Trump ignora la protesta que clama a sus puertas

Cuando Donald Trump sali¨® en la ma?ana del s¨¢bado rumbo a la Catedral de Washington para participar en una ceremonia religiosa, el primer acto p¨²blico de su primer d¨ªa como presidente de Estados Unidos, los participantes de la Marcha de las Mujeres convocada en protesta por el nuevo gobierno empezaban a desbordar las calles que llevan hasta la Casa Blanca.

Cuando Trump regres¨® a su nueva residencia, el clamor de la que r¨¢pidamente se hab¨ªa convertido en una de las mayores manifestaciones de los ¨²ltimos a?os en la capital estadounidense, con una participaci¨®n que seg¨²n la organizaci¨®n superaba el medio mill¨®n de personas, su comitiva se cruz¨® con grupos de mujeres y hombres que segu¨ªan congreg¨¢ndose en el National Mall para la marcha. Y cuando, poco despu¨¦s de la 1 de la tarde, Trump volvi¨® a subirse a su limusina para poner rumbo a la sede de la CIA, los gritos y reclamos de la protesta eran audibles en todo el per¨ªmetro de una Casa Blanca tambi¨¦n rodeada de manifestantes.

Pero el flamante presidente republicano, que solo 24 horas antes se hab¨ªa jactado en su discurso de investidura de haber iniciado un ¡°hist¨®rico movimiento de decenas de millones de personas nunca visto antes en el mundo¡±, no consider¨® necesario hacer referencia alguna a los cientos de miles de personas que caminaban rumbo a la Casa Blanca por unas avenidas mucho m¨¢s rebosantes que durante su fiesta de inauguraci¨®n.

Eso s¨ª, no dud¨® en llamar otra vez a los periodistas ¡°los seres m¨¢s deshonestos de la Tierra¡± por publicar im¨¢genes que mostraban un Washington mucho m¨¢s vac¨ªo durante su investidura que en la de Obama o incluso este mismo s¨¢bado y asegur¨® que entre un mill¨®n y un mill¨®n y medio de personas acudieron a celebrarlo. Una cifra much¨ªsimo m¨¢s alta que la barajada por los medios y que la que permiten estimar c¨¢lculos como el realizado por el transporte p¨²blico de la ciudad. Seg¨²n Metro, a las 11 de la ma?ana del viernes, 193.000 personas hab¨ªan usado su transporte, uno de los principales para moverse por la ciudad. A la misma hora de este s¨¢bado, d¨ªa de la Marcha de las Mujeres, la cifra de usuarios de metro superaba los 275.000 y, unas horas m¨¢s tarde, en pleno apogeo de la protesta, superaba largamente el medio mill¨®n de viajes.

Quien no ha tenido empacho en comentar la marcha y degradarla es Michael Flynn Jr, el hijo del asesor de Seguridad Nacional de Trump, Michael Flynn. El joven, que actuaba como asistente de su padre hasta que tuvo que dejar el puesto por difundir falsas noticias sobre Hillary Clinton en Internet que casi provocan una tragedia en Washington, volvi¨® a usar las redes sociales para insultar a los centenares de miles de mujeres que marcharon por todo el pa¨ªs esta jornada para reclamar la protecci¨®n de sus derechos en la era Trump.

¡°?Qu¨¦ victoria? Las mujeres ya tienen los mismos derechos y S?, igualdad salarial en este pa¨ªs. ?Qu¨¦ m¨¢s quer¨¦is? ?Una manicura o pedicura gratis?¡±, tuite¨® Flynn hijo.