El extra?o regreso a Corea del Norte de una desertora que gan¨® fama en el sur
Se¨²l investiga si Lim Ji-hyun volvi¨® a su pa¨ªs de origen de forma voluntaria o se trata de un secuestro
Los seguidores surcoreanos de Lim Ji-hyun, una desertora de Corea del Norte que se hab¨ªa hecho un hueco en televisi¨®n explicando sobre todo miserias de su vida en su pa¨ªs de origen, se han llevado esta semana una desilusi¨®n. La mujer, de 26 a?os, apareci¨® este domingo en un v¨ªdeo emitido por un portal de propaganda del r¨¦gimen norcoreano arremetiendo contra Corea del Sur y explicando lo "terrible" que ha sido su vida desde que abandon¨® la madre patria. Se¨²l ya ha abierto una investigaci¨®n para determinar c¨®mo ha vuelto al norte y si se trata de una decisi¨®n voluntaria o, por el contrario, fue secuestrada.
En el v¨ªdeo, la mujer se presenta como Jeon Hye-sung, su nombre original en Corea del Norte. Ataviada con un traje t¨ªpico norcoreano y un pin en la solapa con la imagen de los fallecidos Kim Il-sung y Kim Jong-il, se somete a una entrevista junto a otro desertor que tambi¨¦n retorn¨® hace unos a?os.
Lim cuenta que decidi¨® escapar a Corea del Sur, donde lleg¨® a principios de 2014, "guiada por la fantas¨ªa de que all¨ª podr¨ªa comer bien y ganar mucho dinero". Pero, seg¨²n su relato, pronto se arrepinti¨® de residir "en un pa¨ªs donde todo se juzga por el dinero" y donde estuvo "atormentada por el dolor f¨ªsico y psicol¨®gico". Tras trabajar "en bares y otros sitios", explica, decidi¨® volver voluntariamente a Corea del Norte porque echaba de menos a sus padres, con los que se reencontr¨® el pasado junio. "Cada d¨ªa en Corea del Sur era un infierno", dice, con los ojos llorosos. En el v¨ªdeo no explica c¨®mo logr¨® volver a su pa¨ªs de origen.
La entrevistadora la inquiere adem¨¢s sobre su participaci¨®n en varios programas de televisi¨®n en Corea del Sur. Lim hab¨ªa sido invitada varias veces en Club Moranbong, donde comentaba c¨®mo fue su infancia y adolescencia durante la gran hambruna en el pa¨ªs, mostraba algunos de sus dotes aprendidos por el entrenamiento castrense en el Norte y hablaba, entre el humor y el drama, de la dinast¨ªa de los Kim. Tambi¨¦n se la vio en un programa de citas entre hombres surcoreanos y mujeres del pa¨ªs vecino.
"Calumni¨¦ y habl¨¦ mal de la Rep¨²blica Popular Democr¨¢tica de Corea [nombre oficial de Corea del Norte] porque as¨ª me lo orden¨® la cadena de televisi¨®n", dice la joven en este ¨²ltimo v¨ªdeo. Entre l¨¢grimas, alaba al actual l¨ªder del pa¨ªs, Kim Jong-un, y le agradece esta segunda oportunidad.
Las autoridades surcoreanas anunciaron este mi¨¦rcoles una investigaci¨®n oficial sobre el caso, informa la agencia surcoreana Yonhap. La polic¨ªa ha empezado a interrogar a algunos de sus conocidos en Se¨²l, donde vivi¨® estos tres a?os y medio, y tiene previsto registrar sus movimientos bancarios as¨ª como su historial de llamadas para encontrar pistas sobre si decidi¨® volver de forma voluntaria, fue coaccionada a hacerlo o directamente secuestrada. Seg¨²n el peri¨®dico Korea Times, otros desertores norcoreanos en el sur especulan con que Lim fuera secuestrada por agentes norcoreanos cerca de la frontera entre Corea del Norte y China, adonde habr¨ªa ido para tratar de ayudar a sus familiares a huir del herm¨¦tico pa¨ªs.
El n¨²mero de norcoreanos que han escapado del pa¨ªs en las ¨²ltimas tres d¨¦cadas y se han instalado en el sur se cuenta por miles, aunque el ritmo de deserciones ha ido a menos. Su adaptaci¨®n es complicada porque tienen que asumir que dif¨ªcilmente volver¨¢n a ver a sus familiares y se encuentran con una realidad completamente distinta de la que estaban acostumbrados. Para la inmensa mayor¨ªa, todo lo aprendido en Corea del Norte es insuficiente para sobrevivir en el sur. Algunos han dicho p¨²blicamente que les gustar¨ªa volver ante la incapacidad de habituarse a su nueva vida, mientras que otros han terminado suicid¨¢ndose.
Seg¨²n datos del Ministerio de Unificaci¨®n surcoreano, desde el a?o 2012, solamente 25 han reaparecido en Corea del Norte. Todos ellos dijeron despu¨¦s, ya ante las c¨¢maras del r¨¦gimen, que lo hab¨ªan hecho por voluntad propia.
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