Asesinados cuatro militares en una operaci¨®n contra el robo de gasolina en Puebla

Dos patrullas del ej¨¦rcito fueron recibidas la noche de este mi¨¦rcoles con plomo de fusiles autom¨¢ticos en Palmarito, un peque?o municipio de Puebla, Estado del centro de M¨¦xico. Los militares llegaron al lugar alertados por una denuncia de robo de gasolina, una de las pr¨¢cticas m¨¢s habituales de financiaci¨®n utilizadas por el narco en esta zona del pa¨ªs. El enfrentamiento a balazos dej¨® al menos 10 personas muertas, cuatro de ellas militares, y 11 heridos.

En un primer encontronazo, los agresores utilizaron a mujeres y ni?os como escudo humano para inhibir la acci¨®n del Ej¨¦rcito. Parapetados, recibieron a plomo de fusil la llegada del convoy, que no respondi¨® con disparos, seg¨²n la informaci¨®n de la Secretaria de Defensa Nacional. Dos militares murieron y otro qued¨® herido.

A bordo de cinco camionetas blindadas, un grupo de hombres armados abri¨® fuego contra otra patrulla en un lugar cercano. En esta ocasi¨®n, el ataque ¡°fue repelido por los soldados para proteger su integridad f¨ªsica, en virtud de que en esta ocasi¨®n no hab¨ªa presencia de mujeres y ni?os, como ocurri¨® en el primer incidente que fueron utilizados como escudo¡±, se?ala el comunicado oficial. En la refriega, otros seis personas fallecieron, dos de ellas militares, y 10 quedaron heridas.

Palmarito ha entrado en combusti¨®n. Un grupo de vecinos mantiene bloqueda este medio d¨ªa la carretera de Orizaba (estado de Veracruz) a Puebla, a su paso por el pueblo. Con barreras de neum¨¢ticos en llamas,? denuncian la desaparici¨®n de 13 personas tras el operativo de la noche anterior, seg¨²n la informaci¨®n de la televisi¨®n local.

Los enfrentamientos entre el Ejerctio y las bandas del narco se producen adem¨¢s un d¨ªa despu¨¦s del salvaje ataque a un familia en la carreta que conecta la capital mexicana y el estado de Puebla. Un grupo de ocho hombres asesinaron al bebe y violaron a la madre y la hermana. La investigaci¨®n, que a¨²n no se ha cobrado ning¨²n resultado, apunta a que se trata de una banda de huachicoleros o chupaductos, como son conocidos estos grupos de delincuentes dedicados a pinchar los ductos de petr¨®leo. El m¨®vil del ataque habr¨ªa sido el robo de la furgoneta en que viajaba la familia, un jeep ranger, el tipo de veh¨ªculos m¨¢s usados para estas pr¨¢cticas.

El impacto del suceso redobl¨® la vigilancia en la zona por parte tanto de la polic¨ªa estatal como del Ej¨¦rcito. Las autoridades locales anunciaron este jueves en una rueda de prensa que hay hasta 600 soldados desplegados en la zona. Tras los enfrentamientos de este mi¨¦rcoles, los militares detuvieron a 12 agresores, entre ellos dos menores de edad, se confiscaron tres fusiles autom¨¢ticos, un arma corta y cuatro camionetas blindadas.

El negocio de los 'chupaductos'

El descabezamiento y la debilitaci¨®n de las principales mafias del narcotr¨¢fico en M¨¦xico han provocado una diseminaci¨®n de los grupos y una mutaci¨®n de sus pr¨¢cticas. C¨¢rteles m¨¢s peque?os y menos organizados se han lanzado al robo de combustible como una de sus principales fuentes de financiaci¨®n.

Durante 2006, antes de que el expresidente Felipe Calder¨®n sacara al Ej¨¦rcito a la calle para iniciar su guerra contra el narcotr¨¢fico, el pinchazo de ductos de petr¨®leo apenas superaba los 200 casos. El a?o pasado la cifra ascendi¨® a 5.252.

Este tipo de robos se llevan a cabo o bien interceptando directamente los ductos de la empresa, o bien asaltado los camiones cisterna que transportan el crudo. En ambos casos, se presume que en estos delitos participan profesionales de Pemex, la petrolera estatal mexicana, que aportar¨ªan la informaci¨®n y la pericia t¨¦cnica para llevar a cabo los pinchazos en los ductos. Las localidades donde el a?o pasado se registraron un mayor n¨²mero de tomas son Tabasco, Veracruz, Guanajuato, Puebla y Jalisco.

M¨¦xico ha elevado las defensas contra este tipo de delitos. El Congreso encomend¨® el a?o pasado a la Procuradur¨ªa General de la Rep¨²blica (Fiscal¨ªa) una nueva radiograf¨ªa exhaustiva de este fen¨®meno. En 2015 se aprob¨® una ley que sanciona con una pena de 15 a 25 a?os de prisi¨®n a qui¨¦n robe hidrocarburos, intercepte ductos, veh¨ªculos, equipos o instalaciones. Un a?o despu¨¦s el saldo es desalentador: en 2016 las tomas clandestinas aumentaron un 33% y s¨®lo se lograron llevar 33 investigaciones ante un juez.