Los dos hombres fuertes de Libia se comprometen a un alto el fuego en Par¨ªs
Bajo el auspicio de Macron, el primer ministro Serraj y el comandante militar Hafter acuerdan tambi¨¦n a celebrar elecciones ¡°lo antes posible¡±
El conflicto que desgarra a Libia desde hace seis a?os y preocupa a Europa por su efecto desestabilizador en la regi¨®n y su potencial terrorista ha dado en Par¨ªs un paso hacia su resoluci¨®n. Bajo el auspicio del presidente franc¨¦s, Emmanuel Macron, las dos principales facciones en Libia acordaron este martes un alto el fuego y la celebraci¨®n de elecciones ¡°lo antes posible¡±, previsiblemente en la primavera de 2018. Ambos compromisos figuran en una declaraci¨®n conjunta que recibi¨® el visto bueno tanto de Fayez Serraj, el primer ministro del Gobierno de unidad nacional apoyado por la ONU, pero que apenas tiene control m¨¢s all¨¢ de Tr¨ªpoli, como del de Jalifa Hafter, el poderoso comandante militar que domina el dividido este de Libia.?
Aunque el texto no entra en grandes detalles ni cuenta con la firma expl¨ªcita de los dos hombres fuertes de Libia ¡ªcomo precisaron fuentes de la negociaci¨®n¡ª su mera existencia es considerada como un avance sustancial. Como testigos ejercieron Macron y el nuevo representante especial de la ONU en Libia, Ghassan Salam¨¦, que deber¨¢ a partir de ahora supervisar el cumplimiento de lo acordado.
¡°Hoy la causa de la paz en Libia ha logrado un gran avance¡±, afirm¨® Macron al t¨¦rmino de las reuniones. Lo conseguido, continu¨® ante la atenta mirada de Serraj y Hafter, a quienes agradeci¨® su ¡°valor hist¨®rico¡±, es una ¡°hoja de ruta¡± que deber¨ªa permitir una reconciliaci¨®n nacional importante, recalc¨®, tanto para el pa¨ªs como para la regi¨®n y para Europa.
¡°Los desaf¨ªos de esta reconciliaci¨®n son inmensos tanto para el pueblo libio como para toda la regi¨®n, y es un proceso esencial tambi¨¦n para Europa, porque si no lo conseguimos, el riesgo terrorista y las consecuencias migratorias ser¨¢n directas para nuestros pa¨ªses¡±, advirti¨® el presidente franc¨¦s.
La estrategia macronista de invitar a un cara a cara a interlocutores dif¨ªciles y, ya en su terreno, limar asperezas en busca de un acuerdo o una relaci¨®n m¨¢s fluida parece as¨ª que ha vuelto a dar resultado. Despu¨¦s de atraer al palacio de Versalles al presidente ruso, Vlad¨ªmir Putin, y de agasajar al estadounidense Donald Trump con una visita que incluy¨® un inusual asiento en primera fila al desfile militar del 14 de julio, fiesta nacional francesa, Macron ha usado una estrategia de hospitalidad similar para abordar el conflicto libio en el que, seg¨²n su Gobierno, ha mostrado un inter¨¦s especial desde el comienzo de su corto mandato. El escenario escogido en esta ocasi¨®n fue el palacio de La Celle-Saint Cloud, un tranquilo espacio en las afueras de Par¨ªs que en el pasado ha sido escenario de acontecimientos diplom¨¢ticos como el acuerdo de la independencia de Marruecos, en 1955.
