EE UU eleva a ¡°cientos de millones de d¨®lares¡± los activos congelados al vicepresidente de Venezuela
El Aissami fue incluido en febrero en la lista de narcotraficantes de Washington, que impone nuevas sanciones a 13 altos cargos venezolanos
El agujero es mucho mayor del vaticinado inicialmente. El Gobierno estadounidense anunci¨® este lunes que ascienden a ¡°cientos de millones de d¨®lares¡± los activos congelados al entorno del vicepresidente venezolano, Tareck El Aissami, a quien sancion¨® el pasado febrero por sus v¨ªnculos con el narcotr¨¢fico.
¡°El Aissami y [su asesor Samark] Jos¨¦ L¨®pez Bello ten¨ªan mucho m¨¢s dinero de lo que anticip¨¢bamos¡±, dijo en una conferencia de prensa un alto funcionario de la Administraci¨®n de Donald Trump que pidi¨® el anonimato. Hace cinco meses, el Departamento del Tesoro estim¨® que sumaban ¡°decenas de millones de d¨®lares¡± los activos en EE UU, la gran mayor¨ªa propiedades inmobiliarias en Miami.
Ninguno de los bienes bloqueados est¨¢ a nombre de El Aissami, que asumi¨® el cargo en enero y antes fue ministro de Interior y Justicia. Todos lo est¨¢n presumiblemente al de Bello, al que Washington considera el testaferro del vicepresidente. Bello y sus asociados controlaban 13 empresas con sede en EE UU, Panam¨¢, Reino Unido, Venezuela y las islas V¨ªrgenes Brit¨¢nicas. El caso, seg¨²n el alto funcionario, evidencia la ¡°corrupci¨®n y el narcotr¨¢fico en el Gobierno venezolano¡±.
El Tesoro acus¨® en febrero, en el marco de la llamada Ley Kingpin, a El Aissami de tener un ¡°papel significativo¡± en el narcotr¨¢fico internacional. El vicepresidente, seg¨²n el Gobierno estadounidense, facilit¨® el env¨ªo de drogas desde puertos y aeropuertos venezolanos. Algunas de las sustancias iban dirigidas a M¨¦xico y EE UU.
Nuevas sanciones
La informaci¨®n sobre El Aissami se conoci¨® durante el anuncio de nuevas sanciones de Washington a 13 altos cargos venezolanos, incluidos dos ministros y el jefe de la polic¨ªa, en un intento final de presionar a Nicol¨¢s Maduro para que cancele la votaci¨®n el domingo de una nueva Asamblea Nacional Constituyente. Las penalizaciones buscan mandar al presidente venezolano un mensaje de contundencia: Trump ¡°cumplir¨¢ su palabra¡± e impondr¨¢ ¡°fuertes y r¨¢pidas acciones econ¨®micas¡± si la votaci¨®n tiene lugar, seg¨²n explicaron funcionarios estadounidenses.
Las sanciones afectan a altos cargos del Gobierno venezolano, el Ej¨¦rcito y la compa?¨ªa p¨²blica petrolera Pdvsa, que se considera se utiliza para desv¨ªo de fondos. Se les acusa de erosionar la democracia al promover la Constituyente, de violaciones de derechos humanos y de corrupci¨®n. Los castigos suponen la congelaci¨®n de bienes en EE UU y restricciones financieras.
Entre los sancionados est¨¢ el jefe de la Comisi¨®n Presidencial para la Constituyente, ministro de Educaci¨®n y exvicepresidente de Venezuela, El¨ªas Jaua; la presidenta del Consejo Nacional Electoral, Tibisay Lucena; y el ministro de Interior, Justicia y Paz, N¨¦stor Reverol. Tambi¨¦n son castigados Carlos Alfredo P¨¦rez, director de la Polic¨ªa Nacional Bolivariana; Jes¨²s Rafael Su¨¢rez, comandante general del Ej¨¦rcito Bolivariano; y Sim¨®n Alejandro Zerpa, vicepresidente de finanzas de Pdvsa.
Uno de los portavoces del Gobierno estadounidense advirti¨® de que ¡°cualquier mal actor en Venezuela¡± puede ser sancionado, as¨ª como las personas que puedan integrar la Asamblea Nacional Constituyente. ¡°Vemos la fecha del 30 de julio como una l¨ªnea cr¨ªtica que, si se cruza, podr¨ªa suponer el fin de la democracia en Venezuela¡±, se?al¨® en referencia a la votaci¨®n del domingo.
Desde la llegada de Trump a la Casa Blanca, en enero, Washington ha acelerado sus penalizaciones a Caracas en un intento de aumentar la presi¨®n ante la deriva autoritaria de Maduro. Ha castigado a El Aissami y a ocho miembros del Tribunal Supremo.
Como el Gobierno de Barack Obama, Trump solo ha impuesto sanciones individuales. Pero el republicano est¨¢ considerando adoptar castigos sectoriales o financieros. El presidente se guarda por ahora esa carta a la espera de qu¨¦ ocurre en la votaci¨®n del domingo, que la oposici¨®n y EE UU consideran una maniobra de Maduro para crear un Congreso a su medida que le permita reescribir la Constituci¨®n y diluir el poder de las otras instituciones.
Cualquier intento de hacer da?o econ¨®mico a Venezuela afectar¨ªa a su industria petrolera, el ¨²nico estandarte de la paup¨¦rrima econom¨ªa del pa¨ªs caribe?o. En las ¨²ltimas semanas, ha arreciado la especulaci¨®n sobre si Trump se atrever¨ªa a decretar un embargo al crudo venezolano, lo que golpear¨ªa directamente a la l¨ªnea de flotaci¨®n del Gobierno pero podr¨ªa empeorar a¨²n m¨¢s las condiciones de vida de los venezolanos.
Pese a los ataques cruzados, ambos pa¨ªses mantienen un estrecho comercio petrolero. Estados Unidos es el primer destino de las exportaciones petroleras de Venezuela, que es el tercer suministrador para EE UU. Caracas vendi¨® en 2016 de media 741.000 barriles al d¨ªa de crudo a Washington. Teniendo en cuenta el precio de referencia del a?o pasado, el flujo equivale a un negocio de 32,2 millones de d¨®lares al d¨ªa. Citgo, que Pdvsa controla desde los a?os ochenta, es el principal comprador de combustible venezolano en EE UU.
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