Ruperta, el elefante que resucita el drama de la crisis de Venezuela
Las im¨¢genes del fam¨¦lico animal son un retrato del abandono en los zool¨®gicos del pa¨ªs caribe?o
Un elefante africano del zool¨®gico de Caricuao (oeste de Caracas) es el icono reciente de una Venezuela en crisis. El calvario de Ruperta, la paquidermo de 45 a?os, se ha conocido gracias a una serie de fotograf¨ªas publicadas en redes sociales: huesuda al extremo, deca¨ªda y solitaria. As¨ª, en varias im¨¢genes, tambi¨¦n se ha ejemplificado la tribulaci¨®n de los animales en un pa¨ªs petrolero en pleno declive econ¨®mico.
El drama de este elefante ha levantado una legi¨®n en su apoyo. Hasta Paris Jackson, la hija del cantante de pop Michael Jackson, se ha solidarizado con Ruperta. ¡°Esto es inhumano y exasperante. Difundan (la informaci¨®n) para ayudar a estas hermosas criaturas que merecen una vida mejor¡±, escribi¨® en su cuenta de Twitter.
El presidente, Nicol¨¢s Maduro, ha adjudicado el estado de Ruperta a la vejez. ¡°(En las redes sociales y medios de comunicaci¨®n) crearon una novela, un show¡±, asegur¨® el domingo. Pero Ang¨¦lica Romero, directora de Inparques, fue destituida de su cargo hace tres d¨ªas.
En julio, Marlene Sifontes, una sindicalista de Inparques, hab¨ªa denunciado la muerte de 50 animales por la escasez de alimentos en los parques de Caracas
El deterioro del animal ha avanzado al ritmo de la crisis venezolana. Hasta hace seis a?os se ve¨ªa a Ruperta en v¨ªdeos ¡ªcolgados por aficionados en YouTube¡ª animada, con unos kilogramos m¨¢s y devorando hierbas. Su caso ha movido a la Fiscal¨ªa de Venezuela. El martes, el Ministerio P¨²blico ha delegado la investigaci¨®n a una fiscal y a dos bi¨®logos para constatar las condiciones de salud del animal.
Dos d¨ªas antes de esta medida, muchos caraque?os hab¨ªan recaudado alimentos para el elefante, pero la ofrenda fue rechazada por las autoridades del zool¨®gico de Caricuao. El Instituto Nacional de Parques (Inparques) ¨Cuna dependencia del Gobierno de Venezuela y encargada de la gerencia de los zool¨®gicos¨C proh¨ªbe este tipo de donativos para ¡°salvaguardar¡± a los animales. ¡°Es una norma. No se puede recibir comida sin saber su procedencia, pues pueden estar descompuestas o contaminadas y eso ocasionar¨ªa da?os¡±, dijo un empleado de ese organismo a EL PA?S.
La misma fuente ha admitido que los recursos son paup¨¦rrimos para mantener a unos animales que ya han ca¨ªdo en mengua. La dieta de Ruperta se ha limitado a calabazas y lechosa, por ejemplo. Para los expertos este no es un men¨² adecuado para un elefante que debe consumir un promedio de 70 kilogramos de heno, hierbas o frutas al d¨ªa. Seg¨²n un comunicado de Inparques, el paquidermo est¨¢ ¡°estable¡± y es atendido por especialistas.
Las fotos de la desnutrida Ruperta solo forman parte de la galer¨ªa del hambre en los zool¨®gicos del pa¨ªs caribe?o. En julio, Marlene Sifontes, una sindicalista de Inparques, hab¨ªa denunciado la muerte de 50 animales por la escasez de alimentos en los parques de Caracas. Estas acusaciones han sido deso¨ªdas por el Gobierno de Venezuela.
El Ministerio P¨²blico abri¨® una investigaci¨®n ¡ªdelegando en la misma fiscal del caso de Ruperta, Dalila Puglia¡ª sobre estas muertes hace un a?o, pero todav¨ªa no se ha divulgado un informe sobre este asunto. La condena de muchos casos ha sido el olvido judicial. Para Sifontes el deterioro en los zool¨®gicos se ha intensificado producto del bajo presupuesto otorgado por el Estado venezolano y de la crisis econ¨®mica. ¡°Hemos denunciado en varias ocasiones y llevado casos a la fiscal¨ªa, pero a¨²n no han hecho nada¡±, dijo.
Venezuela afronta una de las peores crisis de Am¨¦rica Latina, producto de la ca¨ªda de los precios del petr¨®leo y del desfalco econ¨®mico generado por la corrupci¨®n y las desacertadas pol¨ªticas gubernamentales. Su declive financiero se ha traducido en escasez de alimentos, medicinas y en la inflaci¨®n m¨¢s alta del mundo. De ah¨ª que los animales tambi¨¦n sean arropados por la debacle.
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