La correcci¨®n pol¨ªtica llega al Carnaval de R¨ªo

La irreverencia del Carnaval de R¨ªo de Janeiro, la mayor fiesta del a?o, tiene los d¨ªas contados. Y la falta de reglas tambi¨¦n. Hace 40 carnavales nadie ve¨ªa problema en usar la palabra "mulata" o burlarse de los gais en las canciones que agitan los cortejos callejeros, pero la inercia se acab¨®. Algunas letras abren heridas y ahora el debate est¨¢ en la calle: ?es compatible el carnaval con lo pol¨ªticamente correcto?

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El asunto palpita desde hace un par de ediciones, pero ha ascendido a pol¨¦mica despu¨¦s de que algunos grupos carnavalescos de calle, los llamados blocos de rua, decidieran dejar de tocar m¨²sicas inc¨®modas y agresivas contra negros, mujeres u homosexuales. Entre esas canciones hay cl¨¢sicos del carnaval carioca, que tocan incansablemente a?o tras a?o, y cuyas letras todos saben de memoria. El carnaval m¨¢s conocido de Brasil, que lleva m¨¢s de cinco millones de personas a sus calles del viernes al mi¨¦rcoles de ceniza, ha conseguido que el debate no se conforme con las redes sociales y llegue a desfiles, orquestas y peri¨®dicos.

Cabeleira do Zez¨¦, de Jo?o Roberto Kelly, que lleva una vida inventando estribillos carnavalescos, es un ejemplo de la pol¨¦mica. La canci¨®n contiene estas estrofas: "Olha a cabeleira do Zez¨¦ / Ser¨¢ que ele ¨¦ bossa nova / Ser¨¢ que ele ¨¦ Maom¨¦ / Parece que ¨¦ transviado / Mas isso eu n?o sei se ele ¨¦! / Corta o cabelo dele! " ("Mira la melena de Zez¨¦ / ?Ser¨¢ que ¨¦l es? / ?Ser¨¢ que es bossa nova? / ?Ser¨¢ que ¨¦l es Mahoma? / Parece ser maric¨®n / ?Pero no s¨¦ si es! / ?c¨®rtale el pelo!"). La canci¨®n incomoda, sobre todo, por su ¨²ltimo verso que invita a cortar la cabellera de Zez¨¦ y sus cr¨ªticos interpretan como una incitaci¨®n a la violencia contra gais y travest¨ªs. Kelly, con un repertorio de cerca de 100 canciones de carnaval, tiene varias envueltas en la pol¨¦mica, se queja. "Nunca vi una vigilancia tan grande, ni en los tiempos de la dictadura. El carnaval es una broma. Nos re¨ªmos del calvo, del barrigudo, no podemos tomarnos las cosas al pie de la letra", dijo en una entrevista al diario O Estado de S. Paulo.

"?Ser¨¢ que ¨¦l es Mahoma? / Parece ser maric¨®n / ?Pero no s¨¦ si es! / ?c¨®rtale el pelo!", dice una canci¨®n

O Teu Cabelo N?o Nega, una de las creaciones m¨¢s famosas de Lamartine Babo, tambi¨¦n ha salido del repertorio carnavalesco de algunos blocos. La canci¨®n dice "Porque ¨¦s mulata na cor / Como a cor n?o pega, mulata / Mulata, eu quero o teu amor " ("Porque eres mulata de color / pero como el color no contagia, mulata / mulata, quiero tu amor"), y despierta doble rechazo. Primero por asociar el color de la piel a algo contagioso y, despu¨¦s, por usar la palabra "mulata", que etimol¨®gicamente proviene de mula y que el movimiento negro de Brasil rechaza hace a?os.

El veto tambi¨¦n casi alcanza a una canci¨®n hist¨®rica de uno de los m¨¢s reconocidos m¨²sicos brasile?os, Caetano Veloso, Tropic¨¢lia, que versa sobre los ojos verdes de una mulata. Finalmente, varios grupos decidieron mantenerla. El artista tambi¨¦n habl¨® sobre la pol¨¦mica: "Soy mulato y adoro la palabra mulato: es como se llama al pa¨ªs en Aquarela do Brasil, que es nuestro himno no oficial. Siempre detest¨¦ A Cabeleira do Zez¨¦ por el estribillo 'c¨®rtale el pelo', que se repite como incitaci¨®n a un casi linchamiento. Pero no quiero prohibir nada".

Los grupos carnavalescos tampoco quieren entrar en el campo de las prohibiciones. "La prensa ha hablado mucho de veto, pero nosotros no queremos prohibir nada, solo que la gente entienda lo problem¨¢tico que resulta repetir esas canciones", explica Ju Storino, percusionista en varios cortejos no oficiales que eliminaron las canciones potencialmente ofensivas de sus repertorios. "Hay 15.000 m¨²sicas de carnaval, ?de verdad necesitamos continuar tocando algo que ofende a gente? Amo a Caetano, le respeto much¨ªsimo, pero ¨¦l no sabe qu¨¦ significa ser mulata, una mujer hipersexualizada, de la que lo ¨²nico que se espera es que baile samba para todo el mundo. Caetano puede amar la palabra, pero nunca estuvo en la piel de una mulata. Estamos haciendo nuestro papel, hacer pensar".