La recuperaci¨®n econ¨®mica y la crisis de Venezuela empujan la campa?a de Mauricio Macri

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M¨¢s de 14 a?os despu¨¦s de la llegada al poder de un desconocido gobernador patag¨®nico, N¨¦stor Kirchner, la pol¨ªtica argentina sigue girando en torno a su apellido. ?l muri¨® en 2010, pero su mujer, Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner, incluso dos a?os despu¨¦s de perder la presidencia, monopoliza toda la actualidad de su pa¨ªs por su decisi¨®n de volver a la pol¨ªtica como candidata a senadora por Buenos Aires en las elecciones de octubre. En menos de dos semanas es la primera ronda de esos comicios, las primarias obligatorias del 13 de agosto, que funcionan como una especie de sondeo masivo, de primera vuelta, para detectar el humor del electorado y orientar el voto de los indecisos. El antikirchnerismo, que domina buena parte del poder argentino, el empresariado, los medios de comunicaci¨®n e incluso parte del peronismo, est¨¢ muy inquieto porque las encuestas se?alan que ella tiene muchas posibilidades de ser la m¨¢s votada en Buenos Aires, la provincia clave, que tiene un 40% del electorado.

Eso no tendr¨ªa consecuencias pol¨ªticas directas ¨CMauricio Macri seguir¨ªa gobernando hasta 2019 y controlando el Congreso con apoyo de algunos gobernadores peronistas- pero ser¨ªa un golpe an¨ªmico muy fuerte y podr¨ªa asustar definitivamente a los inversores y al empresariado.

Esa inquietud, muy instalada, ha vivido esta semana un giro importante. Los buenos datos econ¨®micos que est¨¢n empezando a llegar de forma insistente por primera vez en muchos meses, y la crisis de Venezuela, que est¨¢ siendo utilizada por Macri para golpear al kirchnerismo, aliado tradicional del chavismo, alientan la campa?a del Gobierno, que est¨¢ concentrado en el mensaje de que si ella vuelve, todo podr¨ªa acabar como en Venezuela.

El Ejecutivo trata de tranquilizar a todos los inquietos e insiste: puede que Kirchner logre el primer puesto ahora en las primarias, pero eso har¨¢ que todo el voto antikichnerista, ahora dividido en varias opciones, se concentre en octubre para impedir que ella gane.

Esa calma que traslada el Gobierno no convence a todos, pero lo cierto es que los datos y la crisis de Venezuela, que tiene en silencio al kirchnerismo que no se anima a respaldar a Nicol¨¢s Maduro ¨Caunque s¨ª lo hacen algunos de los periodistas cercanos a la expresidenta, como V¨ªctor Hugo Morales, que sostiene que Venezuela est¨¢ ¡°siendo atacada por la derecha internacional¡± y la Constituyente es ¡°el triunfo de la democracia¡±- pueden cambiar la campa?a. Macri est¨¢ explotando al m¨¢ximo el caos en Venezuela con la idea de que Argentina podr¨ªa estar igual si siguiese en el poder el kirchnerismo.

Los datos econ¨®micos empiezan a ser buenos sobre todo por la comparaci¨®n con 2016, un a?o dur¨ªsimo para los argentinos. Y empieza a hacer efecto la estrategia del Gobierno, que ha decidido endeudarse y utilizar ese dinero para mantener los planes sociales y tambi¨¦n para poner en marcha un importante plan de obra p¨²blica para reactivar la econom¨ªa precisamente en plena campa?a electoral. ¡°Estamos inyectando mucho dinero a la econom¨ªa, nada de esto es casual¡±, admiten desde del oficialismo.

El INDEC, la oficina oficial de estad¨ªsticas, que ahora s¨ª ofrece datos reconocidos por todos, se?ala que la industria subi¨® en junio 6,6%. La construcci¨®n subi¨® 17% impulsada sobre todo por la obra p¨²blica. La industria sigue muy golpeada por el derrumbe de 2016, pero lleva ya dos meses creciendo. Lo que s¨ª est¨¢ tirando de la econom¨ªa argentina es el campo, como demuestra el hecho de que en el sector industrial sean los agroqu¨ªmicos los que m¨¢s crecen.

Estos primeros datos que marcan un inicio de recuperaci¨®n coinciden con otros que hablan de un gran aumento de la recaudaci¨®n impositiva. Seg¨²n la Administraci¨®n Federal de Ingresos P¨²blicos (AFIP) creci¨® un 31,8% interanual en julio, por encima de la inflaci¨®n. El Gobierno destac¨® la subida de 42,8% en lo recaudado por el IVA a la industria manufacturera, dato que indica, seg¨²n la lectura oficial, que el consumo se recupera poco a poco.

El problema para el Gobierno es que estos datos macroecon¨®micos, que tampoco muestran una recuperaci¨®n explosiva aunque s¨ª que ha pasado lo peor, tardan en verse en la econom¨ªa del d¨ªa a d¨ªa. En algunas zonas del pa¨ªs, y especialmente en el conurbano de Buenos Aires, donde Cristina Kirchner concentra su apoyo m¨¢s fuerte, la crisis se sigue sintiendo muy fuerte porque la inflaci¨®n, que est¨¢ algo m¨¢s baja pero sigue fuerte, devora los salarios. Ella sigue fiel a su campa?a tranquila, amable, en la que no hace grandes m¨ªtines, sino peque?os encuentros en los que deja hablar a los que est¨¢n sufriendo la crisis y ella se limita a mostrarse como la protectora de la clase baja. En pocos d¨ªas se sabr¨¢ qu¨¦ efecto tienen las dos estrategias.