Donald Trump fija la diana pol¨ªtica en los medios de comunicaci¨®n

Desde su llegada a la Casa Blanca, el presidente ha sustituido su principal adversaria pol¨ªtico, Hillary Clinton, por los medios de comunicaci¨®n. ¡°Los medios deben mantener la boca cerrada, son el partido de oposici¨®n¡±, dijo, en su primera semana, Steve Bannon, la mano derecha de Trump.

La mentalidad de Bannon ha calado en el presidente, que de manera gradual ha incrementado sus fuertes cr¨ªticas a la prensa hasta el punto de afirmar el pasado viernes que es el ¡°enemigo del pueblo americano¡±. Al d¨ªa siguiente, Trump insisti¨® en Twitter: ¡°No crean a los medios (que publican noticias falsas), la Casa Blanca funciona perfectamente¡±.

Desde la campa?a electoral, Trump y sus asesores m¨¢s cercanos han deslegitimado a los medios para refutar cualquier noticia que les convenga como ¡°falsa¡±, proveniente de una prensa podrida que favorece los intereses del establishment y Washington. Y durante el proceso, el republicano ha erosionado la confianza de una parte de la ciudadan¨ªa en los medios de comunicaci¨®n m¨¢s importantes.

Pero para Trump, los ataques son una respuesta natural a la lluvia constante de art¨ªculos escritos sobre los esc¨¢ndalos y problemas de su presidencia hasta ahora. El presidente se considera una v¨ªctima. El portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, as¨ª lo expresado rutinariamente en sus comparecencias diarias. El propio Trump, se quej¨® de ello en un m¨ªtin reciente en Florida, donde dijo que ¡°los medios no quieren contar la verdad¡±.

Los insultos del presidente han sido dirigidos en su mayor¨ªa a medios de tono m¨¢s progresista como la cadena NBC o CNN, o diarios como el Post o el Times. Pero la gravedad de estos tambi¨¦n la comparten medios y publicaciones m¨¢s afines a otras ideolog¨ªas.

En una entrevista con Reince Priebus, un asesor de Trump, el veterano periodista Chris Wallace de la cadena Fox News -- referente de la derecha -- le dijo: ¡°No tengo un problema con que el presidente se queje de un art¨ªculo o dos en concreto. A veces nos equivocamos. Pero el presidente lo ha llevado a otro nivel al afirmar que los medios son un enemigo del pa¨ªs¡±.

Michael Oreskes, director editorial de National Public Radio, uno de los conglomerados de radio m¨¢s importantes del pa¨ªs, escribi¨® una carta a sus empleados condenando los ataques de Trump. ¡°Una prensa robusta, incluso inquieta, es uno de los signos que marcan el ¨¦xito de la democracia estadounidense¡±, reivindic¨® Oreskes.

Una de las periodistas m¨¢s conocidas de Politico, un medio especializado en la cobertura pol¨ªtica, ha sido una de las voces cantantes en la defensa de la labor period¨ªstica. ¡°El ataque a la prensa est¨¢ sacado directamente del manual de los reg¨ªmenes autoritarios¡±, afirm¨® Glasser este lunes en una entrevista.

Dos figuras importantes del Partido Republicano republicanos, el senador John McCain y el senador Lindsey Graham, tambi¨¦n rechazaron el azote a la prensa. ¡°Lo primero que hacen los dictadores es reprimir a la prensa¡±, dijo McCain, que fue candidato presidencial en 2008.

Desaparici¨®n de la verdad

En EEUU ya no existe una sola verdad. Existen m¨²ltiples realidades y distintas versiones de un mismo hecho. El d¨ªa despu¨¦s de la toma de posesi¨®n, Spicer defendi¨® que ¡°la inauguraci¨®n de Trump hab¨ªa tenido el mayor n¨²mero de asistentes en la historia¡±. Cuando la prensa, apoy¨¢ndose en datos de agencias federales, demostr¨® que era una afirmaci¨®n falsa, una asesora cercana al presidente afirm¨® que la Casa Blanca hab¨ªa utilizado ¡°hechos alternativos¡±.

Una investigaci¨®n reciente del diario The Washington Post revel¨® que Michael Flynn, exconsejero de seguridad nacional de Trump, minti¨® al vicepresidente Mike Pence sobre sus conversaciones con el embajador ruso en Washington. D¨ªas despu¨¦s, una exclusiva de The New York Times citaba a fuentes an¨®nimas de la administraci¨®n Trump para alegar que el ahora presidente y miembros de su campa?a estuvieron en contacto constante con la inteligencia rusa durante los meses previos a los comicios de noviembre. La reacci¨®n de Trump fue convocar una rueda de prensa, la primera en solitario desde que ocupa el Despacho Oval, para condenar a los medios, calificandolos de ser ¡°deshonestos¡± y estar ¡°fuera de control¡±, por publicar ¡°informaciones falsas¡±.

Como esas instancias hay decenas m¨¢s en las que la verdad, la certeza de si ocurri¨® un hecho, una llamada telef¨®nica, una reuni¨®n o la supuesta colusi¨®n entre Rusia y Trump, se desvanece entre los ataques del presidente a los medios, que se revuelven por encontrar fuentes que les acerquen a la realidad opaca de la Casa Blanca.