Aunque los preparativos llevaban semanas en marcha y algunos medios filtraron la noticia del encuentro el fin de semana, hasta el lunes el El¨ªseo no confirm¨® una cita que se desarroll¨® siguiendo un estricto protocolo marcado por Par¨ªs: el primero en llegar fue Serraj, tal como corresponde al que ¡°a d¨ªa de hoy, es el representante leg¨ªtimo de Libia¡±, seg¨²n el El¨ªseo. Serraj fue recibido a la entrada del palacete por Macron y por el ministro de Relaciones Exteriores franc¨¦s, Jean-Yves Le Drian quien, en una reciente entrevista con Le Monde, hab¨ªa subrayado que, pese a todo, el mariscal Hafter tambi¨¦n ¡°forma parte de la soluci¨®n¡± y habr¨¢ que buscar una forma de integrarlo. No obstante, incluso el protocolo del encuentro recalc¨® las diferencias que Francia establece entre los dos actores principales del conflicto: al contrario que Serraj, el comandante solo fue recibido por un miembro de la delegaci¨®n francesa a su llegada y, aunque tambi¨¦n se reuni¨® en privado con Macron, esa cita fue mucho m¨¢s corta, de diez minutos, que los tres cuartos de hora que el presidente galo se hab¨ªa reservado para su cara a cara con el primer ministro libio. La agenda concluy¨® con un encuentro ampliado entre los dos hombres fuertes de Libia con Macron y con Salam¨¦.
El Gobierno galo se hab¨ªa guardado las espaldas ante esta reuni¨®n, poniendo bastante baja la barra del ¨¦xito. Aunque el ¡°desaf¨ªo¡± ¨²ltimo es ¡°construir un Estado capaz de responder a las necesidades fundamentales de los libios y dotado de un Ej¨¦rcito regular unificado bajo la autoridad del poder civil¡±, seg¨²n declar¨® el El¨ªseo, la cita parisina dec¨ªa buscar solamente un punto de inflexi¨®n en el actual statu quo, una ¡°hoja de ruta¡± con principios generales pero sin entrar en detalles a¨²n como en cuestiones de reparto de poderes. Solo con conseguir que de la ¡°iniciativa del 25 de julio¡±, como la titul¨® el El¨ªseo, saliera, como ha sido el caso, un comunicado conjunto de las dos partes hasta hoy enfrentadas, deb¨ªa ser considerado como un logro, sobre todo porque en el primer intento, realizado en Abu Dhabi el 2 de mayo, no se consigui¨® que se saldara con un texto com¨²n.
¡°Nos comprometemos a un cese del fuego y a abstenernos de hacer cualquier uso de la fuerza armada que no est¨¦ enmarcada estrictamente en la lucha antiterrorista¡±, se afirma en el punto segundo de la declaraci¨®n conjunta, justo despu¨¦s de subrayarse que la soluci¨®n al conflicto libio ¡°no puede ser m¨¢s que pol¨ªtica¡± y que requiere de un ¡°proceso de reconciliaci¨®n nacional¡± que comprenda tanto a los actores institucionales como a los militares.
En la declaraci¨®n, que fue intensamente negociada hasta el ¨²ltimo momento, tambi¨¦n se establece el ¡°compromiso solemne¡± de trabajar para la celebraci¨®n de elecciones presidenciales y parlamentarias ¡°lo antes posible¡±, bajo la supervisi¨®n de Naciones Unidas. Macron precis¨® posteriormente que la meta es la primavera pr¨®xima. El texto reconoce adem¨¢s expl¨ªcitamente la labor ¡°imparcial¡± de Salam¨¦ como enviado de la ONU, as¨ª como el acuerdo pol¨ªtico de Skhirat de diciembre de 2015.
Para el Gobierno franc¨¦s, el momento para buscar un ¡°entendimiento pol¨ªtico¡± hasta ahora tan elusivo era ¡°oportuno¡±, entre otros por el inicio del mandato, esta semana, del nuevo representante especial de la ONU en Libia. Macron tambi¨¦n neg¨® enf¨¢ticamente que con esta cita en las afueras de Par¨ªs se hayan ignorado otros esfuerzos, especialmente los italianos, en el conflicto libio, y asegur¨® que el contacto con las m¨¢ximas autoridades italianas, as¨ª como con todos los pa¨ªses implicados en las negociaciones, ha sido constante.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.