Matan a golpes a un argentino en un bar de Brasil
Marcelo Rey ten¨ªa 38 a?os y desde 2013 viv¨ªa en el Morro de S?o Paulo en busca de seguridad
Una discusi¨®n que sube de tono, un golpe letal y la salvajada de seguir pegando con el enemigo abatido. Eso le ocurri¨® a Marcelo Gabriel Rey, un hombre de 38 a?os que desde hace 3 viv¨ªa en el Morro de S?o Paulo, una isla tur¨ªstica a 2 horas y 40 minutos de navegaci¨®n desde Salvador de Bah¨ªa. El atacante provoc¨® el desmayo de la v¨ªctima y continu¨® golpe¨¢ndolo en el piso tras acusarle de robar el trabajo a los brasile?os. Se llama Enrique y est¨¢ pr¨®fugo, pero es un personaje muy conocido en esa aldea y habitu¨¦ del bar en el que trabajaba Rey. El consulado trabaja para repatriar los restos del argentino fallecido.
El hecho sucedi¨® cerca del Bar do Peter II, propiedad de otro argentino, Gast¨®n Carniel, y lugar donde trabajaba Rey, a quien todos conoc¨ªan como Conejo. Rey lleg¨® a Brasil en 2013 proveniente de Lan¨²s, en la provincia de Buenos Aires, escapando de la inseguridad que golpea a Argentina. Comenz¨® a trabajar de cajero en el comercio que est¨¢ ubicado en una zona estrat¨¦gica del morro y que se ha convertido en un centro de encuentro para los argentinos que all¨ª viven o que visitan el lugar como turistas.
El bar public¨® en su p¨¢gina de Facebook un anuncio en ambos idiomas con una versi¨®n de los hechos: ¡°Lamentablemente hemos perdido a uno de nuestros amigos y trabajadores de aqu¨ª. Conejito amigo, te vamos a extra?ar much¨ªsimo. Hasta ahora lo que sabemos es que estaba en el bar Pedra sobre Pedra, en la segunda playa, que discuti¨® con alguien m¨¢s, que se pelearon, que le pagaron hasta desmayarlo y despu¨¦s le pegaron m¨¢s en el piso hasta matarlo¡±.
¡°La persona que hizo esto es conocida por todo el mundo. Hay varios testigos y muchas personas no hablan para encubrir al asesino. As¨ª como los funcionarios y el due?o del bar que nunca hicieron nada en pos de mantener la calma y que nada de esto pasara¡±, acusa el escrito. ¡°Este hijo de puta asesino se llama Enrique, la mujer se llama Dalma y vende trufas en la plaza de Morro. Tiene un hijito y seguramente est¨¢n fugados. Quien tenga informaci¨®n se agradece mucho¡±, solicita.
Otra versi¨®n m¨¢s precisa, que dieron los amigos de Rey, indica que el episodio se produjo el martes y que ¡°un bahiano conocido por todo el mundo¡± invit¨® a pelear a la v¨ªctima acus¨¢ndole de ser un for¨¢neo que le roba el trabajo a los locales. Como Rey se neg¨®, el agresor lo empuj¨® y lo tir¨® al piso. Pero el individuo no se detuvo y lo golpe¨® en el suelo hasta matarlo.
Mariano Vergara, c¨®nsul en Bah¨ªa, confirm¨® el hecho en declaraciones a radio La Red y dijo que la muerte se produjo tras ¡°un golpe en la cabeza contra una escalera de piedra¡±. ¡°Estamos todos muy consternados. Conoc¨ª a Marcelo y me pareci¨® un chico muy pac¨ªfico. Fue una pelea con un desenlace desgraciado¡±, explic¨® y agreg¨® que ese tipo de episodios ¡°no son usuales, porque el Morro de S?o Paulo es un lugar muy tranquilo¡±, aunque recomend¨® a los visitantes ser cordiales con los habitantes locales. Confirm¨® adem¨¢s que el asesino est¨¢ pr¨®fugo y que est¨¢n organizando la repatriaci¨®n de los restos de la v¨ªctima. En ese sentido, los familiares est¨¢n reuniendo donaciones en el club Argentino de Lan¨²s, de donde era Rey.
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