaci¨®n frustra sus perspectivas vitales: ante la incertidumbre laboral y la falta de independencia econ¨®mica, no pueden tomar decisiones que impliquen planificaci¨®n, desde la inversi¨®n en vivienda u otros bienes a la formaci¨®n de una familia, y cada vez les resulta m¨¢s remota la esperanza de disfrutar un d¨ªa de una pensi¨®n de jubilaci¨®n. Esta frustraci¨®n tiene una contrapartida pol¨ªtica, ya que rebaja sus expectativas respecto al sistema y erosiona su confianza en ¨¦l. Y esto resulta preocupante, a la vista del auge de los populismos de toda ¨ªndole, que se nutren precisamente de este tipo de sentimientos.

El c¨ªrculo vicioso de la falta de oportunidades para los j¨®venes tiene dos puntos d¨¦biles. Por un lado, la educaci¨®n, que es el mayor motor de igualdad que existe. Un joven con buena formaci¨®n multiplica exponencialmente sus opciones de encontrar un empleo incluso en un entorno de crisis. Educaci¨®n b¨¢sica, educaci¨®n universitaria y formaci¨®n continua, ah¨ª deben centrarse los esfuerzos de la comunidad iberoamericana si quiere empezar a desarrollar una estrategia que ataque simult¨¢neamente el paro, la desigualdad, el envejecimiento poblacional y hasta el descontento pol¨ªtico. Se trata adem¨¢s de un instrumento de pre-distribuci¨®n, que ataja la falta de oportunidades de los j¨®venes antes de que se produzca. Por eso es crucial ponernos ya manos a la obra.

Por otro lado, hay que crear un entorno propicio para el emprendimiento y el autoempleo. La econom¨ªa actual demanda profesionales con creatividad e iniciativa propia, menos dependientes del empleo por cuenta ajena, y m¨¢s capaces de poner en marcha sus propios proyectos. Pero tambi¨¦n demanda de los Estados que faciliten las cosas a quienes tienen ese impulso facilitando su financiaci¨®n, disminuyendo las trabas burocr¨¢ticas a la creaci¨®n de empresas, favoreciendo la digitalizaci¨®n de la econom¨ªa y de las administraciones p¨²blicas y premiando los esfuerzos de los emprendedores. Ofrecerles a nuestros j¨®venes esas ayudas es darles una herramienta m¨¢s para ser due?os de su propio futuro, y es tambi¨¦n ayudar al desarrollo de una econom¨ªa m¨¢s din¨¢mica para nuestros pa¨ªses.

Por todo ello, considero que efectivamente hablar de j¨®venes, educaci¨®n y emprendimiento en la XXV Cumbre Iberoamericana es una buena manera buscar soluciones colectivas a problemas que ya tenemos en com¨²n, y de hacerlo mirando al futuro. Last but not least, hacerlo en Cartagena de Indias es una manera m¨¢s de optar por el futuro. El futuro de una Colombia en paz, que todos deseamos y toda la comunidad internacional respalda, como se evidenciar¨¢ sin duda durante la cumbre.

Ram¨®n J¨¢uregui es eurodiputado y copresidente de la Asamblea Parlamentaria Euro Latinoamericana (EuroLat).