La UE crea una unidad para combatir la propaganda del ISIS

La imagen de la Uni¨®n Europea pierde brillo en la era de la posverdad. Y la comunicaci¨®n convencional no consigue mitigar el alud de mensajes negativos que se vierten sobre Europa. M¨¢s de un a?o despu¨¦s de haber creado una unidad de contrapropaganda para desmontar los bulos procedentes de Rusia, Bruselas perfila ahora un experimento similar para combatir una narrativa a¨²n m¨¢s extrema: la del Estado Isl¨¢mico (ISIS, por sus siglas en ingl¨¦s).

El servicio diplom¨¢tico europeo est¨¢ ya reclutando a una docena de personas para afrontar una tarea que se antoja tit¨¢nica. La unidad, de nombre Stratcom South (Comunicaci¨®n estrat¨¦gica para el sur), divulgar¨¢ sus mensajes en ¨¢rabe para llegar a todas las capas de la poblaci¨®n, no solo a las que hablan ingl¨¦s. Las fuentes consultadas para esta informaci¨®n exigen anonimato porque creen que divulgar el proyecto perjudicar¨¢ a la estrategia antipropaganda de la UE.

Aunque la idea y las -modestas- dimensiones de este nuevo centro se asemejan a las del que ya opera para el vecindario ruso, en el caso del sur la acci¨®n se centrar¨¢ m¨¢s en transmitir mensajes positivos. Sus promotores pretenden comunicar lo que la UE hace en los pa¨ªses ¨¢rabes m¨¢s que rebatir las mentiras o los ataques que circulan por la red. Este fue tambi¨¦n el prop¨®sito inicial del grupo de contranarrativa contra el Kremlin y finalmente su labor estrella es la que disecciona la propaganda que prolifera por los medios de comunicaci¨®n y las redes sociales. El grupo opera en Internet como Euvsdisinfo, aunque intenta distanciarse lo m¨¢s posible de la imagen institucional que proyecta el club comunitario.

El impacto y la f¨¢cil propagaci¨®n de historias muchas veces falsas o sesgadas parecen imparables. Por eso ahora los poderes p¨²blicos exploran algo m¨¢s que los mensajes convencionales de siempre. Antes de que Bruselas iniciara este proyecto, la coalici¨®n internacional contra el Daesh, liderada por Estados Unidos, ya cre¨® una c¨¦lula de comunicaci¨®n para combatir los mensajes del movimiento terrorista. Cuenta con un centro en Londres, sufragado inicialmente con 10 millones de libras (casi 12 millones de euros), que se atribuye el m¨¦rito de haber logrado un descenso del 45% en el volumen de tuits favorables al ISIS desde junio de 2014. En ese periodo, el n¨²mero de seguidores de cuentas cercanas a este grupo ha ca¨ªdo de 1.500 a 300, seg¨²n datos de la coalici¨®n.

Las fuentes consultadas aseguran que no pretenden duplicar esos trabajos, sino promover los proyectos europeos en un momento de fuerte crisis de los valores occidentales. Sus limitados recursos, adem¨¢s, les impiden ir muy lejos. Para amplificar el impacto, la nueva unidad pretende servirse de las oficinas de la UE en el exterior. En total hay 139, muchas de ellas desplegadas en el mundo ¨¢rabe, pero funcionan de forma atomizada y cooperan poco para reforzar sus mensajes. ¡°Queremos promover lo que hacemos y encontrar lo que tenemos en com¨²n con esos pa¨ªses¡±, resumen esas fuentes.

Alarmada por el volumen de ataques que recibe desde todos sus vecindarios, Bruselas quiere completar con los Balcanes esta estrategia de comunicaci¨®n no convencional. El servicio diplom¨¢tico intenta poner en marcha el mismo tipo de unidad para los pa¨ªses de la ex Yugoslavia, hasta hace poco entusiastas candidatos a integrar la UE y ahora m¨¢s remisos a abrazar el proyecto comunitario (y con creciente receptividad hacia Mosc¨²).

Los conocedores de estas iniciativas evitan hablar de si la UE se plantear¨¢ algo similar hacia Estados Unidos, un foco potencial de desinformaci¨®n con Donald Trump en el poder. ¡°Veamos c¨®mo se desarrollan los acontecimientos¡±, responde una de las fuentes consultadas.