Geert Wilders tiene un fiero enemigo en Twitter: su hermano mayor Paul
El l¨ªder xen¨®fobo holand¨¦s ha bloqueado a Paul en la red social por las cr¨ªticas que este le hac¨ªa
Los que conocen a Geert Wilders?aseguran que no le gusta que le lleven la contraria. Lleva mas de una d¨¦cada viviendo en una burbuja por miedo a ser asesinado, lo que ha reducido su c¨ªrculo a la m¨ªnima expresi¨®n. Uno de sus contactos m¨¢s palpables con el mundo exterior es a trav¨¦s de Twitter, donde a menudo lanza dardos racistas contra los inmigrantes o se mofa de sus rivales pol¨ªticos. El problema es que en la red social se ha encontrado con un cr¨ªtico con tanta energ¨ªa como la suya: su hermano mayor Paul.
Geert y Paul Wilders est¨¢n en las ant¨ªpodas ideol¨®gicas. En los ¨²ltimos tiempos no se han visto mucho, si acaso en el cumplea?os de su madre que vive en Venlo, en el sur de Holanda. El padre muri¨® hace 12 a?os. En esas reuniones alrededor de las velas evitan tocar temas pol¨ªticos, en realidad lo que cualquier familia deber¨ªa hacer. Es evidente que Paul no comulga con el ideario de su hermano menor y hasta diciembre hab¨ªa mantenido una oposici¨®n elegante, sin atacarlo de manera frontal.
Hasta que Geert public¨® en Twitter una foto de la canciller alemana, Angela Merkel, con las manos manchadas de sangre. Era diciembre de 2016 y un hombre que dec¨ªa actuar en nombre del yihadismo arroll¨® y mat¨® a 12 personas en un mercadillo navide?o en pleno centro de Berl¨ªn. Para Paul eso fue ir demasiado lejos. A su entender, Geert estaba fomentando la violencia y el odio hacia el mill¨®n de refugiados que hab¨ªa acogido Alemania. Atacar de esa manera tan populista a Merkel era pasarse de la raya.
— Geert Wilders (@geertwilderspvv) December 20, 2016
La discusi¨®n fue p¨²blica y acab¨® de la manera m¨¢s abrupta en una red social: Geert lo bloque¨®. Paul desde entonces no puede ver los mensajes que publica su hermano a menos que entre desde otra cuenta. Paul ha dicho que lo quiere igualmente, que lo suyo solo son diferencias pol¨ªticas y que si alg¨²n d¨ªa vuelven a verse lo abrazar¨¢ como si tal cosa. No consta que Geert piense lo mismo.
Los hermanos no convivieron muchos a?os bajo el mismo techo. Cuando Paul se fue a estudiar a la Universidad de Utretch, el candidato a primer ministro de Holanda apenas ten¨ªa nuevos a?os. Geert fue despu¨¦s un adolescente rebelde, como ¨¦l mismo ha confesado, y es conocido que sus padres llegaron a plantearse echarlo de casa. De aquellos a?os se recuerdan sus ataques de ira cuando alguien le llevaba la contraria. Su visita a Israel con 18 a?os, un viaje que cambi¨® su percepci¨®n personal del mundo, abri¨® una etapa en la que empez¨® a interesarse por la pol¨ªtica.
Paul podr¨¢ estar dispuesto a abrazar a su hermano pero tiene claro que no va a votarle en las elecciones que se celebran este mi¨¦rcoles en Holanda, y ha insinuado que su madre tampoco lo har¨¢. Wilders puede tener el respaldo del 20% de los holandeses, seg¨²n los sondeos, pero en la casa en la que creci¨® no tiene mucho donde rascar.
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