El narco colombiano pierde hegemon¨ªa internacional y se concentra en el mercado local
Autoridades advierten aumento en el narcomenudeo y consumo de drogas en Colombia
Las organizaciones narcotraficantes de Colombia han perdido la hegemon¨ªa sobre el negocio a nivel global y la problem¨¢tica parece encaminarse hacia el mercado interno. Seg¨²n un informe del Departamento de Planeaci¨®n Nacional (DNP), presentado este mi¨¦rcoles en Bogot¨¢, el negocio de los ¡®narcos¡¯ ha perdido el control de toda la cadena productiva y solo llega hasta la distribuci¨®n de droga a las organizaciones narcotraficantes internacionales, sobre todo a carteles mexicanos, y al mercado nacional. El narco colombiano ya no pone la droga en las calles de Estados Unidos. De acuerdo con la entidad estatal, el negocio del narcomenudeo en Colombia movi¨® en el a?o 2015, a trav¨¦s de los grupos criminales del microtr¨¢fico, 2.000 millones de d¨®lares, equivalentes al 0,75 del PIB, como consecuencia del aumento del consumo de drogas il¨ªcitas en el pa¨ªs.
¡°Para las organizaciones del narcomenudeo es m¨¢s rentable el mercado interno que exportar la droga. Si sigue aumentando el consumo y creciendo la venta de coca¨ªna, marihuana y bazuco, el pa¨ªs se ver¨¢ enfrentado, en el corto plazo, a un grave problema de salud p¨²blica¡±, asegur¨® el director del DNP, Sim¨®n Gaviria. Seg¨²n el an¨¢lisis, los c¨¢rteles de la primera generaci¨®n, en donde se incluye el de Medell¨ªn con Pablo Escobar, que se mantuvo de los a?os 80 hasta 1995, lograban una rentabilidad en el negocio fuera de Colombia de hasta el 2.790%, en la actualidad alcanza el 260%.
¡°La acci¨®n estatal, con el aumento de recursos y de pie de fuerza, llev¨® a que las organizaciones del narcotr¨¢fico cambiaran el modelo de negocio a partir de 2009 e hicieran el tr¨¢nsito hacia la multicriminalidad y delincuencia organizada para abrir nuevos mercados como el del narcomenudeo, que genera m¨¢s rentabilidad¡±, afirm¨® el director de Planeaci¨®n Nacional.
El estudio reitera que para los ¡®narcos¡¯ colombianos el negocio pas¨® de ser una estructura vertical y de grandes m¨¢rgenes de rentabilidad a un negocio atomizado, con estructura horizontal y con una evidente disminuci¨®n en las ganancias. Mientras que en los a?os ochenta ten¨ªan control en toda la cadena, desde el cultivo a la venta en las calles, y por un kilo de coca¨ªna pod¨ªan ganar hasta 165.000 d¨®lares, ahora su participaci¨®n llega hasta la distribuci¨®n, que le representa 12.000 d¨®lares por cada kilo, seg¨²n la DNP. El organismo calcula que en Colombia hay 1.480.000 de consumidores y que el 56% del total est¨¢n en las ciudades capitales.
Mientras la rentabilidad ha disminuido afuera, dentro del pa¨ªs, las estructuras criminales alcanzan con el narcomenudeo una utilidad de hasta 1.500%. ¡°El consumo de coca¨ªna es un fen¨®meno tanto urbano como rural. Por eso el mercado interno resulta muy atractivo para esas organizaciones¡±, advierte Gaviria. De acuerdo con el informe, las incautaciones de coca¨ªna en Colombia se concentran en aglomeraciones urbanas (69,4%) y municipios intermedios (19,3%).
La vinculaci¨®n de menores de edad a estructuras criminales que manejan el microtr¨¢fico es una de las principales preocupaciones sobre las que alerta la investigaci¨®n, seg¨²n la cual, a trav¨¦s de ofrecimientos de dinero y objetos personales, el suministro de estupefacientes y la garant¨ªa de protecci¨®n, consiguen nuevos consumidores y colaboradores en la venta callejera. Justamente el delito m¨¢s com¨²n por el que los j¨®venes est¨¢n siendo judicializados en el pa¨ªs es el de tr¨¢fico de drogas, se?ala Gaviria. Adem¨¢s, de los menores que est¨¢n en el Sistema de Responsabilidad Penal Adolescente (SRPA) por la comisi¨®n de un crimen, 30% de mujeres y 25% de hombres presentaron dependencia de sustancias psicoactivas.
¡°Para controlar y promover el consumo, las organizaciones dedicadas al narcomenudeo obligan a sus integrantes a permanecer y participar en actividades delincuenciales, consumir, pagar la droga incautada o extraviada y los someten a amenazas contra su vida y la de sus familias¡±, asegura el informe.
El ministro de Salud, Alejandro Gaviria, reconoce que el consumo ha aumentado de forma alarmante y que los an¨¢lisis que existen sobre el tema son precarios en el pa¨ªs. Se?ala, sin embargo, que el Gobierno ha intentado promover un abordaje de salud p¨²blica para enfrentar este problema. ¡°El ¨¦nfasis debe estar en los riesgos sociales, no solo en las sustancias que se consumen. El Estado debe tratar al consumidor con un conjunto de pol¨ªticas complementarias a las medidas que se tienen en materia de justicia¡±, asegura.
El panorama, expuesto este mi¨¦rcoles, pretende generar una advertencia sobre la urgencia de tomar pol¨ªticas p¨²blicas que eviten que aumente el consumo y la violencia el pa¨ªs, sobre todo teniendo en cuenta que Colombia, seg¨²n Naciones Unidas, es el primer pa¨ªs productor de coca¨ªna del mundo y en el ¨²ltimo a?o ha crecido el cultivo de il¨ªcitos: de 48.000 hect¨¢reas a 96.000.
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